El Santander provisiona 1.600 millones por el coronavirus y recorta su beneficio un 82%

El Santander ha sacrificado la gran parte de su beneficio del primer trimestre del año para reforzar su balance de cara a un incremento de la morosidad crediticia de familias y empresas derivada del coronavirus. La entidad financiera presidida por Ana Botín ha provisionado 1.600 millones de euros por el deterioro económico previsto a raíz de la crisis sanitaria y ha reducido sus ganancias entre enero y marzo un 82%, a 331 millones de euros.

El banco había ganado en el mismo periodo de 2019 un total de 1.840 millones de euros, y en el primer trimestre de este año el beneficio ordinario, sin esa provisión, hubiese sido de 1.977 millones de euros, un 8% más. El Santander matiza que hasta marzo la pandemia apenas afectó al negocio —la ratio de morosidad, de hecho, siguió bajando hasta el 3,25%—, pero la magnitud de la dotación frente a eventuales quebrantos hecha por la entidad, que eleva la ratio de cobertura al 71%, avanza elevados impagos de créditos.

«Los resultados ordinarios del primer trimestre han sido buenos, con un impacto limitado del Covid-19. Sin embargo, la pandemia está causando una crisis sanitaria global e importantes problemas económicos y sociales», ha dicho la presidenta del primer grupo financiero español, Ana Botín, quien en todo caso ha reiterado que el grupo, que ya ha cancelado el dividendo, revisará sus objetivos estratégicos cuando el banco tenga «una visión más completa del impacto de la crisis». «Ahora mismo es imposible predecir el impacto final y más permanente que tendrá la crisis, pero nos encontramos en una posición sólida», ha dicho la banquera respecto al nivel de capital y provisiones del Santander.

Como fuere, las cuentas presentadas por el Santander evidencias un caída de todos sus márgenes de negocio como consecuencia en buena parte del impacto de los tipos de cambio. El margen de intereses cayó un 2,2%, a 8.487 millones de euros; la facturación por comisiones bajó un 2,7%, a 2.853 millones, y los ingresos totales del grupo se redujeron un 2,3%, a 11.809 millones de euros. La entidad compensó esa caída de la facturación con una reducción de costes del 2,9%, a 5.589 millones de euros.

Brasil ha sido de nuevo la filial del grupo que más ha aportado al beneficio ordiario del banco, 694 millones o un 29% del total , un 10% más que en el primer trimestre de 2019. Ahora bien, los negocio en Estados Unidos y México, que suponen el 11% y el 10% de los beneficios, mejoraron sus cuentas un 46% y un 22% respectivamente. En España, las ganancias ordinarios del Santander bajaron un 1%, a 352 millones, el 14% del total, y en Reino Unido se hunde un 27%, a 188 millones, el 8% de los resultados del grupo.