El relevo en el PSOE de Aragón: un nombre, un enfrentamiento y muchas espinas

Javier Lambán y Emiliano García-Page fueron los dos únicos líderes autonómicos que desentonaron en el último Comité Federal del PSOE, a comienzos de septiembre

El PSOE Aragón tendrá un nuevo líder a finales de febrero. Es la única certeza que el proceso renovador del partido a nivel nacional deja, por ahora, en la comunidad. Javier Lambán, todavía secretario general y expresidente autonómico, abandonará la dirección que ha ostentado durante la última década y dejará paso a un nombre por ahora desconocido. El conflicto con Ferraz y las diferencias entre la dirección regional y la federación altoaragonesa marcan el camino de la renovación, con el nombre de Pilar Alegría en el horizonte, latiendo a baja intensidad.

Anunciado en innumerables ocasiones, Lambán descartó hace meses seguir liderando el PSOE tras perder el Gobierno de Aragón. Un hecho que ha abierto una complicada situación en la comunidad respecto a la dirección nacional del partido. Sin poder de gestión en el territorio, más allá de la DPZ, el líder del socialismo aragonés se ha enfrentado a Pedro Sánchez en cada uno de sus pactos políticos. Especialmente beligerante ha sido en el caso del cupo catalán, una acción que Lambán no comparte y que rechaza. Él y el castellano manchego Emiliano García-Page fueron los dos únicos líderes autonómicos que desentonaron en el último Comité Federal del PSOE, a comienzos de septiembre.

Como el expresidente de Aragón ha expresado ante tantos medios de comunicación, su postura es minoritaria en el PSOE nacional. Consciente de su limitación, por falta de apoyo, Lambán manifiesta las contradicciones de Sánchez, señala “sus cambios de opinión” y dibuja una hoja de ruta que en nada se parece a la que hoy ejecuta el presidente del Gobierno. El secretario general aragonés reivindica hoy a Felipe González y a Alfonso Guerra más que nadie, a esa “Edad de Oro del socialismo español” que hoy da la espalda a diario a Pedro Sánchez. Con la sola complicidad pública de García-Page, el líder ejeano asegura “recibir mensajes de muchos compañeros” dándole la razón, pero callados ante las posibles represalias de Sánchez.

Fue precisamente entonces, en septiembre, en pleno corazón de Ferraz, donde las diferencias dentro de la comunidad cogieron tinte nacional. El secretario general del PSOE del Alto Aragón, Fernando Sabés, pidió la palabra para, durante cinco minutos, contradecir a Lambán y alinearse al completo con la tesis sanchista. De sobra conocido en el territorio, la distancia entre el líder oscense y el autonómico es irreconciliable desde hace días. De hecho, la federación altoaragonesa ha pedido en muchas ocasiones que el relevo se activase desde Aragón y no se tuviera que esperar a que el proceso emanase de Ferraz. Victoria, al menos en la organización del cónclave, para un Lambán que se irá apurando los tiempos marcados por la normativa del PSOE.

La división en el territorio es clara. Huesca ve con buenos ojos el camino marcado por Pedro Sánchez, mientras Zaragoza y Teruel mantienen su fidelidad a la dirección de LambánJuan Antonio Sánchez Quero, secretario general en Zaragoza y presidente en la DPZ, domina orgánicamente todos los rincones de su territorio, aunque las grietas existen y las voces discordantes empiezan a exigir nuevos rostros en la dirección. Muestra es, por ejemplo, la aparición de una segunda candidatura en la recogida de avales para acudir en la delegación a este Congreso Federal de Sevilla. Un toque de atención a uno de los hombres de confianza de Lambán, el único que tras la debacle de mayo de 2023 mantuvo su cuota de poder en todo Aragón.

En Teruel, Mayte Pérez, mano derecha de Lambán, mantiene más tranquila la situación. Pero haberlas haylas, las voces críticas, con representantes sanchistas en el Congreso que también arrastran apoyos en la provincia turolense, como el diputado Herminio Sancho. Ser la federación más pequeña en número de afiliados no ayuda para que Pérez pueda ser la futura líder regional. Aquí, Zaragoza reivindica su peso en militantes.

Faltan nombres claros en el territorio para dirigir el partido. El ala lambanista no ha preparado, aún, un candidato que releve al hombre que ha transformado la comunidad en la última década. Además de Pérez y Sánchez Quero, Darío Villagrasa, secretario de organización de Lambán, estaría en los puestos de salida sin que ninguno de los tres haya dado todavía un paso al frente para erigirse como líder. Pero los tres están extremadamente marcados por su cercanía a Lambán.

El ala oscense, puramente sanchista, aprobará la llegada de una voz de Ferraz y, a la espera de que ella lo confirme, vería con buenos ojos a una Pilar Alegría –que pertenece a la federación zaragozana- como secretaria regional del PSOE.

La portavoz del Gobierno y ministra de Educación y Deporte sonaba con más fuerza hace unos meses que ahora, lo que hace parecer que la ministra aragonesa no tiene como preferencia dirigir el partido en la comunidad y volverse a enfrentar al popular Jorge Azcón, al que ya venció en unos comicios municipales. Al menos, no lo ha verbalizado públicamente. Pero cuando se abra el periodo de presentar candidaturas a la secretaría general, unos y otros deberán posicionarse. Y no hay nada escrito: desde las primarias descarnadas al candidato de consenso todo está sobre la mesa.

Incluso en el partido se abre el debate a la otras veces temida bicefalia, con un secretario general que amarre el partido en sus horas bajas y que permita ganar tiempo para elegir a un candidato a la Presidencia que pueda arrastrar votantes más allá del aparato. En el camino hay espinas y, por ahora, más incógnitas que certezas.