La España Vaciada arma su proyecto para presentarse en las tres provincias de Aragón

La España Vaciada se presentará a las próximas elecciones autonómicas de 2023 en las tres provincias aragonesas y en el ámbito local. Así será si se cumplen las previsiones del coordinador de la herramienta política de la plataforma, Antonio Saz, miembro del movimiento ciudadano de Teruel Existe, que lleva meses preparando la semilla para que germine por todo el territorio aragonés en la próxima cita con las urnas. El proyecto político es por ahora eso, un proyecto. Pero la vocación de la España Vaciada es llegar a las instituciones para hacerse escuchar.

«Lo que nos demostró Teruel Existe es que se rompió una barrera. Si no estamos en las instituciones, no se nos tiene en cuenta», resume Saz, que explica que ahora están trabajando con una veintena de organizaciones ciudadanas en Aragón para conformar la futura «herramienta política». Es, por ahora, una «herramienta» porque la plataforma no ha decidido todavía si se constituirá en partido político, o si concurrirá a los comicios bajo la fórmula ya ensayada por los turolenses, como agrupación de electores. «Estamos todavía lejos. Está por definir el modelo, pero el compromiso es que la herramienta estará lista a finales de enero», explica.

Hasta entonces, la España Vaciada va a seguir creciendo a la par en el proyecto estatal y a escala autonómica, con un «proyecto común para Aragón». Casi el mismo lema del reciente congreso del PSOE aragonés, Aragón, proyecto común. «Creemos que las delimitaciones provinciales poco tienen que ver con las circunstancias reales del territorio, porque comarcas colindantes de la provincia de Zaragoza tienen la misma situación que otras de Teruel», reflexiona.

La España Vaciada tendrá, por lo tanto, un programa común para todo el territorio aragonés (y compartido con el resto de proyectos de otras comunidades autónomas), y basado en cinco ejes principales que irán perfilándose cuando se acerque el momento de votar.

La lucha contra la despoblación; la cohesión territorial; la desconcentración de las administraciones públicas (tanto las del Estado como las autonómicas); la garantía de los servicios públicos básicos; y la defensa y el desarrollo de las infraestructuras y de la conectividad, con la apuesta por el ferrocarril y la expansión de la banda ancha como retos fundamentales. La idea, insiste Saz, es que «cualquier punto del territorio pueda tener la expectativa de mirar al futuro».

Las dudas con el nombre

Otra de las cuestiones que debe dirimir la plataforma es si habrá una sola nomenclatura para todos los territorios, o si cada espacio tendrá poder de decisión. Otra de las incógnitas es si Teruel Existe se diluirá en el paraguas de la España Vaciada, o si conservarán su identidad. «Teruel Existe en solitario, combinado con Aragón Existe, Huesca / La España Vaciada… Las opciones son múltiples, pero lo importante no es el nombre, sino el proyecto que lleva detrás, y que es en lo que estamos trabajando ahora».

«Nosotros somos una reacción a años y décadas de olvido y abandono por parte de los gobiernos»

Frente a quienes les han señalado como fuerzas «cantonalistas», como el propio presidente de Aragón, Javier Lambán, Saz subraya que tienen un «proyecto de país que se adapta a las características de cada territorio». Y recuerda que la España Vaciada no es una casualidad del destino. «Nosotros somos una reacción a años y décadas de olvido y abandono por parte de los gobiernos. Después de 40 años, la situación que tenemos ahora en muchas poblaciones y territorios ha cambiado poco, aunque hay zonas que estén mejor», apuntó. De hecho, considera que «quien dice que las cosas están bien, es que no conoce la situación».

Su objetivo ahora es conformar un proyecto sólido, sin contar en esta etapa con ningún partido político, aunque sean muchos los que también llevan años hablando de la lucha contra la despoblación en Aragón. Después de las elecciones, eso sí, hablarán con todos. «Queremos hablar con todos para que nos escuchen, porque las respuestas que necesitamos no serán cuestión de un gobierno de cuatro años. El proceso de reversión de la despoblación puede durar otros 40 años; no hay fórmulas mágicas», señaló.

El 31 de marzo de 2019, reconoce Saz, fue «el punto de inflexión». Miles de vecinos de Teruel, Soria o Cuenca tomaron las calles de Madrid para exigir «los mismos derechos» que los residentes en las grandes urbes. Se abrió una espita que siguió creciendo con la llegada de Teruel Existe al Congreso, la primera agrupación de electores en conseguirlo, y sigue brotando dos años después, con la despoblación como gran asunto de la agenda política.

Desde la España Vaciada llaman, incluso, a superar el «viejo eje de izquierda y derecha». Rechazan que para el mismo diagnóstico, haya soluciones diferentes en función de esas posturas ideológicas. «En los problemas básicos, nos pondremos antes de acuerdo. La confrontación se ha visto que es una mala herramienta para resolver los problemas», asegura.

La plataforma trabaja con 26 asociaciones de Aragón

La España Vaciada está formada por más de 160 plataformas ciudadanas de todo el país que defienden distintas causas y que son el sustrato social y pegado al terreno de las distintas luchas contra la despoblación y por el reequilibrio territorial en diferentes zonas del país.

En el caso de Aragón, la España Vaciada trabaja de forma habitual con un total de 26 organizaciones ciudadanas. En principio, estos agentes estarían dispuestos a dar el paso de constituirse como actor político, aunque parte de estas asociaciones todavía tiene algún recelo al respecto, y prefieren que su causa no se relacione con una alternativa política. Como en el origen del movimiento ciudadano de Teruel Existe, la defensa del ferrocarril y de las infraestructuras sanitarias, o por otro modelo de renovables son algunas de las causas tras la plataforma.