El líder opositor afirma que las fotografías que se tomaron en la Embajada española fueron sin su permiso
El candidato opositor de Venezuela, Edmundo González, afirma que buscó refugio político debido a que las fuerzas de seguridad del presidente Nicolás Maduro «iban a por él». González, quien según la oposición es el verdadero ganador de las elecciones de julio adjudicadas a Maduro, ha confesado a Reuters durante una entrevista en Madrid que podría haber sido encarcelado y posiblemente torturado en un «centro de tortura» al estar acusado de terrorismo si se hubiera quedado en Venezuela. Asimismo, ha asegurado que las fotografías y grabaciones de audio que se tomaron fueron sin su permiso, descartando que hayan sido realizadas por el embajador
El exdiplomático de 75 años partió hacia España al poco de obtener garantías de que su familia y sus propiedades en Venezuela estarían seguras, ha dicho, y ha agregado que quería ser libre de buscar el apoyo de los líderes mundiales para su caso para ser presidente. «Un funcionario de seguridad que trabajaba conmigo me llevó aparte y me dijo que había recibido información de que los órganos de seguridad venían a buscarme y que era mejor refugiarme», ha asegurado ante la citada agencia. «Yo podía haberme escondido, pero tenía que ser libre para poder hacer lo que estoy haciendo, transmitir al mundo lo que pasa en Venezuela, hacer contactos con líderes mundiales».
El líder opositor sostiene que su papel en el exilio consiste en establecer el mayor número de contactos con los dirigentes políticos españoles, algo que ya ha hecho al reunirse con importantes figuras políticas del país desde su llegada el 8 de septiembre. Además, tiene la intención de dirigirse al Parlamento Europeo, tras recibir invitaciones para visitar Alemania, los Países Bajos y la Comisión Europea, por lo que realizará una gira por Europa.
A pesar de la situación actual, afirma que confía en que todavía sea posible una transición pacífica del poder en Venezuela con él como la persona indicada para liderarlo. «Quiero asegurar que se respete la voluntad de los ocho millones de venezolanos que votaron por mí el 28 de julio», ha dicho, en referencia a las afirmaciones de la oposición sobre una victoria aplastante, basadas en los recuentos de votos que ha publicado. «Esa es una decisión que ya se ha tomado y aspiro a honrarla plenamente».
Obligado a firmar la carta
Esta semana se supo que mientras estaba en la residencia del embajador de España, Ramón Santos, González firmó una carta diciendo que aceptaba la victoria electoral de Maduro. El Gobierno de Venezuela publicó fotografías de la firma en presencia del presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, la vicepresidenta Delcy Rodríguez y el enviado español.
Sobre esto, González ha dicho a Reuters que la carta fue acordada durante 48 horas «muy tensas» y prolongadas reuniones entre él y los funcionarios venezolanos, y que fue «coaccionado» a firmar y asegura que se tomaron fotografías y grabaciones de audio sin su permiso, descartando que hayan sido realizadas por el embajador. «Al final llegamos a un texto que firmé. Dije que acataba la decisión, aunque no estaba de acuerdo con ella».
González afirma que a cambio obtuvo garantías escritas de que su hija y su familia, incluidos dos niños, que permanecen en Venezuela, estarían seguros, junto con su coche y su apartamento. Ha indicado que en ese momento no pidió garantías para la liberación de los presos políticos, pero es una de las causas que lleva a todos los foros internacionales. El grupo venezolano de derechos humanos Foro Penal estima que desde el 29 de julio han sido detenidas 1.692 personas, muchas de ellas en protestas, aunque 80 adolescentes fueron liberados el 1 de septiembre.
González ha asegurado que su compañera, la líder opositora María Corina Machado no supo de su plan de marcharse hasta el día antes de su visita a la embajada española. Se muestra confiado en que ella no tendrá que tomar una decisión similar, pero advierte: «Es una situación que puede darse con cualquier dirigente político que pueda estar en riesgo».