Casi 90.000 votantes de Sánchez en las generales optan ahora por Ayuso

Una de las claves de la subida de Isabel Díaz Ayuso en las encuestas está en que ha aglutinado el voto de buena parte del centro-derecha, pero también de una parte de la izquierda moderada que se ha distanciado de las políticas de Pedro Sánchez. Según los datos del último barómetro de GAD3 realizado para ABC, cerca de 90.000 madrileños que votaron al PSOE en las últimas elecciones generales, en noviembre de 2019, se decantarían ahora por la candidatura del PP en la Comunidad de Madrid ante los comicios del 4 de mayo.

En las generales, el PSOE, con Sánchez como número uno, logró en Madrid un total de 957.000 votos, según los datos del Ministerio del

Interior. El trasvase que puede producirse ahora al PP con Ayuso a la cabeza supondría, por tanto, cerca del 10 por ciento de los apoyos que tuvo el Partido Socialista en ese momento.

El PP cuenta ahora mismo con una estimación de voto del 43,3 por ciento en la Comunidad de Madrid, frente al 22,2 por ciento que consiguió en las últimas elecciones autonómicas. Los populares se benefician del desplome de Ciudadanos, que pasa del 19,4 al 2,9 por ciento, pero también de la recuperación de muchos votantes que estaban en Vox y que se sienten cómodos con Ayuso al frente de la candidatura del PP. Los populares han silenciado las críticas al partido de Santiago Abascal durante esta campaña electoral y han dejado claro que sus únicos rivales en las urnas son Sánchez e Iglesias.

«Cuentos» de Iglesias

En los últimos días se han intensificado los mensajes en el PP dirigidos a los votantes socialistas decepcionados con las políticas de Sánchez. En el congreso de Nuevas Generaciones, celebrado este fin de semana pasado, Isabel Díaz Ayuso apeló a esos electores para formar una gran mayoría y la nueva presidenta de esa organización juvenil, Bea Fanjul, volvió ayer a tender la mano no solo a los jóvenes socialistas que ya no creen en Sánchez, sino a los que se dejaron llevar «encantados por los cuentos de hadas de Pablo Iglesias en su momento».

El PSOE tiene ahora una estimación de voto del 23,2 por ciento, según los datos de GAD3. En las autonómicas de mayo de 2019, ganó en las urnas con un 27,3 por ciento, y en las generales de noviembre de 2019, con Sánchez de candidato a La Moncloa, volvió a ser el primer partido de la región, con un 26,87 por ciento de los votos. Ahora cae y queda 20,1 puntos por debajo del PP.

En el barómetro, los madrileños consideran que el PP está más capacitado que el PSOE para gestionar la pandemia, la creación de empleo, los servicios sociales, la educación, los impuestos, la inmigración y los intereses de esta comunidad en general.

Frente a la pandemia, el 36,8 por ciento de los encuestados creen que los populares son los que están más capacitados para tomar medidas en esta crisis sanitaria. Esa confianza se reduce al 18,6 por ciento en el caso del PSOE. Entre los dos grandes partidos superan el 55 por ciento.

Educación

La gestión del PP en la pandemia tiene un respaldo mayoritario de los votantes populares: el 76 por ciento cree que este partido es el que mejor puede actuar frente al Covid-19. Pero, además, cuenta con la confianza mayoritaria de los votantes de Vox y Ciudadanos. El 57 por ciento de los primeros y el 55 por ciento de los segundos creen que el PP es el mejor partido para luchar contra la crisis sanitaria.

Los madrileños también ven al PP más capacitado para gestionar la educación en la Comunidad de Madrid: el 38,4 por ciento confía más en los populares que en el resto de partidos en esta materia, mientras que el 21,3 por ciento piensa que el PSOE lo haría mejor. La confianza en el PP disminuye al hablar de la inmigración, pero aun así sigue siendo el partido que merece más apoyo para la gestión de esa materia: el 30,9 por ciento prefiere a los populares, y el 20,7 por ciento al PSOE.

En el terreno de los servicios sociales, el PP también es el partido que se ve como más capacitado para su gestión: el 32,8 por ciento así lo piensa. Solo el 7,4 por ciento preferiría que fuera Podemos el que se ocupara de esos servicios.