El presidente del Senado, Manuel Cruz, ha levantado ampollas al sugerir que «una sentencia absolutoria» para los independentistas que lideraron el procés «lo reconciliaría todo». Así se ha manifestado en una entrevista en «El País» en la que apunta a que una resolución del Tribunal Supremo en otro sentido «generará una respuesta en Cataluña porque los sectores independentistas reaccionarán».
El recién elegido presidente de la Cámara Alta deja caer que lo conveniente para acallar a los independentistas y evitar represalias es que el Supremo absuelva a Oriol Junqueras, Raül Romeva, Jordi Sánchez, Jordi Cuixart, Josep Rull y Jordi Turull.
Como era de esperar, las reacciones a estas polémicas palabras y a la intromisión en la labor de la Justicia no se han hecho esperar. El primero en hablar ha sido Pablo Casado, quien a través de las redes sociales ha señalado que el senador del PSC ha reclamado hoy a los magistrados del Supremo que «absuelvan a los procesados por dar un golpe contra nuestra democracia».
El presidente de los populares exige que «se retracte y pida disculpas por tan indecente injerencia. Es una vergüenza inadmisible en democracia».
En los mismos términos se ha expresado el líder de Ciudadanos Albert Rivera. Contundente, asegura lo siguiente: «El presidente del Senado puesto por Sánchez y el PSOE presiona a los jueces para que absuelvan a los separatistas que dieron un golpe a la democracia. Una injerencia intolerable. Exijo a Manuel Cruz que retire estas palabras y respete el trabajo de nuestros servidores públicos»
Tras ellos han llegado más. La siempre activa Cayetana Álvarez de Toledo ironizaba ante las palabras del senador del PSC: «Qué cruz». Palabras que llegan en plena jornada de reflexión. Así, recordaba las palabras exactas del ahora presidente del Senado.
Críticas desde la magistratura
Como no podía ser menos, el ámbito judicial también ha mostrado su disconformidad y su rechazo a las palabras del presidente del Senado, Manuel Cruz. La Asociación profesional de la Magistratura se ha dirigido directamente al senador del PSC: «Lamentablemente para usted, la Justicia no persigue fines politicos». A buen entendedor…
Pero quizá, el mensaje que más sorprende data del 21 de mayo. Y es que hace tan solo cuatro días, el presidente del Gobierno Pedro Sánchez, ensalzaba la «lealtad al Estado y a las instituciones» de Manuel Cruz, el mismo que hoy, ya como presidente del Senado, no duda en sugerir «injerencias» en la Justicia.
Desde Vox han sido más tajantes al pedir la dimisión de Manuel Cruz. Ha sido el líder de la formación, Santiago Abascal, quien ha asegurado que «el presidente del Senado debería dimitir por sus inaceptables e ilegítimas presiones al Tribunal Supremo, sustentadas además en la falacia de que la cesión arreglaría el problema». A juicio del líder de Vox, lejos de solucionar nada, el problema se «agravaría», por lo que desde su foramción seguirán como acusación particular para pedir «severas condenas».
