Alberto Núñez Feijóo: «Si los votantes de Vox no me votan no seré presidente de la Xunta de Galicia»

El presidente de Galicia y candidato del PP en las próximas elecciones autonómicas en esta comunidad, Alberto Núñez Feijóo, quiere lograr su cuarta mayoría absoluta el próximo 5 de abril, pero teme que la división del centroderecha lo deje «en la orilla, a un escaño» de repetir mandato. Por eso, su obsesión es pedir el voto al electorado de Vox y Ciudadanos.

¿Está en peligro la mayoría absoluta del PP en Galicia? ¿Cuál es su expectativa? ¿Y su pálpito?
Las mayorías absolutas están en peligro en toda España. Mi pálpito es que el PP puede no obtener la mayoría y quedarse a la orilla por un escaño. O, por el contrario, puede sacar un resultado excepcional. Es casi un plebiscito. Para quien no le interese que el nacionalismo, Podemos y el PSOE se repartan el Gobierno, hay una única posibilidad: el PP de Galicia. Estamos demoscópicamente mejor que hace cuatro años, pero entonces no había la fragmentación del centroderecha de ahora, y ésa la incógnita principal.
Si la mayoría absoluta dependiera de Vox, ¿usted le ofrecería un pacto al PSOE antes que a Vox?
Es que no hay un resquicio de que Vox tenga un diputado en Galicia. No lo digo yo, lo dice la demoscopia. Pero Vox sí puede evitar que el PP tenga mayoría absoluta. Si el 3% o el 4% de los votos va a Vox, ellos no van a obtener escaño, pero imposibilitarán que el PP de Galicia obtenga ese 45% o 46% necesario. El objetivo de un partido que ni siquiera presenta candidato a la Presidencia de la Xunta es echar a Feijóo. Y en eso, por sorprendente que parezca, coincide con los objetivos de Podemos, los independentistas, los nacionalistas y los socialistas.
O Feijóo o PSOE, por tanto.
Exactamente. El PSOE, con el BNG y los cinco partidos de la coalición de Podemos. En 2005 a Fraga le faltó un escaño y se produjo el bipartito. Ahora se produciría un tripartito, pero con líderes inéditos en lo que a gestión se refiere.
¿El hecho diferencial para que ni Vox ni Cs tengan peso en Galicia son los gallegos o es el PP gallego?
La mayoría de los gallegos se parece al PP de Galicia.
¿Y el PP nacional no se parece tanto a la mayoría de los españoles, entonces?
Yo creo que sí. El PP nacional ha servido a los españoles con Aznar y con Rajoy de una forma bastante eficaz. Cuestión distinta es que se ha fraccionado el centroderecha. Es evidente que un partido, cuando sufre una fractura, ha de mejorar su espectro ideológico. Es evidente que nosotros tenemos que resetear nuestros planteamientos y ensanchar nuestro partido. Ésa es la tarea de todos los dirigentes del partido del PP, empezando por el presidente Casado y siguiendo por todos los presidentes autonómicos, provinciales y locales. Ésa es nuestra tarea en los próximos trimestres.
La marca Feijóo va más allá de la marca PP en Galicia y por eso las siglas salen tan pequeñas en la precampaña. ¿Verdadero o falso?
¡Falso! Me parece muy bien que se diga, pero no deja de ser algo simpático. Primero, Galicia, que es nuestra sigla principal, y luego, el PP.
Más allá de las elecciones, y ahora que se está fraguando España Suma, ¿las siglas del PP son intocables a medio plazo, o no?
Es una pregunta que conviene reflexionar en el conjunto del partido, porque la respuesta es de enorme trascendencia política. A mí me sorprendería que desaparecieran las siglas del PSOE, por ejemplo. Pero no me atrevo a pronunciarme.
Pero entiendo que si le sorprendería que desaparecieran las siglas del PSOE, también le sorprendería que desaparecieran las del PP.
En este momento, sin una alternativa sólidamente construida, desde luego me parece muy precipitado tomar esa decisión.
Usted no ha conseguido integrar a Cs en sus listas. ¿Esto le perjudica, le favorece porque puede restar votos a Vox, o es algo inocuo?
