No es ningún secreto que Rafa Nadal es el principal atractivo año tras año en Roland Garros. Sus once títulos en la tierra de París le han convertido en la estrella inigualable del Gran Slam y prueba de ello ha sido el entrenamiento de esta mañana. Junto al también español Pablo Cuevas ha protagonizado un partidillo en el que la presencia en las gradas ha superado con creces las expectativas.
La pista Suzanne Lenglen se llenó para presenciar los primeros raquetazos de Nadal en la tierra parisina. El debut oficial no se producirá hasta el lunes, cuando jugará contra el alemán Yannick Hanfmann, de 27 años, 184 del mundo y neófito en Roland Garros. Hasta entonces los amantes al tenis y a Nadal se tendrán que conformar con las jornadas de preparación del español.
