El socialista Pedro Sánchez, ya sonriente, ha prometido en la mañana de este miércoles ante el Rey su cargo como presidente del Gobierno, tras haber recibido en el Congreso los apoyos de republicanos e independentistas. Durante la ceremonia en el Palacio de La Zarzuela, Sánchez ha prometido «lealtad al Rey y guardar y hacer guardar a la Constitución» y ha prescindido de los símbolos religiosos, como ya hizo la primera vez que asumió este cargo en junio de 2018. El presidente ha prometido ante un ejemplar de la Carta Magna, que es obligatorio en todos los casos, abierto por la pagina del artículo 99, que establece el mecanismo para elegir nuevo presidente tras unas elecciones.
Tras la promesa, Don Felipe ha felicitado a Sánchez y este ha comentado al Rey: «Ocho meses para diez segundos», en referencia al tiempo transcurrido desde las elecciones de abril. Y Don Felipe le ha respondido: «Rápido, simple y sin dolor» y luego ha añadido: «El dolor viene después», en alusión a los sufrimientos que conlleva gobernar. Más adelante, el presidente ha confesado ante el Jefe del Estado: «Le hemos dado muchas preocupaciones«, e incluso ha comentado que le veía »más delgado«, algo que el Rey ha descartado.
La ceremonia se ha celebrado en el Salón de Audiencias del Palacio de La Zarzuela y a ella han asistido las altas autoridades del Estado y la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, en calidad de notario mayor del Reino.
En el acto, el jefe de Protocolo de La Zarzuela ha leído el Real Decreto del nombramiento, que se ha publicado hoy en el BOE, y Sánchez ha asumido su cargo. Tras la breve ceremonia, los asistentes posaron para una fotografía.
Esta ha sido la segunda vez que Sánchez ha prometido su cargo de presidente del Gobierno ante el Rey. La primera vez fue el 2 de junio de 2018 tras ganar una moción de censura. En aquella ocasión, Sánchez también prometió «lealtad al Rey y guardar y hacer guardar a la Constitución» y se convirtió en el primer alto cargo que prescindió de los símbolos religiosos.
Don Felipe introdujo al principio de su reinado la libertad de elegir si se jura o promete en presencia de los símbolos religiosos (la Biblia y la Cruz) o solo ante un ejemplar de la Constitución, que es obligatoria en todos los casos. Hasta junio de 2018, todos los altos cargos, incluso los que eligieron la fórmula de la promesa sobre la del juramento, habían optado por mantener los símbolos religiosos.
Entre las autoridades que han asistido a la ceremonia de esta mañana, estaban los presidentes del Congreso, Meritxell Batet; del Senado, Pilar Llop; del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas, y del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes. Además, ha asistido el director general de Registros y del Notariado, Pedro José Garrido Chamorro.
Sánchez tiene previsto dar a conocer los nombres de sus ministros la próxima semana y será entonces cuando asuman sus cargos ante el Rey.
