El Gobierno negocia la llegada de refugiados centroamericanos desde Estados Unidos

Las negociaciones entre España y Estados Unidos en materia de refugiados procedentes de países centroamericanos son un hecho. Comenzaron el pasado 25 de mayo en Madrid, con la constitución de un grupo de trabajo que se reunirá de forma periódica para estudiar propuestas y delimitar acciones por parte de España y Estados Unidos con el objetivo de afrontar los movimientos migratorios irregulares que se desencadenan desde Centroamérica.

Fuentes consultadas por ABC reconocieron ayer que a través de este grupo de trabajo -presidido por el secretario de Estado para Iberoamérica y el Caribe y el Español en el Mundo, Juan Fernández Trigo, y la subsecretaria de Estado Adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental, Emily Mendrala-, se están estudiando todas las posibilidades para ver cómo España puede ayudar y facilitar la absorción de la migración de Centroamérica que llega a EE.UU.

Estas negociaciones se encuentran en una fase inicial y no se han concretado en ningún acuerdo. Aún así, todo apunta a que en los próximos meses podrían llegar a España los refugiados que cruzan a EE.UU. a través de su frontera sur, aunque no se descartan medidas para evitar dichos desplazamientos.

Además de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), en el grupo de trabajo también hay representantes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Su formación se anunció a última hora de la tarde del 26 de mayo, en un comunicado conjunto firmado por España y Estados Unidos, donde decían que «ambos países comparten la prioridad de apoyar el fortalecimiento institucional, la gobernabilidad democrática, la sociedad civil, la lucha contra la corrupción y contra la violencia de género en la región», además de mostrarse de acuerdo «en la importancia de apoyar a los defensores de derechos humanos, periodistas y aquellos en situación de vulnerabilidad como, entre otros, los pueblos indígenas, comunidades afrodescendientes y la comunidad LGTBI».

En las últimas líneas del escrito, deslizaron que las delegaciones estaban «estudiando propuestas y acciones para abordar de manera conjunta y con los países de la región los desafíos que plantean el desplazamiento forzado y los movimientos migratorios irregulares en y desde Centroamérica». A este comunicado se remitieron ayer desde Exteriores al ser preguntados por la noticia del portal estadounidense Axios, que publicó que la Administración Biden espera que España anuncie la semana que viene un acuerdo histórico entre países para el reasentamiento de refugiados centroamericanos desde EE.UU. a España.

Desde el ministerio no confirmaron a ABC que el acuerdo se haya firmado. El Departamento de Estado tampoco confirmó ninguna decisión conjunta por parte de España y EE.UU. Fuentes diplomáticas explicaron que «la negociación sigue abierta» y «están estudiando todas las posibilidades».

Axios ha tenido acceso a documentos según la cual España estaría dispuesta a recibir una cifra «modesta» aunque «simbólicamente importante» de refugiados. No hay indicaciones de si estos refugiados pertenecerán a países específicos dentro del continente, aunque ayer desde Exteriores apuntaban a ciudadanos provenientes de países de Centroamérica. Axios afirma también que el Gobierno de España estaría dispuesto a aceptar duplicar o incluso triplicar el número de trabajadores temporales que vienen a España desde Centroamérica en virtud de acuerdos específicos con sus países de origen.

Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones remiten a la interlocución de Exteriores, pero admiten que existen conversaciones para incorporar a centroamericanos en los llamados programas de migración circular con terceros países para traer mano de obra a España en sectores en los que existe demanda. Son, en cualquier caso, contrataciones en origen como las que existen desde hace años con trabajadoras marroquíes que recolectan la fresa en Huelva (este año han llegado 12.300). A ellas se han sumado, según informó el departamento de José Luis Escrivá 500 trabajadores de Honduras y Ecuador, cuya estancia laboral también en Huelva estaba prevista hasta finales de junio. La orden Gecco (Gestión Colectiva de Contrataciones en Origen) se ha centrado en el sector agrícola pero este año como novedad se ha abierto la posibilidad de que se extienda a todos los sectores en los que existe demanda de mano de obra.

El sistema, al límite

Ese tipo de contrataciones –temporales y en origen, como se ha dicho- nada tienen que ver con las personas reasentadas en Estados Unidos procedentes de Honduras, Guatemala, El Salvador o Nicaragua, mayoritariamente. El posible acuerdo consistiría en acoger a ciudadanos de esos países y concederles aquí protección internacional, en un momento en el que el sistema está al límite tras la llegada de miles de afganos el pasado verano y los refugiados de la guerra de Ucrania. De ahí, la cautela de todas las fuentes consultadas. No solo eso sino que el número de peticiones de protección de centroamericanos que ya están en nuestro país no ha dejado de aumentar en los últimos meses.

EE.UU. espera que España acceda a recibir refugiados, tras un aumento histórico de la llegada de inmigrantes en busca de asilo a través de su frontera sur. La Administración de Biden confía en que el Gobierno de Sánchez acepte la reubicación de refugiados y que la decisión se anuncie la semana que viene en la Cumbre de las Américas, que reunirá el 9 y 10 de junio, en Los Ángeles, a los líderes de los países que forman parte de la Organización de Estados Americanos. Sin nada cerrado, a la vista de las cifras el experimento llegaría en el peor momento.