Comandante de la Flotilla: «Cada cinco años nuestros submarinos son totalmente revisados»

El capitán de navío Alejandro Cuerda Lorenzo (Cádiz, 1965) es desde hace seis meses el comandante de la Flotilla de Submarinos de la Armada Española. También es el jefe de la Base y de la Escuela de Submarinos, situadas en el Arsenal de Cartagena. Mandó el submarino S-62 Tonina de 2003 a 2005.

¿En qué estado se encuentra la flotilla de submarinos?

Los tres Submarinos han alcanzado ya los 30 años de vida, siendo el Galerna el más veterano con 34, le sigue el Mistral con 32 y por último el Tramontana con 31 años. Si bien es cierto que son submarinos que ya tienen acumuladas miles de horas en inmersión y años de operatividad, la Armada no ha escatimado en costes para dotarlos de un mantenimiento específico y amplio a lo largo de todo su ciclo de vida operativo. Este factor ha servido para mantenerlos a un nivel alto de seguridad.

¿A qué revisiones se les somete para evitar accidentes como el del argentino ARA San Juan?

Los mantenimientos de tipo preventivo se realizan durante seis semanas a cada submarino, sin excepción, cada cuatro meses, en los denominados Periodos de Inmovilización Programada. Se hace un seguimiento específico de los equipos que están trabajando en continuo y sufren mayor desgaste, revisando especialmente los circuitos críticos que afectan a la seguridad en inmersión. Cada cinco años de operatividad, el submarino es revisado en su totalidad, en lo que se denomina las «obras de gran carena», que duran entre 18 y 24 meses. Estas obras las realiza Navantia. El pasado mes el Consejo de Ministros aprobó ya la gran carena del submarino Galerna. Igualmente se hará con el Mistral (2019) y el Tramontana (2023), lo que nos permitirá extender otros cinco años la operatividad de estos tres submarinos de la serie S-70.

¿Cuáles son las misiones más comunes que realizan?

Nuestros submarinos realizan una media de 110-120 días de mar al año: un 40% de los días están dedicados a realizar misiones nacionales de vigilancia y control del mar; un 10% lo dedicamos a la participación en ejercicios internacionales; y un 50% nuestros submarinos son desplegados en operaciones reales en el Mediterráneo, en apoyo a las operaciones que actualmente tiene la OTAN de lucha contra el terrorismo (Operación Sea Guardian), e intercambio de información con la operación de la UE de lucha contra la inmigración ilegal (Operación Sophia).

¿Por qué es una capacidad que España no se puede permitir perder?

Disponer de submarinos ofrece a las naciones que los tienen un importante poder de disuasión. También una considerable capacidad de obtención de inteligencia de forma encubierta.

¿Cuándo se espera que entre en servicio el submarino S-80?

La previsión actual es en 2022. La Armada tiene que designar la primera dotación del S-81 a finales de 2019, ya que el proceso de formación de esta dotación es largo al tratarse de un concepto completamente nuevo para nuestra Arma Submarina.

La familia del Arma Submarina fue golpeada por el accidente del ARA San Juan, arrebatando 44 vidas. Desde su experiencia, ¿qué pudo fallar?

Los hechos ciertos que sabemos es que la última posición del submarino fue a 240 millas al este de la costa del golfo de San Juan el 15 de noviembre. Se recibió un mensaje que advertía de una entrada de agua por el «snorkel» (tubo de inducción para ventilar el aire y recargar el motor) que le provocó un incendio y un cortocircuito en la batería. Se comunicó que seguían navegando con la mitad de la batería disponible y la mitad de su capacidad propulsora. Tres horas después se produjo un ruido hidroestático violento. ¿Mi hipótesis? La avería eléctrica pudo complicarse con otra entrada de agua que le dejó sin propulsión, sin batería y sin gobierno. Eso en medio de la mala mar pudo provocar que se fuera al fondo y que superara la cota de colapso (450-500 metros de profundidad) e implosionara.

¿Qué dificultades entraña la búsqueda de ese submarino hundido?

Encontrarlo es un reto sin precedentes porque la zona de búsqueda equivale al tamaño de España y tiene una orografía submarina muy diversa con profundidades de 200 a 3.000 metros.

¿Qué conlleva ser submarinista?

Un espíritu diferente que impregna a todos. Desde el jefe de la Flotilla al más moderno de los marinos submarinistas. Todos con orgullo de ejercer, más que un trabajo, una vocación de servicio a España.