Mayor Oreja lamenta que el presente en las sociedades occidentales está descrito con la palabra «desorden»

El presidente de la Fundación Valores y Sociedad, Jaime Mayor Oreja, ha afirmado este martes en un Foro ADEA que “el principal problema de Europa es que no hay cohesión, no hay valores compartidos. Hace falta una reconciliación en valores”.

El que fuera ministro del Interior ha sido el protagonista de una nueva jornada a la que han asistido 200 directivos y representantes de las instituciones y medios de comunicación.

Mayor Oreja ha centrado su discurso en torno a los valores y ha afirmado que “para afrontar el futuro nuestra primera obligación es entender lo que nos sucede hoy; si no lo entendemos, no afrontaremos el futuro en la buena dirección”. El invitado ha explicado que “el presente está descrito con una palabra, que es desorden; está en todas las sociedades occidentales, a un lado y al otro del Atlántico”. “Este desorden es causal (y no casual), porque vivimos el final de una etapa que arrancó tras la segunda Guerra Mundial. Si a ello añadimos un cambio tecnológico sin precedentes, es evidente que el desorden se apodera de las sociedades occidentales”, ha subrayado el invitado.

Todo ello, según Mayor Oreja, nos obliga “urgentemente a cambiar de actitud personal, ahí radica en buena medida la crisis que hemos vivido; no aceptamos la verdad, abrazamos la mentira, nos hemos vuelto una sociedad cómoda, y hemos abandonado los valores propios de una sociedad que busca un proyecto común. Todo ello, fruto del bienestar”.

La crisis “no solo es económica, financiera, política o institucional, es personal, un modo de actitud ante la vida de mi generación. Es una etapa que está terminando y nosotros somos parte de la crisis, salvando excepciones, pero es la regla”, ha añadido.

Mayor Oreja también ha defendido que se trata de “una crisis de la verdad, es una crisis del concepto y el sentido de la obligación, en la que el valor profundo de obligación entra en crisis”. Así, ha explicado que “los vascos y catalanes, porque son dos comunidades probablemente con unos niveles económicos superiores, tendríamos que plantearnos nuestra relación con España en términos de obligación, lo que debemos a España, lo que nos ha dado para que se alcancen los niveles de bienestar y económicos que tienen Cataluña y País Vasco”.

Asimismo, se ha referido a “un nuevo orden mundial que compite con el populismo”, entendiendo como “nuevo orden mundial, un fenómeno mundialista unido al relativismo moral, o la perdida de referencias permanentes y de valores”. El debate, ha afirmado, es “quiénes y cómo representan el nuevo orden mundial”.

Mayor Oreja ha centrado su discurso en torno a los valores

En cuanto a la pérdida de valores, ha asegurado estar preocupado por la “obsesión que existe por destruir los valores que han cimentado nuestra civilización”. “La nada no culmina en la nada, muchas veces culmina en tendencias totalitarias”, ha añadido. “Desde fuera de Europa, la nada atrae a otras culturas que quieren aprovechar la crisis de valores que existe en Europa”, ha recalcado.

Mayor Oreja ha afirmado que “España todavía no ha aprendido lo que es una nación y no hemos sido capaz de premiar la unión; la nación es un espacio de solidaridad reforzada y eso es lo que está en crisis”. “Por eso, el movimiento nacionalista en España es tan poderoso”, ha subrayado. “En España no hay tres movimientos nacionalistas, han un solo movimiento nacionalista, que adopta diferentes estados, cada vez en una comunidad diferente” y, ha asegurado que “el objetivo del movimiento nacionalista va a ser en poco tiempo hacer legal lo ilegal; es decir, conseguir que los referendos sean unos instrumentos legales en España”.

Para afrontar el futuro, Mayor Oreja ha asegurado que será necesario “tener referencias permanentes, volver a valorar una serie de valores, discernir los nuevos tiempos de las etapas de crisis. A más valores europeos, habrá menos yihadismo en Europa”. Valores que “tarde o temprano necesitaremos recuperar”, ha concluido.

Por su parte, el presidente de ADEA, Salvador Arenere, ha coincidido con el ponente en la necesidad de “recuperar los valores que son la base de nuestra sociedad” y ha explicado que esta jornada está en la línea de contenidos que la Asociación de Directivos seguirá a lo largo de este año, centrada en “valores, educación y ética”.

La organización de las actividades de ADEA no sería posible sin el apoyo de su Club de Patrocinadores, formado por entidades y empresas Santander, Caixabank, Palafox Hoteles, Deloitte, Volkswagen Audi Zaragoza, Caja Rural de Teruel, Kühnel Escuela de Negocios, Endesa, Itesal, Sacyr e Ibercaja Banco.