Moncloa solicita oficialmente una reunión Aragón-Estado y la DGA reitera que no acudirá porque la derogación de la ley de memoria es «jurídicamente intachable»
El Ejecutivo de Sánchez ya ha anunciado que, de no producirse este encuentro, presentará un recurso de inconstitucionalidad
Jorge Azcón no acepta la bilateral propuesta por el Gobierno de España y plantará al Ejecutivo de Pedro Sánchez, tras recibir la invitación formal a primera hora de la tarde de este martes, como ya había avisado que sucedería Ángel Víctor Torres, titular de la cartera de Memoria Democrática, tras el Consejo de Ministros de este mediodía. Desde Moncloa inciden en que, si Aragón no acude a la bilateral, como parece que sucederá, la intención es la de recurrir la derogación de la ley de memoria ante el Tribunal Constitucional.
Con todo, desde el Ejecutivo de PP-Vox se remiten a lo expresado el pasado viernes por la vicepresidenta segunda, Mar Vaquero, quien ya dejó caer que no acudirían a ninguna reunión porque la derogación era «jurídicamente intachable». Y es que en el Ejecutivo liderado por el popular no ha sentado nada bien que no fuese hasta este lunes, a última hora, cuando el Gobierno central les hiciera llegar de forma oficial el informe de la ONU, en una carta emitida por el propio ministerio de Memoria Democrática a los tres líderes autonómicos implicados, es decir, a los presidentes de Aragón, Comunidad Valenciana y Castilla y León.
En cualquier caso, en la solicitud oficial para la bilateral también consta esa intención de presentar un recurso de inconstitucionalidad. En dicho documento, Moncloa no especifica una fecha concreta para celebrar el encuentro, sino que expresan que debería celebrarse «lo antes posible», por lo que pide una respuesta «a la mayor brevedad posible», con el objetivo, dicen, de buscar «una solución adecuada a fin de evitar el recurso de inconstitucionalidad». Por otra parte, en el texto, además del propio ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, se suman a la petición de la bilateral Aragón-Estado los ministerios de Asuntos Exteriores y el de Educación, Formación Profesional y Deportes, liderado este último por la aragonesa Pilar Alegría.
Azcón tilda el encuentro de «acto electoral»
Tampoco le convence a Azcón un encuentro «conciliador» para solventar el lío con la derogación de la ley de Memoria Democrática autonómica, como le ha propuesto este martes el delegado del Gobierno en la comunidad, Fernando Beltrán, en nombre del Ministerio de Política Territorial. «El ministerio no quiere dialogar, quiere hacer actos electorales», le ha espetado el presidente popular al representante de la Moncloa, que ha insistido en que su objetivo es «hablar de los problemas reales de los aragoneses» y no hacer como Pedro Sánchez, que «cada vez que hay elecciones vuelve a intentar resucitar a Franco».
Unas palabras, las del presidente aragonés, que tampoco han sentado nada bien en Madrid, como así ha hecho saber la Delegación del Gobierno en Aragón tras las mismas. «En febrero de este año, el Gobierno de Aragón también rechazó solicitar una bilateral ante el ofrecimiento del Gobierno de España de celebrarla con todas las CCAA que lo pidieran formalmente. Entonces, ni había elecciones ni se centraba ‘en Franco'», sostienen.
La carta a Guterres, una «excentricidad»
Sí hay que hablar de la memoria en opinión del Ejecutivo de Sánchez y del ministro responsable de la Memoria Democrática. En ese sentido, Torres ha subrayado que Aragón es la única comunidad que hasta ahora ha aprobado la ley de derogación, pues en Valencia y Castilla y León sigue en trámite. Además, el ministro ha hecho referencia a la carta emitida por Azcón a Antonio Guterres, máximo responsable en la ONU, la cual ha calificado de «excentricidad»: «Nos parece contradictorio que se critique a los relatores independientes de la ONU y luego se mande una carta a su máximo responsable».
«El siguiente paso es invocar el artículo 33.2 para convocar una reunión que debería servir de conciliación. Que una mayoría parlamentaria apruebe una ley en lectura única no significa que no pueda violar algún principio constitucional. El Gobierno quiere decirle a la DGA que hay algunas dudas constitucionales, por lo que sería razonable que acudieran y las escucharan», ha refrendado el representante del Gobierno central en Aragón, Fernando Beltrán, quien ha recordado que el texto se derogó por procedimiento de lectura única con los votos a favor del PP, Vox y el PAR.
Cruce de acusaciones entre DGA y Delegación
El centro tecnológico de Vueling en Zaragoza, que este martes albergaba un acto institucional al que ha asistido el espectro político aragonés al completo pese a que no había ningún anuncio que hacer, ha sido el escenario de un careo mediático entre Azcón y Beltrán, juntos por primera vez desde que la publicación del informe de la ONU en el que se reprueba a los Gobiernos de Aragón, Valencia y Castilla y León por derogar sus respectivas leyes de memoria autonómicas e impulsar planes o leyes de concordia en su lugar. «El informe de la ONU es intachable», ha dicho el delegado del Gobierno, subrayando que el citado documento se basa en textos legislativos publicados en los boletines oficiales de Aragón y España.
La cosa va de palabras, de matices. Azcón insiste en que el informe de la ONU contenía errores al recoger, entre otras cuestiones, que Aragón prepara una ley de concordia en vez de un plan, como está anunciado y cuya presentación está pospuesta durante meses. Mientras tanto, desde la Delegación del Gobierno en Aragón dicen que esta reunión que ahora se propone desde Política Territorial es «tan bilateral» como la que mantuvo Azcón con la ministra Teresa Ribera.
Lo cierto es que la bilateral Aragón-Estado lleva sin convocarse desde 2018 pese a que el Estatuto de Autonomía recoge que ambas instituciones deben reunirse cada seis meses. La última vez que se pidió fue a principios de este año por parte del Gobierno de Sánchez para negociar la condonación de la deuda con todas las autonomías, como se han encargado de recordar desde el equipo de Fernando Beltrán. El Ejecutivo aragonés la aparcó hasta la celebración de la Conferencia de Presidentes para tratar la amnistía, que todavía no se ha celebrado.
