La invitación al Rey para ir a Notre Dame era personal e intransferible

El ministro de Cultura, también invitado, tampoco fue por un «compromiso familiar»

Macron reúne a Trump y Zelenski en el renacer de Notre Dame

La reapertura de Notre Dame anteayer en París se convirtió en una gran cumbre informal de líderes políticos de todo el mundo, en especial de Europa. La presencia del presidente electo estadounidense, Donald Trump; del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski; de los Reyes de los belgas, Felipe y Matilde; del presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier; de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni; de la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden; del Príncipe Guillermo de Inglaterra o de los Reyes de Marruecos y Jordania, entre otros muchos dirigentes -hubo hasta cuarenta jefes de Estado-, dio realce de enorme calado internacional a la ceremonia, seguida además por millones de personas de todos los países a través de las imágenes de televisión.

Esa importante presencia de líderes internacionales hizo que se notara más, por contraste, la ausencia de una delegación española a ese nivel. Ningún miembro de la Familia Real española ni del Gobierno estuvo en el acto de París sin que hayan trascendido las razones. Es cierto, no obstante, que tampoco asistieron ni el Papa Francisco ni la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pero esa circunstancia tampoco explica los sucedido, ya que los principales países europeos enviaron una representación acorde a la ceremonia.

Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores explicaron a ABC que la invitación de Francia fue al Jefe del Estado, Felipe VI, y que era «personal e intransferible», lo que contrasta, por ejemplo, con la presencia del Príncipe Guillermo, Heredero de la Corona británica y que asistió en representación de ésta, o de la primera ministra italiana Georgia Meloni.

Fuentes de la Casa Real consultadas por ABC, por su parte, declinaron dar una explicación sobre una ausencia tan llamativa más allá de afirmar que «unas invitaciones se aceptan y otras no, y nunca se explican las razones de esa decisión».

También estaba invitado al acto el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, cuya ausencia tuvo unos motivos más prosaicos. Según fuentes de su departamento decidió no acudir porque tenía «compromisos familiares» previos, lo que no deja de ser llamativo dada la importancia del acontecimiento.

Críticas del PP

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, considera «una vergüenza» para España la ausencia de representación nacional en la reapertura de la catedral de Notre Dame y centra sus críticas en el Ejecutivo. «Una vez más, el Gobierno no está a la altura de la sociedad a la que debe servir», afirmó en un mensaje en redes sociales.

«Sorprendente la ausencia de España en la ceremonia por la reconstrucción de la catedral de Notre Dame; debería avergonzarnos como país. El ministro de Cultura, al menos, debería haber acudido», escribió por su parte Borja Sémper, portavoz de los populares.

«Sorprendente la ausencia de España en la ceremonia por la reconstrucción de la catedral de Notre Dame; debería avergonzarnos como país«

Borja Sémper

Portavoz del PP

«Enorme decepción y pena porque en uno de los actos más importantes de Europa, la inauguración de Notre Dame, España no ha estado representada. El Gobierno prefiere aislar a nuestro país a reconocer la verdad: las raíces cristianas de Europa», criticó por su parte Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid.

La polémica, por tanto, amenaza con crecer en intensidad en las próximas horas, sobre todo por el hecho de que nadie ha dado una razón clara de por qué ninguna autoridad española asistió al acto.