El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este sábado en calidad de secretario general del PSOE, en Ferraz, en un encuentro bajo el título «La España que nos merecemos 2021-2026». Sánchez se ha refugiado en un acto de partido desde la sede nacional para reivindicar el legado socialista frente a Unidas Podemos (UP), socio minoritario en el Gobierno, y atacar a Partido Popular y a Vox.
Esta semana se han multiplicado las críticas de la oposición después de definirse las alianzas del Gobierno para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE). La estrategia de UP para atraer a Bildu y ERC ha terminado por despejar a Ciudadanos (Cs). Una suma con la que no todos los ministros socialistas se sienten cómodos. Además, Sánchez y el ministro de Sanidad, Salvador Illa, tuvieron que hacer frente ayer a reproches de la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento durante su visita al Hospital de La Paz. Síntoma de la tensión acumulada.
La intervención de este sábado ha estado muy orientada a reivindicar el legado socialista tanto en Gobierno como oposición. Sin alusiones a su socio UP. Sánchez ha acentuado la posición del PSOE como partido mayoritario en La Moncloa después de que se haya impuesto la visión estratégica del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, en los PGE. «Mientras el Partido Socialista tome el timón del Gobierno la Constitución regirá en España de un punto a otro y de principio a fin», ha remarcado.
Como explicó ABC, el vicepresidente ha logrado trasladar una imagen de cierta autonomía en el Ejecutivo frente a otra de un presidente permisivo por la necesidad de aprobar las cuentas públicas. Sánchez ha querido desquitarse este sábado de ese descrédito frente a la militancia y dirigentes. «El nuestro no es otro partido más — ha defendido—. Por encima de todo somos un proyecto de transformación para crear empleo, reforzar nuestro Estado de bienestar y un crecimiento sano y duradero«.
El presidente del Gobierno y líder del PSOE ha expresado que «gracias» a los socialistas, el suyo es «el único partido» que sabe unir a los españoles. «Somos más que un partido, somos una forma de querer a España, de pensar España e integrar España», ha continuado.
Críticas a PP y Vox
El acto no solo quería remarcar la posición del PSOE sino que también estaba orientado a atacar al Partido Popular y Vox, sobre todo en esta recta final de los PGE. El PP se mantiene en negociación para introducir sus enmiendas parciales, pero Vox obstruye totalmente la tramitación porque enmienda la totalidad del proyecto.
Sánchez ha reunido en una misma frase al líder de la oposición, Pablo Casado, y al líder de Vox, Santiago Abascal, para reprocharles su falta de sentido de Estado «cuando el país sufrió el peor azote sanitario en un siglo». Sánchez ha criticado que «votaron en contra del Estado de Alarma que salvaba vidas y defendía la salud pública, y que lo llegaron a denunciar ante la Unión Europea como si fuera un ataque a las libertades, cuando es un instrumento perfectamente constitucional».
También acusa a Casado y Abascal de «sembrar la desconfianza en las autoridades sanitarias, minar la confianza pública con «fake news» y «bulos» y, aunque no haya matizado, en referencia a la moción de censura de Vox, «tratar de derribar al Gobierno en medio de la peor crisis de la historia». El líder del PSOE censura que ni PP ni Vox hayan querido aprovechar «las decenas de llamamientos a la unidad» y que, por el contrario, respondieron «con ataques más feroces». A juicio del presidente del Gobierno, según lamenta, «no hay un caso igual en toda Europa».