Los consejos del Ayuntamiento de Zaragoza, de Podemos, sobre cómo consumir drogas: «pulveriza bien la cocaína»

El Partido Popular ha pedido la retirada inmediata de un folleto que ha editado el Ayuntamiento de Zaragoza, gobernado por Zaragoza en Común (Podemos), y que aborda el consumo de drogas de un modo “completamente contraproducente en lo que se refiere a las políticas de prevención”.

Financiado por el Plan Integral del Casco Histórico, destinado a toda la población del distrito, especialmente a la juventud, la publicación banaliza, según el PP, las drogas ilegales “equiparándolas no sólo con sustancias legales, sino también con medicamentos o alimentos”. Así, se puede leer que “en ningún lugar del mundo ha existido una comunidad humana que no haya utilizado sustancias psicoactivas. Hoy las seguimos usando cotidianamente todas las personas sin excepciónalcohol, tabaco, cánnabis, Valium, trankimazín, paracetamol, cocaína, anfetaminas, hongos psilocibios, café, cacao…”.

El folleto también adopta un tono neutral ante el asunto, de tal modo que no adopta un mensaje contra el consumo, sino que parece dejar la puerta abierta a que sea cada persona la que decida. Como ejemplos, dos extractos: “Hay gente que habla de medicamento cuando una sustancia se usa en beneficio de la salud y sin embargo habla de drogas cuando se usa en beneficio de la diversión pero en realidad son lo mismo” y “Ha quedado patente que la prohibición no ha acabado con el consumo de estas drogas ilegales. Hoy día hemos podido confirmar que informar a los ciudadanos de una manera clara y neutral es la única solución al problema”.

Cuando las autoridades sanitarias, tanto nacionales como internacionales. y organismos como la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción no paran de insistir en alertar del riesgo del consumo de cualquier tipo de drogas y de advertir, sobre todo a los jóvenes, del peligro de probarlas, este folleto, no sólo distingue entre “prevenir los problemas asociados al consumo versus prevenir el consumo per se”, sino que recuerda que “hay que hablar de riesgos… y también de placeres y de salud”, porque si se alarma demasiado se corre el riesdo de “reproducir la fábula de Pedro y el lobo”.

Es más llegan a recomendar saber elegir el tipo de cánnabis que se consumo: “dependiendo del tipo de efectos buscados, más psicodélicos, más relajantes, terapéuticos, para alguna dolencia o problema…, deberá buscarse un tipo u otro de cánnabis con la proporción de cannabinoides adecuada”.

Por tanto, el Partido Popular ha exigido la retirada del folleto y ha pedido explicaciones de por qué “este Ayuntamiento, que destina recursos a luchar contra la droga a través del Centro Municipal de Prevención de Adicciones, ha cometido el error inaceptable de promocionar junto a esta asociación ConsumoConciencia un folleto tan equivocado, irresponsable y contraproducente”.

Sobre otras drogas también se habla largo y tendido y, así, sobre el speed escriben lo siguiente: “La dosis depende de la fisiología de cada persona y del nivel de tolerancia que haya alcanzado a la sustancia. En general, se recomienda que las rayas de speed sean más pequeñas que las de cocaína debido a que la anfetamina es más potente. Para evitar hemorragias nasales, conviene pulverizarlo bien. Cuando el speed se ha hecho una pasta puede ser útil calentarlo un poco hasta convertirlo en polvo. Otra opción es consumirlo en bombitas. Se deben espaciar más las tomas que si se consume cocaína puesto que la potencia y la duración de los efectos es mayor. En ciertos contextos o situaciones el speed puede aumentar la temperatura del cuerpo. Hidratarse convenientemente con agua o bebidas isotónicas y realizar descansos ayudarán a evitar este efecto. Tras su uso, es recomendable aspirar agua tibia, preferentemente salina, para limpiar las fosas nasales y evitar acumulaciones de sustancia que pudieran dañarlas”.

Y para terminar, la cocaína: en contraindicaciones, nos avisan de “no consumir en caso de embarazo, lactancia, enfermedades del riñón o corazón, si se conduce o hay problemas sicológicos. También debe evitarse su consumo si se está recibiendo cualquier tipo de medicación”. Y en cuanto a las precauciones, dicen: “para fabricar un rulo que no dañe los epitelios nasales es preferible utilizar un papel o cartón enrollado que tubos o cañas de materiales duros. Pulverizar bien la cocaína (machacando bien los cristalitos previamente a la aspiración) reduce la aparición de hemorragia y ulceraciones en las mucosas de la nariz”.

Esta asociación, Consumo Conciencia, llega a incluir en su página web un “guía de mezclas de drogas” con indicaciones sobre los riesgos: “riesgo bajo, cuidado, no seguro…” y llega indicar que la “posología” del cánnabis, por ejemplo, “depende de cada persona, de su estado físico, de su nivel de tolerancia…” y da hasta “contraindicaciones” para niños y mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.