El nuevo Jemad jura el cargo expresando su «inquebrantable lealtad a Su Majestad el Rey y a la institución que representa»

El nuevo jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), Miguel Ángel Villarroya, ha tomado posesión de su cargo agradeciendo a la ministra de Defensa, Margarita Robles, y al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la confianza depositada en él.

Acto seguido, al inicio de su discurso, el general Villarroya quiso reiterar, «de forma indiscutible mi inquebrantable lealtad a su Majestad el Rey y a la institución que representa»

Villarroya, hasta ahora director del gabinete técnico de la ministra (puesto al que accedió con la ministra Cospedal), recordó asimismo que las Fuerzas Armadas tienen entre sus atribuciones «garantizar la independencia de España y defender su integridad territorial».

«Con abnegación, orgullo y emoción», el general del Aire se pone como reto contar «con unas capacidades creíbles y fiables».

Para terminar, ha querido recordar a todos los militares desplegados en misiones en estos momentos.

Tras su discurso, la ministra de Defensa se dirigió a los invitados al acto. «Los militares son el mejor ejemplo a seguir», dijo Robles, quien también recordó a los 3.000 hombres y mujeres que sirven fuera por la seguridad y la paz en España.

Robles también tuvo palabras de agradecimiento para el general Fernando Alejandre, anterior Jemad cesado esta semana y, como es costumbre, estaba presente en el relevo de jefes de la cúpula militar. De él dijo que se va «con la satisfacción del deber cumplido».

«Su amor a España, a las Fuerzas Armadas. Piensa en lo mejor para las Fuerzas Armadas y para España», dijo Robles del nuevo Jemad.

Se dirigió al resto de jefes de Ejércitos del que dijo «somos un gran equipo» que seguirá «defendiendo los valores constitucionales», dijo. «Como española y ministra me siento orgullosa», reiteró al tiempo que decía que «la Constitución está más fuerte que nunca». La ministra subrayó la continuidad de acción dentro del Ministerio.

Robles mencionó también en su discurso «al Rey, al que admiramos y respetamos profundamente, como ya trasladé en la Pascua Militar».

La ministra concluyó, esta vez sí, con el tradicional brindis: «Reiterando el aprecio que tenemos por Su Majestad el Rey, al que apreciamos todos. Quiero que me acompañen en este brindis… ¡por el Rey!».