Ley D´Hont: ¿Cómo se decide cuántos diputados habrá en el Congreso por cada partido?

La Ley D’ Hont es un sistema electoral de cálculo proporcional que divide el número de votos emitidos para cada partido entre el número de cargos electos con los que cuenta cada circunscripción. Una vez realizado el escrutinio, se ordenan de mayor a menor, en una columna, las cifras de votos obtenidos por cada candidatura, eliminando a aquellas que no hayan llegado al mínimo del tres por ciento de votos de los totales. A continuación por distrito electoral se elabora una tabla en la que se va los partidos se sitúan de arriba abajo para proceder a ir dividiendo el número de votos de cada candidatura entre 1, 2, 3, 4… y así sucesivamente hasta que no se pueda dividir más. Una vez hecha la tabla se van asignando escaños teniendo en cuanto los que les corresponde a cada circunscripción.

¿Cuántos escaños corresponden a cada circunscripción?

Lo primero para entender como funciona la Ley D´Hont es tener en cuenta que no a todas las circunscripciones se le asignan el mismo número de escaños, estos se reparten por ley y en función de la población. En España contamos con un total de 52 circunscripciones o distritos electorales, uno correspondiente a cada provincia y dos referentes a Ceuta y Melilla. El Congreso tiene 350 escaños que se asignaran siguiendo un sistema proporcional por circunscripción y número de votos a cada partido. Por una parte, a Ceuta y a Melilla les corresponden 1 escaño a cada una, y el resto de circunscripciones cuentan con un mínimo de dos escaños por ley. El resto de escaños, 248, se asignan en función de la población de cada provincia. Es decir, Madrid cuenta con mucha más población que León, por lo que a la capital se le asigna más escaños que a la provincia. Así, las ciudades grandes, Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante y Sevilla tienen más representación en el congreso que el resto de ciudades, y, de hecho, estas cinco circunscripciones representan al 31% total de los diputados.

Sistema electoral español

¿Cómo funciona la Ley D´ Hont?

Sabiendo esto y para entender la imagen pongamos un caso concreto. Imaginemos que la tabla corresponde a la provincia de Murcia, y a que esta le corresponden dos escaños por ley y otros tres por población, ahora se deben asignar los escaños asignados a cada candidatura en función del número de votos y utilizando el sistema de la Ley D´Hont. Hay cinco escaños que repartir, y cuatro partidos o candidaturas que entran dentro de los requisitos de este sistema, es decir que representan más del 3% de los votos. Imaginemos que la A corresponde al Partido Popular, todos los votos de este partido se irán dividiendo y disponiendo de izquierda a derecha, lo mismo con la B, con la C y con la D. A continuación se irán asignando escaños a los resultados más altos de la tabla hasta llegar a los cinco escaños que hay que completar. De esta manera el resultado final es que la candidatura más votadas obtiene dos escaños y la menor votada no obtiene ninguno porque su primera el resultado de su primera división no está entres los cinco resultados más altos de la tabla.

Este sistema por tanto premia a los partidos más votados y castiga a los menos votados, de hecho, ha permitido que unos de los dos grandes partidos nacionales, el PP o PSOE, sin haber obtenido nunca más de la mitad de los votos, hayan podido tener mayorías absolutas en el Congreso de los Diputados, comunidades autónomas o ayuntamientos. Esto provoca que un partido «X» que tenga muchos votos pero muy divididos por circunscripciones pueda llegar a no tener ningún escaño. En cambio un partido con menos votos «X» pero con mucho apoyo en una sola provincia, como suele con los partidos autonómicos puede llegar a conseguir más representación en el congreso a pesar de tener menos votos. Este reparto proporcional beneficia tanto a los grandes partidos políticos como a los partidos nacionalistas, aunque permite un acceso más sencillo a las formaciones más pequeñas, al contrario que con otros sistemas de proporcionalidad como el directo en el que la fuerza más votadas en cada circunscripción se lleva todos los escaños