Es una lástima, porque a mí me consta que hay dirigentes de Ciudadanos que estaban a favor de incorporarse a una candidatura única. No sé si esto sólo consistía en ganar notoriedad durante la precampaña, pero es que esto no va de cargos, ni de asesores, ni de consellerías. A fecha de hoy, no tienen ninguna expectativa, ni remota, de conseguir representación parlamentaria. Pero no es una buena noticia, en mi opinión, porque el 1% o el 2% de votos que obtenga Ciudadanos va a restar fuerza a las propuestas que compartimos y a evitar un Gobierno nacionalista, socialista y podemita en Galicia. Nosotros les ofrecimos puestos en las listas y ellos nos contestaron diciendo que sus diputados irían a un grupo parlamentario distinto al del PP y que harían exclusivamente una coalición para apoyar la investidura.
Y además le pidieron cuatro puestos de salida y una consejería.
Efectivamente. Se habló de asesores, de cargos y de una consejería de Gobierno. Un partido extraparlamentario como Ciudadanos no parece que tenga mucho interés en defender los principios que compartimos, sino en «qué hay de lo mío».
¿Descarta pescar en ese caladero ‘naranja’ para algún cargo en el Gobierno si reedita su mayoría?
Yo eso nunca lo he descartado. Tengo altos cargos que no están afiliados a mi partido. Cuando me dieron el primer cargo en Galicia, en el Gobierno de Fraga, y en Madrid, con Aznar, yo no estaba afiliado al PP.
Cambiando de tema, ¿usted cree que hay medios de comunicación que se aprovechan «de la erosión del Estado»?
Hay medios de los que yo no comparto su línea editorial ni sus contenidos. Como demócrata, los acepto. El hecho de que aquí haya libertad de expresión, libertad de prensa y en consecuencia, libertad en líneas editoriales, me parece que es un avance que tiene muchos más beneficios que perjuicios.
Cayetana Álvarez de Toledo e Isabel Díaz Ayuso se han desmarcado de las manifestaciones del 8-M. ¿El PP es feminista o no?
Vamos a ver. Yo entiendo por feminismo la igualdad real y efectiva entre el hombre y la mujer. Por supuesto que soy feminista. Me defino estrictamente feminista. El feminismo no es utilizar a la mujer con fines partidarios o políticos. Los que no son feministas son los que utilizan a la mujer para hacer política.
¿Entonces, usted sí irá a las manifestaciones del 8-M?
La verdad es que ni lo tengo planteado, ni lo hemos comentado en el partido. No creo que tenga mucha relevancia ese hecho: yo a lo que me dedico es a defender y a garantizar los derechos de las mujeres. Prefiero que me juzguen por mis obras y no por determinadas manifestaciones o comentarios.
¿Qué le parece que sea precisamente la portavoz, Cayetana Álvarez de Toledo, la que se desmarque del mensaje «institucional» del partido sobre el 8-M?
Es portavoz del grupo parlamentario, no del partido. En nuestro partido no hay un manual de candidato, o de portavoz, o de presidente. El PP es un partido de un amplísimo espectro y, por consiguiente, hemos de respetar las decisiones de los compañeros. A veces se comparten en su totalidad, a veces se comparten parcialmente y a veces no se comparten. Yo no noto que la portavoz del grupo parlamentario en el Congreso esté desmarcándose del PP.
¿Quiere que Álvarez de Toledo haga campaña en Galicia?
Se lo hemos pedido al presidente Casado, al presidente Rajoy y al PP Europeo. Pero si cualquier compañero puede aportar algo en Galicia, por supuesto que siempre estoy pendiente de todos ellos.
¿Y Aznar?
Pues no lo sé. Encantado de que pueda hacer campaña cuando quiera y donde quiera.
En Génova comentan que su sintonía con Casado es mejor ahora que nunca.
Yo siempre he hablado mucho con el presidente Casado. No tengo un termómetro para medir la temperatura entre nosotros, pero yo le puedo asegurar que hemos tenido colaboración. Yo tengo mis propias opiniones, pero soy un militante disciplinado, y militante es aquel que es útil a su partido y que produce resultados en su partido. A lo mejor no soy un candidato de manual, pero de momento he colaborado con el partido con tres mayorías consecutivas. Éso es lo que necesita el presidente Casado, victorias por mayoría.
¿Se ha gestionado mal la crisis con Alfonso Alonso en el País Vasco?
Yo no puedo sino reconocer que el PP a nivel central me ha dado toda la autonomía. No tengo ni un pero, ni un reparo a mi relación política con el partido a nivel central.
Pero en el País Vasco ocurrió lo contrario, con Alonso.
No tengo todos los datos para poder hacer una composición de lugar. Es evidente que en Euskadi se facilita que Ciudadanos entre seguro en el Parlamento, por lo cual se ha sido muy generoso con ellos. Espero que esa generosidad sea bien entendida por los electores y, sobre todo, por Ciudadanos. Pero el tratamiento ante dos realidades distintas tiene que ser distinto.
