El Real Zaragoza conseguía salvar un punto vital en Alcorcón. En un encuentro en el que los blanquillos han sufrido mucho, con una defensa que ha dejado mucho que desear, finalmente lograban mantener el empate en el marcador.
Comenzó adelantándose el Zaragoza en el minuto 3 con un tanto de Zapater, pero el Alcorcón acabaría empatando y dominando el balón con más intensidad y agresividad en el juego. El sufrido punto que suma el conjunto blanquillo es positivo para un Real Zaragoza cuyo único objetivo ahora mismo es salvar los papeles en la categoría.
El Real Zaragoza saltaba al campo de Santo Domingo con Cristian Álvarez bajo los palos; Benito, Perone, Verdasca, Lasure; Eguaras, Javi Ros, Zapater, Febas; Pombo y Borja Iglesias.
Por su parte, el equipo local lo hacía con Casto; Laure, Burgos, David Fernández, Bellvís; Errasti, Borja Domínguez; Kadir, Mateo, Peña; y Jonathan Pereira.
El encuentro comenzaba del lado del Real Zaragoza que en sólo tres minutos lograba ponerse por delante en el marcador. El capitán Zapater remataba con la derecha un balón suelto que lograba meter pegado al poste en la portería de Casto.
Sin embargo, los de Alcorcón, lejos de amedrentarse, se venían arriba y, Jonathan Pereira, revolucionado, lograba poner en apuros a Cristian Álvarez con varios disparos, uno de ellos a puerta vacía, que sin embargó no lograba materializar.
No cejaría en su empeño el 9 del conjunto alfarero que en el minuto 31, y tras un error de Verdasca en un despeje, aprovechaba para rematar con la derecha y empatar el encuentro.
Los madrileños lograban hacerse con una amplia posesión del balón mientras que al Zaragoza le estaba costando hilvanar los pases y salir de la presión a la que le estaban sometiendo los madrileños. De esta guisa se llegaba al descanso del partido.
Segunda parte
La segunda parte comenzaba con cambio en el conjunto blanquillo. Entraba al campo Jesús Alfaro sustituyendo a Aleix Febas. En el arranque de este tiempo volvía tener el balón el Real Zaragoza. A punto estuvo Eguaras de volver a adelantar a los maños pero el remate salió rozando la escuadra derecha de Casto.
Como fiel reflejo de la primera parte, pronto empezarían a perder fuelle los blanquillos y tomaban protagonismo los de Alcorcón, que se hacían dueños de la pelota. El Real Zaragoza resistía en la defensa pero tenía dificultades para lograr llegar a campo rival.
Pasaban los minutos y el partido se tornaba en un erial en el que el Real Zaragoza sufría para mantener el empate, con varias ocasiones peligrosas por parte del Alcorcón que a punto estuvo de marcar en el descuento. Los blanquillos rezaban para que llegara ya el final del partido. Y así sucedía. Terminaba el partido con empate a uno en el marcador.
