Bruselas plantea una nueva estrategia con EE.UU. para enterrar el legado Trump

La Unión Europea propondrá reconstruir el vínculo transatlántico con la nueva Administración norteamericana de Joe Biden y, por ello, la Comisión ha aprobado una comunicación en la que propone toda una serie de puntos para resolver las diferencias pasadas y empezar un nuevo capítulo basado en un mayor énfasis en asuntos como el cambio climático y la economía digital. El Alto Representante, Josep Borrell, compareció ayer para explicar esta propuesta que anticipa la que los líderes de los países miembros van a elaborar en la cumbre prevista para el próximo 10, para la que el presidente del Consejo, Charles Michel, ya ha presentado un documento de trabajo. Después de una relación tan extraña con el presidente saliente, Borrell pudo decir que está seguro de que las cosas irán mejor a partir de ahora. «Esperamos que todo va a mejorar, en temas como el compromiso climático o las relaciones con Irán, esperamos tener un mejor entendimiento entre nosotros, y este es el núcleo de la comunicación» aprobada por los comisarios.

Mientras tanto, se sabe ya que el propio Biden podría inaugurar sus viajes al extranjero con una visita a Bruselas, inicialmente a la sede de la OTAN, donde ya han empezado los preparativos, pero que también podría incluir a las instituciones comunitarias. Trump ha menospreciado a este organismo y ha ignorado a la Unión Europea.

El bloque comunitario piensa ofrecer a Biden, por ejemplo, cooperación en la gestión de la pandemia y la restauración del papel de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha sido objeto de feroces ataques del presidente saliente, Donald Trump. A Bruselas le interesa también implicar a Washington en el acuerdo climático de París, del que Trump decidió desvincularse, y en una agenda comercial verde que incluya medidas conjuntas en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC), cuyo director también ha de ser elegido en coordinación entre Europa y Estados Unidos.

Borrell ha ofrecido también la posibilidad de poner fin a las disputas comerciales, tanto las nuevas, de las que Trump hizo víctimas a los agricultores españoles, especialmente los sectores del aceite y la aceituna, como la ya antigua sobre la acusación mutua de entregar ayudas públicas a Boeing y a Airbus. «Hubiéramos preferido haber llegado antes a un acuerdo bilateral para resolver este asunto en vez de tener que ir a la OMC, pero ahora creo que es buen momento para iniciar conversaciones para resolver todos los inconvenientes».

Sobre los roces comerciales de los últimos años a raíz de las disputas aeronáuticas, Bruselas insta a Biden a trabajar estrechamente para resolver las cuestiones de comercio bilateral pendiente, mediante soluciones negociadas. También reclama su ayuda para liderar la reforma de la OMC, otro de los agujeros que deja el anterior gobierno norteamericano.

La propuesta europea es muy ambiciosa en ciertos aspectos de política exterior, como el acuerdo para limitar la capacidad nuclear de Irán, del que Trump se retiró, y Borrell fija como objetivo que Washington vuelva a retomar su participación.