En la madrugada del sábado 30 de marzo al domingo 31 será cuando diremos adiós al horario de invierno. Dormiremos una hora menos, ¡eso sí!, pero a cambio dispondremos de más horas de luz, una situación que siempre genera mucho debate
La primavera ya está aquí y, con ella, se acabó eso de que a las 17.00 se haga de noche o que cuando uno se levante por la mañana lo haga con total oscuridad. Será la madrugada del sábado 30 de marzo al domingo 31 cuando digamos adiós al horario de invierno y tengamos más horas de luz. Esto se traduce en un cambio de hora, concretamente en un adelanto de los relojes pues a las 2.00 serán las 3.00.
Por tanto, habrá una hora menos para dormir o para disfrutar de una noche de fiesta si es el caso. El cambio horario se introdujo en 1974 para ahorrar energía y combustible tras la crisis del petróleo y supone que durante el día haya más horas de luz.
Un mayor número de horas de luz influye positivamente en el estado de salud de la población según varios estudios, aunque también hay datos de que el dormir una hora menos supone problemas de somnolencia. España no es el único país que actualiza sus relojes, ya que toda la Unión Europea cambiará su hora para ajustar la jornada laboral a las horas de luz natural.
¿SERÁ EL ÚLTIMO CAMBIO DE HORA?
El cambio de hora es una situación que siempre genera mucho debate en cuanto a si debería producirse, o no, y el impacto que tiene para la ciudadanía. Por el momento, y tal como recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE) el cambio al horario de invierno y el de verano se mantendrá, como mínimo, hasta 2026.
