México evita «in extremis» los aranceles de Trump aceptando todas sus condiciones

En el último momento, Estados Unidos y México han logrado un acuerdo con el cual quedan suspendidos los aranceles del 5% sobre todos los productos mexicanos que iban a entrar en vigor el lunes. Según ha anunciado el presidente norteamericano, Donald Trump, en la red social Twitter, el gobierno mexicano «ha aceptado tomar una serie de duras medidas para frenar el flujo migratorio».

Entre esas medidas, según reveló anoche el departamento de Estado norteamericano, está el despliegue de la Guardia Nacional mexicana en el sur del país y la aceptación de que quienes crucen ilegalmente a EE.UU. serán devueltos a México rápidamente para tramitar allí su solicitud de asilo. «México ofrecerá empleos, sanidad y educación de acuerdo con sus principios», dijo el servicio diplomático estadounidense en un comunicado.

El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, dijo en un comunicado enviado por correo electrónico que “EE.UU. espera trabajar junto a México para cumplir estos compromisos y para detener la marea de inmigración ilegal a través de nuestra frontera sur y hacer que esta sea fuerte y segura”.

Según reveló recientemente la Casa Blanca, mayo registró el mayor número de entradas de sin papeles en EE.UU. en siete años, con casi 140.000 detenidos tras cruzar ilegalmente la frontera. En respuesta, el 30 de mayo, el presidente anunció unos aranceles del 5% a todas las importaciones de México, que subirían al 25% en octubre si seguía el flujo migratorio de personas que huyen de Centroamérica.

Acaba así una maratón de tres días de reuniones bilaterales en Washington con las que México ha intentado sortear una catástrofe económica, ya que vende cada año a EE.UU. bienes por un valor total de 372.000 millones de dólares (328.000 millones de euros), según cifras oficiales del gobierno norteamericano correspondientes a 2018.

Trump, en su intento de reducir la inmigración ilegal, ha presionado al máximo a los países centroamericanos de los que proceden esos solicitantes de asilo, restringiendo y recortando ayudas. Además, ha exigido a México que detenga y deporte a esos emigrantes cuando crucen por su territorio con destino a EE.UU.

La oficina del vicepresidente de EE.UU. reveló ayer a la agencia Associated Press que entre las condiciones inamovibles se encontraba una reforma integral del sistema de concesión de asilo en México y el despliegue de al menos 6.000 soldados en la frontera con Guatemala.