Felipe VI viaja de Cuba a Washington en una visita privada

Asistirá a los actos de celebración del centenario de la Escuela Edmund Walsh del Servicio Exterior de la Universidad de Georgetown, en la que el Rey cursó un Master de 1993 a 1995.

De La Habana a Washington, y de visita oficial a viaje privado. El Rey llegó anoche a la capital estadounidense, donde se quedará los próximos dos días, para participar en los actos de celebración del centenario de la Escuela Edmund Walsh del Servicio Exterior de la Universidad de Georgetown, en la que Don Felipe cursó un Master de 1993 a 1995. La celebración, además, es por partida doble, dado que en 2019 se han cumplido 20 años de la creación de la cátedra Príncipe de Asturias. Doña Letizia no le acompaña en esta parte del viaje a América y ha regresado a España desde Cuba.

La visita de Felipe VI tiene carácter privado, aunque tomará parte en una gala para 400 invitados en Georgetown con motivo del centenario de la Escuela Edmund Walsh a la que está prevista la asistencia de, entre otros, el ex presidente Bill Clinton y la ex secretaria de Estado Madeleine Albright, esta última ex alumna y profesora del centro académico.

El Rey llega a Estados Unidos justo después de haber concluido su primer viaje oficial a Cuba, en el que el ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, ha sido muy duro con la política estadounidense hacia ese país, hasta el punto de emplear, por primera vez desde que llegó al cargo, la palabra «bloqueo» para referirse a ella. «Hay que llamar a las cosas por su nombre», declaró Borrell, que próximamente dejará su cargo por el de Alto Representante para la Política Exterior de la UE.

En los últimos meses, Pedro Sánchez ha endurecido la retórica contra las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como dejó de manifiesto en su intervención en la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre. Así quedó claro el 23 de ese mes, cuando el columnista de la edición online del Washington Post Ishan Tadoor tituló una entrevista con el presidente español «el líder de España ofrece una alternativa al trumpismo».

Trump ha dado marcha atrás de forma drástica en la apertura hacia la dictadura cubana llevada a cabo por su predecesor, Barack Obama. Trump ha endurecido los requisitos bajo los cuales los estadounidenses pueden viajar a Cuba, y limitado las posibilidades de inversión y comercio con la isla.

EEUU también ha reducido de manera importante el personal de la Embajada estadounidense en La Habana – reabierta por Obama en 2015 tras 45 años sin relaciones entre los dos países -, después de haber acusado al régimen cubano de llevar a cabo «ataques sónicos» contra sus diplomáticos, a consecuencia de los cuales éstos sufrieron vértigo, migrañas, náuseas y pérdidas de memoria.

Washington nunca aportó pruebas de la responsabilidad cubana en esa acción. Un estudio del Gobierno de Canadá, cuyos diplomáticos también experimentaron síntomas parecidos, concluyó que la causa era el uso de determinados insecticidas.