El Gobierno se ha comprometido este miércoles, tras reunirse con el PP en el Congreso de los Diputados, a bajar el precio de la gasolina, de la luz y del gas. Así lo ha anunciado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, en una comparecencia al término de la reunión. Después del encuentro que junto a las tres vicepresidentas del Gobierno, Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera, ha mantenido con una delegación del Grupo Popular, encabezada por su portavoz, Cuca Gamarra, Bolaños ha vuelto a apelar a que haya acuerdos en el seno de la Unión Europea (UE), aunque ha evitado concretar más detalles.
Esa apelación al acuerdo en el seno de la Unión Europea es la justificación del Gobierno para no concretar las medidas, y quedarse por el momento en un compromiso sin detalles y dejando abiertas todas las opciones.
El próximo 24 y 25 de marzo se celebra un Consejo Europeo en el que Pedro Sánchez tiene depositadas muchas esperanzas. Aspira a un acuerdo para desacoplar el precio del gas del precio final de la electricidad.
Bolaños se ha referido a la posibilidad de alcanzar acuerdos que pueden tener que ver como topar precios, bajadas fiscales o compras conjuntas de gas que pueden adoptarse en el seno de la UE para bajar el precio de la energía. «Se están barajando distintas alternativas a nivel europeo», ha dicho. El ministro de Presidencia ha dicho que el Ejecutivo «adoptará medidas» en el Real Decreto que aprobará el día 29. Pero fuentes del Gobierno reconocen que la acción se va a modular en función de las decisiones que se adopten a nivel comunitario.
Es decir, si triunfase la propuesta española de desacoplar el precio del gas del precio final de la electricidad, el Gobierno entiende que las medidas en el ámbito nacional no requerirían de una potencia tan grande. Moncloa por tanto decide esperar al resultado de una cumbre que tendrá lugar la semana que viene para valorar qué medidas tiene que tomar. Sin esconder que su apuesta es que los acuerdos sean lo más ambiciosos posibles «de la mano de la UE» para limitar las acciones nacionales reduciendo así el impacto presupuestario en las cuentas públicas.
«Va a haber bajada de la gasolina, luz y gas; y la va a haber el día 29», ha dicho Bolaños evitando comprometer detalles. «Vamos a trabajar para que ese consenso agrupe a los socios de la UE y si no lo es el Gobierno adoptará medidas». Por eso el Gobierno espera, porque quiere esperar a ver qué medidas se adoptan en el seno de la UE para entonces adaptar las suyas. «Se están barajando distintas fórmulas a nivel europeo: ayudas estatales, ayudas fiscales, topar precios o que haya un precio único de la energía de tal manera que se pueda abaratar», ha explicado
Esta falta de detalles y la vocación de esperar ha sido lo que ha destacado la oposición. Tanto el PP como Ciudadanos (Cs). El Partido Popular ha salido de la reunión con el Gobierno como entró: sin haber visto un papel previo con la propuesta del Ejecutivo, sin conocer ninguna medida concreta que tenga en mente y con la sensación de que solo buscaban una foto con la derecha para mostrarla después en Europa.
La portavoz del Grupo Popular y coordinadora general del PP, Cuca Gamarra, ha acudido a la cita acompañada de Mario Garcés, Guillermo Mariscal, Elvira Rodríguez e Isabel Borrego. «No se han cumplido las expectativas», ha resumido Gamarra al término de la reunión, ante la falta de concreción que han visto por parte del Gobierno.
Como ya había dicho en la sesión de control ante Sánchez, el PP exige inmediatez y medidas concretas para paliar ya los efectos de la subida de los precios, sobre todo en la energía y los carburantes, que están sufriendo las familias. «No nos han trasladado ninguna medida concreta», ha lamentado la portavoz.
La delegación del PP sí ha planteado varias propuestas, puntuales y temporales, para reducir la fiscalidad de los combustibles, bajar el IVA, racionalizar el gasto público hasta un total de 60.000 millones de euros, revisar los Presupuestos Generales del Estado y paralizar cualquier medida prevista de subida de impuestos.
Ante la falta de medidas concretas que el PP ha encontrado en el Gobierno, esperarán a conocer cuál es su propuesta y qué se plasma en el real decreto ley que tiene previsto aprobar en el Consejo de Ministros del 29 de marzo para decidir su posición.
De momento, el Gobierno y el PP no se han emplazado a nuevos encuentros, por lo que los populares se reafirman en que Bolaños y las vicepresidentas no buscan llegar a un acuerdo sino pedir la adhesión a las medidas que acaben imponiendo, según fuentes del principal partido de la oposición.
Cs pide imitar a otros países
Por Cs, han acudido a la cita con Bolaños y con Ribera su portavoz nacional, Edmundo Bal, y su diputada especializada en asuntos económicos, María Muñoz. Bal, en rueda de prensa, ha aseverado que el Gobierno les ha trasladado su intención de esperar al Consejo Europeo antes de aprobar medidas, y ha mostrado su disconformidad al respecto. El abogado del Estado ha enumerado a Francia, Portugal, Irlanda, Polonia y Alemania como ejemplo de países que ya han actuado contra la espiral inflacionista sin necesidad de esperar hasta la cumbre europea.
Bal y Muñoz han acudido a la reunión con un documento resumen con sus propuestas para atajar la inflación, con planteamientos como un ajuste de la tarifa del IRPF a la subida de los precios, una rebaja del coste de los carburantes y un IVA superreducido en la electricidad. Fuentes del partido liberal han añadido que el Ejecutivo les ha hablado de bajar los impuestos de la electricidad y los carburantes, aunque sin aportar mayor detalle. Asimismo, según Bal, la vicepresidenta Ribera ha reconocido que coinciden con «muchas» de las cuestiones que plantean, pero ha descartado de plano, como ha pedido Cs en la reunión, incrementar la producción de las centrales nucleares.
El portavoz de Cs sí ha mencionado el tono «cordial, elegante y amable» del encuentro con el Ejecutivo, aunque en la línea de Gamarra ha criticado la falta de concreción y de celeridad para adoptar unas medidas que, esta vez sí, urgen. «El Gobierno va tarde (…). El Tribunal Constitucional le dice que abusa del real decreto ley y ahora, cuando lo necesitamos, dice que hay que buscar el consenso», ha lamentado Bal, quien ha achacado la demora al «miedo» del PSOE «a la reacción que pueda tener su socio», Unidas Podemos. Por ello, y ante la «dificultad de llegar a consensos con el populismo», Bal ha reiterado a Sánchez su petición de que expulse del Ejecutivo a los ministros de Unidas Podemos y le ha pedido que explore un acuerdo con el PP para agotar la legislatura.
