Ciudadanos pierde su tercer gobierno en un año y confía su último feudo a la palabra de Juanma Moreno

La líder de Cs, Inés Arrimadas, comparece tras el anuncio de elecciones anticipadas en Castilla y León, a 20 de diciembre de 2021, en Madrid, (España). Arrimadas se ha mostrado “apenada” tras el anuncio del presidente de la Junta de disolver las Cortes y adelantar las elecciones autonómicas al próximo 13 de febrero. La lider de Cs ha asegurado que esta decisión ha venido por “presiones” que no tienen que ver con CyL. Asimismo ha señalado que “van a seguir luchando por Castilla y León mientras otros siguen jugando.” 20 DICIEMBRE 2021;CIUDADANOS;ELECCIONES Alberto Ortega / Europa Press 20/12/2021

Un acto de fe. En eso se ha convertido la estabilidad de la Junta de Andalucía para Ciudadanos (Cs). Ese gobierno de coalición es el último bastión autonómico que le queda a Inés Arrimadas, quien este lunes perdió su tercer ejecutivo regional en lo que va de año, pero se mostró convencida de que el popular Juanma Moreno cumplirá la palabra que «traicionó» en Castilla y León Alfonso Fernández Mañueco y no convocará elecciones, al menos, hasta junio.

Con el de Castilla y León ya han caído los tres gobiernos de coalición que Cs pactó con el PP tras las elecciones autonómicas del 2019, Región de Murcia, Comunidad de Madrid y Castilla y León, fruto todos ellos de la estrategia trazada por Albert Rivera de fijar como socio prioritario al PP para erigirse en alternativa al sanchismo.

Ya con Arrimadas al frente, la fallida moción de censura en la Región de Murcia precipitó una crisis interna sin precedentes.

En los tres territorios, Cs optó por entregar la presidencia autonómica al PP a pesar de que el ganador de las elecciones en 2019 fue el PSOE y de que los populares acumulaban décadas en el poder en esas tres regiones. Arrimadas este lunes se limitó a decir que debían tomar nota de sus errores en negociaciones pasadas –de las que se desmarcó–, pero también garantizó la estabilidad en los municipios cogobernados con el PP.

En manos ajenas

«Confío en que Juanma Moreno va a pensar más en los andaluces que lo que ha hecho el señor Mañueco con los ciudadanos de Castilla y León», dijo Arrimadas, en rueda de prensa, tras la reunión de su Comité Permanente en la sede nacional de Cs. Su posición es la misma que tenía hasta ahora cuando se le preguntaba por un hipotético adelanto electoral en Castilla y León y es un fiel retrato de la realidad de Cs: está en manos de la voluntad ajena.

Fuentes del entorno de Arrimadas, sin embargo, trataban este lunes de separar el caso andaluz de los otros tres. En primer lugar, porque ese Gobierno, el del ‘cambio’, puso fin a la hegemonía socialista en Andalucía y a su corrupción. Segundo, porque en esta autonomía las encuestas no son tan favorables a los populares y existe un riesgo de que gobierne la izquierda. Y tercero, porque la relación personal entre Moreno y Juan Marín, vicepresidente de la Junta y miembro de la dirección de Cs, es «excelente», según diversas fuentes.

La decisión de Fernández Mañueco, no obstante, pilló por sorpresa en Cs. El ya exvicepresidente de la Junta Francisco Igea se enteró en plena tertulia radiofónica y en la dirección nacional del partido, por la prensa. Arrimadas, según confirmó ella misma en su comparecencia, habló por teléfono con el presidente de Castilla y León el domingo por la mañana, 24 horas antes, y este mantenía su compromiso de no anticipar los comicios, según ella.

Igea, que este martes se incorpora al hospital de Palencia, repetirá como candidato si se lo pide la dirección. Ayer habló con él la líder de Cs

Fuentes de su máxima confianza, en conversación con ABC, garantizan que Fernández Mañueco llegó incluso a trasladar a Arrimadas que se podían prorrogar los presupuestos autonómicos si las Cortes de Castilla y León no aprobaban este jueves las nuevas cuentas. En cualquier caso, en Cs achacan la «traición» del PP –acusación que vuela en dos direcciones– a las «presiones» de Génova.

Culpas a Casado

Según Arrimadas, el líder del PP, Pablo Casado, está sediento de una victoria que le permita «tapar» la de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid y ganar peso en la batalla interna que mantiene por el control de su partido en esta autonomía. «Los ciudadanos de Castilla y León se merecen mucho más que ser una pieza de ajedrez en las guerras internas del PP», aseveró.

Desde el PP se habla de un acercamiento de Cs al PSOE y a Por Ávila de cara a los presupuestos, pero fuentes del núcleo de Arrimadas lo niegan. Añaden además que el único lugar donde se ha testado la lealtad de los procuradores de Cs es Castilla y León, con su voto en contra a la moción de censura que presentaron los socialistas en marzo. Igea, el sábado, se abrió incluso a compartir listas con el PP en una entrevista en ‘El Periódico de España’, y el propio Fernández Mañueco, insistía Arrimadas, dijo «hace cinco días» lo mismo que ella: que había «normalidad» y que su Gobierno «funcionaba».

Igea, médico de profesión, se incorporará este mismo martes a las tareas asistenciales en el hospital Carrión de Palencia, aunque repetirá como candidato si no hay un giro de guion. Arrimadas habló este lunes con quien fue su rival en la sucesión de Rivera para trasladar unidad, a la espera de decidir si hay primarias.