Papa Francisco: “El Señor nos llama a ser administradores responsables de su Providencia”:no robar

En sentido positivo, «no robarás» significa que el Señor nos llama a ser administradores responsables de su Providencia, a aprender a multiplicar con creatividad los bienes que poseemos para usarlos con generosidad en favor de nuestro prójimo, y de este modo crecer en la caridad y en la libertad”, ha predicado el Santo Padre esta mañana en la audiencia general.

Esta mañana, a las 9:30 horas, el Santo Padre ha encontrado en la Plaza de San Pedro a miles de peregrinos y fieles de Italia y de otros muchos países, y ha ofrecido una catequesis dedicada al 7º mandamiento: “No robarás”, a la luz del pasaje bíblico de la Primera carta de San Pablo apóstol a Timoteo 6, 7-10), siguiendo su ciclo de reflexiones sobre los mandamientos en la audiencia general.

La propiedad, muy en especial cuando afecta los recursos naturales, “debe estar siempre al servicio de las necesidades de los pueblos”, ha matizado el Papa. “No podemos considerarnos dueños absolutos de las cosas”.

Y ha añadido que el mundo “es rico en recursos” para asegurar a todos el “acceso a los bienes fundamentales”; sin embargo, muchos viven en una situación de “pobreza escandalosa”. Y los recursos naturales mal usados, se van deteriorando y destruyendo, ha advertido.

Destino universal de los bienes

La sabiduría cristiana nos dice que, por voluntad divina, “los frutos de la creación están destinados a todo el género humano” –ha especificado–. El destino universal de los bienes y su distribución justa es “anterior” al derecho a la propiedad privada, que debe estar “en función de las necesidades primarias del hombre”.

Asimismo, Francisco ha reflexionado sobre el contexto social del 7º mandamiento: “Lo primero que nos viene a la mente es el tema de la sustracción o retención ilícita de los bienes ajenos, y el debido respeto a la propiedad de los demás. En toda cultura, robar es inaceptable, pues todas defienden el derecho a poseer bienes”.

Tras resumir su discurso en diversas lenguas, el Santo Padre ha saludado en particular a los grupos de fieles presentes procedentes de todo el mundo.