Usted habría hecho campaña con Alonso. ¿La hará con Iturgaiz?
Si podemos buscar algún hueco para ir a Euskadi o él venir a Galicia, yo encantado. Iturgaiz es un político con trazabilidad de décadas, al que conocí antes que a Alonso.
¿Y comparte con él que hay que «aunar fuerzas» con Vox?
Yo comparto que hay que aunar a los votantes de Vox, antiguos votantes del PP. Sin duda. Por eso le voy a pedir el voto a los que votaron a Vox en las últimas elecciones generales en Galicia, y les voy a decir que si no me votan, no seré presidente de la Xunta. Soy perfectamente consciente de que si los 120.000 votantes que tuvo Vox en Galicia en las elecciones generales no me votan mayoritariamente, yo tendré que abandonar la Xunta y entrarán el PSOE, Podemos y el nacionalismo. Sin esos votos, yo no puedo revalidar la Xunta, y a ellos me voy a dirigir.
En el ámbito nacional, ¿sí contemplaría unir fuerzas con los partidos y no sólo con los votantes?
Suscribo lo que ha dicho Aznar: el PP tiene que hacer lo que tenía pensado hacer, con independencia de que exista Vox. Nuestro programa, nuestros principios y nuestro posicionamiento político es el del PP. Ahora, mientras tengamos un problema de independentismo de España, Vox tendrá oxígeno. Y mientras al PSOE le resulte útil que varios millones de españoles voten a Vox, seguirán siempre inflando y alimentando a este partido, que es su salvaguarda para permanecer en el Gobierno.
Y hablando del ámbito nacional, usted ha revelado hace poco que declinó ser vicepresidente del PP. ¿Por qué lo rechazó?
Pues porque sabía perfectamente que soy presidente de una comunidad tan importante como Galicia, que requería todo mi esfuerzo y toda mi dedicación. Si sacas un 47% de votos, no lo sacas a tiempo parcial. Por cierto, no conozco a nadie que saque un 47%, sobre todo en comunidades autónomas con un espectro nacionalista amplio. Dígame usted donde hay mayoría absoluta.
¿Y por eso mismo no se presentó al congreso del PP para suceder a Mariano Rajoy? Nunca ha revelado el verdadero motivo.
Yo no podía en 10 días abandonar la comunidad autónoma. No estaba dentro de mi proyecto político, ni de mi proyecto personal. Creo que no estaba autorizado por el electorado gallego para hacerlo.
¿Si obtiene una cuarta mayoría, será la última?
Hombre, desde luego apostaría todo a que sí. Si España en este momento tuviésemos un PSOE y un Gobierno constitucionalistas, pues yo entendería que mi tarea en Galicia habría finalizado.
¿Tampoco se puede descartar al 100% que, a largo plazo, vaya a aspirar a liderar el PP?
¡Pero eso ya pasó! Estamos en otro libro. Mi mayor aportación a la presidencia de Casado es intentar obtener una mayoría suficiente para gobernar en Galicia.
¿Qué va a hacer la Xunta para prevenir el contagio de coronavirus?
Hemos contratado a 60 profesionales más para hacer frente a la posible demanda. El riesgo de coronavirus en Galicia es máximo.
¿Se puede prevenir sanitariamente el contagio sin el dinero que les debe el Gobierno por la liquidación del IVA de 2017?
Hay un ejemplo claro de asimetría. Mientras se está negociando un sistema financiero exclusivo con un presidente inhabilitado como diputado en una comunidad autónoma [Cataluña], se está debiendo a las comunidades autónomas 2.500 millones de euros. Es el mayor recorte que hemos visto en los últimos años. Es evidente que nos falta dinero para sanidad, pero yo no voy a caer en la demagogia en la que caerían en los miembros que ocupan el Gobierno si estuviesen en la oposición. Con independencia del dinero que nos deben, vamos a invertir para prevenir y, en su caso, tratar el coronavirus.
¿Se compromete a bajar los impuestos a pesar de la armonización fiscal que ha propuesto el Gobierno de Sánchez?
No creo en una subida indiscriminada de los impuestos. Nosotros los hemos bajado en estos 11 años de gobierno por un importe de 1.200 millones de euros. Cien al año. Además, Galicia es la única comunidad autónoma que tiene impuestos cero en el ámbito rural. Cero para comprar una parcela forestal o agraria, cero para vender esa misma parcela o cero para permutarla.