Paolo Vasile dejará de ser el consejero delegado de Mediaset España. El directivo italiano, que fue nombrado consejero delegado de Telecinco en 1999, saldrá de la compañía justo en el momento en que el grupo audiovisual se está viendo superado en audiencia por Atresmedia, su principal competidor. Su salida se produce apenas seis meses después de su renovación tras una serie de diferencia con Pier Silvio Berlusconi, el heredero del imperio medíatico de Silvio Berlusconi, que confió siempre en el empresario romano.
Así lo tiene decidido ya la matriz italiana, que la semana pasada reunió a Vasile para negociar una salida pactada y óptima para las partes. El hijo de Berlusconi ha querido agradecer al todavía consejero delegado de ‘Telecinco’ y ‘Cuatro’ su trabajo durante más de dos décadas, al tiempo que ha considerado que la situación actual del grupo requería nuevos aires.
La toma de control del 83% del capital tras la OPA lanzada este año y la llegada de Borja Prado como presidente con poderes ejecutivos sobre algunos aspectos estratégicos de la cadena han provocado tensiones y desencuentros que Vasile no estaba dispuesto a aguantar. Sobre todo después de que hace unas semanas le quitaran la gestión del área de publicidad, la división encargada de los ingresos del grupo, en favor de un ejecutivo italiano.
Un golpe bajo que el veterano empresario ha entendido como una pérdida de confianza de su jefe en Milán y una puerta de salida. Las negociaciones de los últimos días se han centrado en resolver si se marchaba en el consejo de administración del próximo 26 de octubre o si esperaba a la junta general que se celebrará en la primavera de 2023. Su salida ha sido adelantada por ‘El Mundo’, cuyo dueño es el grupo italiano RSC Mediagroup, editor de ‘Il Corriere della Sera’.
Quien sí cuenta con el apoyo de la matriz es Borja Prado, nombrado presidente de Mediaset España el pasado abril, que permanecerá en su cargo para intentar revertir la crisis de audiencia que vive actualmente el grupo audiovisual.
Vasile, de 69 años, ha ejercido como consejero delegado del grupo desde 1999 (cuando aún no había cambiado su nombre a Mediaset), afianzando durante años a su principal enseña, Telecinco, como la cadena de televisión con más audiencia de España. Esta situación, sin embargo, ha dado un vuelco en los últimos tiempos, en los que los formatos televisivos característicos de la cadena parecen haber perdido poder de atracción, permitiendo el ‘sorpasso’ por parte de Antena 3.
Este declive también ha tenido reflejo en el mercado, donde Mediaset España se ha visto condicionada por los planes de su matriz, la italiana Media For Europe, para absorberla. La compañía española ha perdido desde el arranque de 2022 más del 38% de su valor, 17 puntos más que su gran rival Atresmedia. En los últimos cinco años, las pérdidas de los accionistas de Mediaset España superan el 70%.
