Cerca de 210.000 alumnos no irán el lunes ni el martes a clase para evitar riesgos ante la ola de frío intenso

El Gobierno de Aragón acordó ayer junto a las diputaciones provinciales y los ayuntamientos de las capitales suspender hoy y mañana todas las clases no universitarias por las dificultades de transporte ante el estado de muchas carreteras secundarias y las bajas temperaturas en las aulas, una situación que se podría complicar aún más por la llegada de una ola de intenso frío. La medida afectará a cerca de 210.000 alumnos de los colegios, institutos, conservatorios y del resto de enseñanzas no regladas, como las escuelas de idiomas y de adultos.

La decisión se adoptó al mediodía en la reunión telemática del Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi), en la que intervino el presidente de Aragón, Javier Lambán, para defender que parecería «lo más sensato» ante las afecciones de la borrasca Filomena y sostener que esta misma decisión la han adoptado comunidades limítrofes con un impacto similar.

De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó ayer la alerta naranja por temperaturas mínimas en el Pirineo, que podrían llegar a diez grados bajo cero, y la amarilla para la mayor parte de la Comunidad, donde los registros caerán hasta los -6 grados: centro y sur de Huesca, la provincia de Zaragoza, y las comarcas de Albarracín, Jiloca, Gúdar-Javalambre y Maestrazgo.

Al término de la reunión, la consejera de Presidencia, Mayte Pérez, insistió que suspender las clases era «lo prudente» dada la situación de la mayoría de las carreteras de Aragón, por la cantidad de nieve acumulada y las bajas temperaturas que se esperan a partir de hoy. «Nos parecía lo más pertinente para salvaguardar la seguridad, garantizar la limpieza en los accesos a los centros y la propia habitabilidad, ya que las aulas están muy frías y necesitan atemperarse», dijo.

Pérez sostuvo que no sería oportuno acudir a clase en plena ola de intenso frío tras un fin de semana helador cuando se debe seguir respetando el protocolo covid, que obliga a airear periódicamente las aulas. «Ha sido un factor importante a la hora de tomar la decisión», dijo.

No obstante, el Ayuntamiento de Zaragoza anunció un poco después que sí iba a abrir las doce aulas infantiles de su competencia, dado que a lo largo del fin de semana se han caldeado las instalaciones y las calles se han despejado de nieve. El servicio municipal de Arquitectura dio orden el sábado de mantener encendidas las calefacciones «las 24 horas» hasta el martes en los 80 centros educativos cuyo mantenimiento depende del Ayuntamiento. La pretensión es garantizar una temperatura de confort cuando alumnos y profesores regresen a las aulas.

Orden remitida a los centros

La orden de suspensión de la actividad lectiva, firmada por el consejero de Educación, Felipe Faci, se remitió a todos los centros para que, a su vez, informarán a las familias y alumnos afectados. En el documento se alega que las previsiones meteorológicas «adversas» pueden generar afecciones importante al tráfico tanto en la red viaria como en los municipios.

La medida supone la interrupción de las 598 rutas escolares que cubren toda la red educativa, de las que 249 corresponden a Zaragoza, 236 se reparten por la provincia oscense y las restantes 113, Teruel. No obstante, 81 de ellas son líneas de transporte regular de viajeros en las que Educación tiene plazas concertadas. Igualmente se informó a las compañías de transporte, que respaldaron la decisión antes el riesgo que puede suponer las placas de hielo que se puedan formar por la nieve acumulada. Una de ellas provocó precisamente que volcará la noche del sábado un autobús de la línea Zaragoza-Huesca a la altura de Zuera.

El director de la división norte de Avanza, José Ramón Lasierra, explicó ayer a este diario que minutos antes había pasado otro autocar sin incidencias y el servicio desde Jaca no había tenido hasta la noche ningún problema. «Más vale prevenir que curar, especialmente cuando se trata de rutas con niños de hasta una hora con las que hay que llegar a los pueblos», apuntó antes de apostillar que circulan a primera hora, cuando el riesgo por las bajas temperaturas se incrementa.

Suministro para las granjas

Igualmente, la consejera de Presidencia dio cuenta del dispositivo acordado para garantizar que los camiones de pienso que llevaban dos días retenidos junto a otros centenares de tráileres en varios puntos del territorio pudieran continuar viaje para garantizar el suministro a las granjas. Con este fin, Mayte Pérez indicó que se pretendía identificar dónde estaban los vehículos para facilitarles que continuaran su ruta con apoyo de la Guardia Civil.

Yalgo similar se quería hacer para asegurar el abastecimiento de sal en diversos puntos de las provincias de Huesca y Teruel, imprescindible para luchar contra el hielo. «Se trata de vehículos articulados, por lo que se ha decidido coordinar todo con Protección Civil», aseveró.

En la reunión del Centro de Coordinación Operativa también se abordó la planificación para que hoy se puedan efectuar con relativa normalidad el reparto de las vacunas de la covid por todo el territorio. Para ello, vehículos de la Guardia Civil escoltarán las nuevas rutas organizadas de los vehículos encargados del suministro, pertenecientes a la distribuidora farmacéutica Alliance Healthcare.