Los niños ingresados en el hospital Infantil de Zaragoza vivieron ayer una jornada feliz. En medio de la calma producida por el puente de la Cincomarzada, que estos días ha vaciado numerosas habitaciones, recibieron la inesperada visita de miembros de las fuerzas de seguridad y de los servicios de emergencia que les llevaron juguetes, jugaron con ellos y les sacaron de la vida rutinaria del centro sanitario.
Además, varios perros de distintas unidades caninas hicieron una demostración de sus capacidades en el vestíbulo del edificio, adonde bajaron algunos de los pacientes.
Es la primera vez que en Zaragoza se juntan policías, guardias civiles, militares, bomberos y personal de Protección Civil para animar a los pacientes de menor edad y también a los lesionados medulares, una actividad promovida por la entidad Ningún Niño sin Merienda, de La Almunia, y llevada a cabo por la Asociación Sonrisas.
«Estoy muy contenta», les dijo con la alegría pintada en sus labios Paula, una niña ingresada en la planta de Oncología, a la que los visitantes regalaron un rompecabezas de Frozen, basado en una escena de la película El reino del hielo, de Disney.
Sofía, de solo dos años y cuatro meses, también se llevó su correspondiente regalo y mando besitos a la comitiva que entró en su habitación, compuesta por un miembro de cada cuerpo de seguridad y equipo de emergencia. «Está aquí por una gastroenteritis, pero está a punto de irse», dijo Susana, su madre.
«Me parece algo entrañable», dijo Javier, teniente en el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), que explicó que es «la primera vez» que su unidad acude junto a otros cuerpos a una misión que consistía en hacer sonreír a los pacientes más pequeños. «Al principio vienes con un poco de inquietud, pero ellos te dan más ganas de vivir», explicó.
Entre los visitantes figuraba también un grupo de payasos, Los Contagiosos, que normalmente van los jueves a los hospitales y ayer no quisieron perderse el acontecimiento. «Han entrado los perros al hospital porque estamos en un periodo de adaptación», señaló una portavoz del Infantil. «Lo hicieron por primera vez en septiembre y octubre, para el Pilar», añadió.
