La imagen de los pasajeros abandonando los trenes y entrando en Atocha a pie reabre la batalla política y vuelve a poner en el foco a Puente, que se defiende: «Hay un 95% de puntualidad»
El ministro Óscar Puente ya había tenido bastante con disculparse por sus palabras sobre el presidente argentino Milei y las «sustancias» que habría consumido. Por ello, al ser preguntado en la rueda posterior al Consejo de Ministros por los incidentes en el Cercanías de Madrid -más de 900 en año y medio- el ministro responsable del ramo ha pedido disculpas a los usuarios para, acto seguido, atacar a la presidenta de la Comunidad por las incidencias en el Metro. Aunque para ello se refiriera como «incidencia» al atropello sufrido ayer por un varón de 25 años que murió en la estación de Tirso de Molina tras bajarse al andén a orinar.
«Las incidencias de Metro Madrid multiplican por diez las de Cercanías» y «nadie» cuestiona que la presidenta Ayuso estuviera ayer «de campaña» en Cataluña. Esa ha sido la peculiar respuesta del ministro Puente a la pregunta por otra jornada más de fallos y trenes parados en las Cercanías de Madrid. El ministro se refería al atropello mortal en la estación de Tirso de Molina, que calificó como «incidencia», si bien es cierto que también pidió «disculpas» a los usuarios afectados: «Nada me produce mayor desazón, se lo aseguro, que las imágenes que he podido ver».
Puente, tras advertir que fallos en Cercanías «los hay y los habrá», reprochó también a los pasajeros que se bajaran del tren, situación que provocó «un efecto bola de nieve» causando retrasos en otras líneas. Los pasajeros, como desvelaron muchos este lunes en las redes sociales, se bajaron tras casi una hora encerrados en los vagones, espacio temporal que Puente rebajó a unos veinte minutos.
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Según los cálculos de la Comunidad de Madrid, en el último año y medio se han sucedido alrededor de 900 incidencias de distinto tipo que han alterado el normal funcionamiento de una red que es clave para la movilidad de los ciudadanos en la región. El episodio de este lunes a primera hora, además, volvió a poner en el foco las deficiencias del Cercanías, cuya gestión depende directamente del Ministerio de Puente. Según puso de manifiesto el consejero del ramo en la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, en lo que va de año, su departamento ya ha reseñado unas 200 incidencias en la red madrileña de Cercanías, que está compuesta por 9 líneas distintas que, según los balances de 2022, emplearon 205 millones de pasajeros.
La cifra de problemas se une a las 710 que desde el Gobierno que dirige Isabel Díaz Ayuso detectaron en el ejercicio 2023, que incluían las averías en los convoys y cualquier otro tipo de intervención que se tuviera que llevar a cabo en las infraestructuras de este servicio. En aquel momento, la Comunidad ya estipuló que estos problemas habrían afectado a en torno a 300.000 viajeros. En total, sumando ambos valores, la cifra estaría cercana al millar y las circunstancias en las que se desarrolla este servicio parece que no mejoran.
Problema en la infraestructura
Este diario se ha puesto en contacto con el Ministerio de Transportes preguntando por el número de incidencias que desde el departamento de Puente han reseñado en el último año y no ha obtenido ninguna respuesta. No obstante, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el ministro en primera persona defendió su gestión y expuso que la avería que ayer provocó la imagen de decenas de usuarios caminando por las vías fue causada por problema en la «infraestructura». «En este momento hay 115 actuaciones de desarrollo en la red de cercanías de Madrid», añadió el titular de Transportes, quien subrayó que los usuarios tendrán que «asumir» que puedan repetirse las incidencias a consecuencia de estos trabajos.
Puente también dio algunas cifras, eso sí, referentes a la puntualidad de los trenes. Según sus balances, y en lo que va de año, las distintas líneas del servicio de Cercanías de Madrid han llevado a cabo «un total de 133.383 circulaciones, de las que 127.674 fueron en tiempo, un 95,72% de puntualidad«.
Pese a las justificaciones que ha dado hoy el ministro después de mantener silencio durante prácticamente una jornada, las críticas a su gestión llegaron ayer desde prácticamente todos los partidos, dejando a un lado las diferencias ideológicas. Desde la llamada de atención del consejero madrileño, que también reclamó al ministro que convocara la Conferencia Sectorial y la Comisión de Seguimiento específica de este problema; hasta Manuela Bergerot, que calificó como “intolerable” que los problemas en el servicio desemboquen en imágenes como la de los pasajeros llegando a pie a las estaciones.
La financiación, en la diana
«Le exigimos a Pedro Sánchez y a su Gobierno que inviertan todo lo necesario para solucionar esta situación», manifestó el consejero de Transportes madrileño tras la incidencia de ayer, apuntando a la que para la Comunidad de Madrid es la clave que está detrás de estas constantes averías e incidencias.
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Ya a finales de 2023, cuando se encadenaron tres descarrilamientos de trenes de esta red, también en el entorno de la estación de Atocha y en apenas dos semanas, desde Sol apuntaron a la “infrafinanciación” del servicio y calibraron en el entorno de los 800 millones la inversión ejecutada, cifra que calificaron como insuficiente y ante la que exigieron que se ejecutase el Plan de Accesibilidad y Mejora 2018-2025, dotado con 5.100 millones. Por su parte, y en el apartado de inversiones, Puente aseguró que el Gobierno tiene abierto «un plan para el Cercanías de Madrid dotado con 7.000 millones de euros y que, en este momento, tiene 5.000 de esos millones en ejecución».
En esta ocasión, los problemas llegan en un momento en el que la figura del ministro Puente vuelve a estar en el foco después de haber cargado hace apenas unos días contra el presidente argentino, Javier Milei, provocando un roce entre ambos ejecutivos. Por ello, desde la Comunidad de Madrid, a través de las palabras de Rodrigo, recalcaron que el titular de Transportes debería ocuparse de los problemas de casa “en lugar de crear incidentes diplomáticos con países hermanos”.
