El Ibex 35 rebotó tras sufrir la mayor caída de los últimos meses arrastrada por la fortaleza del euro, la incertidumbre política y la corrección de Wall Street. Tras el desplome del lunes, los mercados se están volviendo a estabilizar al entender que no hay razones de peso que justifiquen un cambio de tendencia. Las causas de esta corrección todavía no están claras y todo apunta a una recogida de beneficios mayor de lo habitual, motivada por las fuertes revalorizaciones de los últimos meses en EEUU.
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El selectivo español perdió los 10.000 puntos de un plumazo, y llegó a caer por debajo de los 9.800 enteros, manteniendo vivo el soporte de los 9.650 puntos. En el caso de que se produzca una estabilización de las bolsas en los próximos días, el Ibex podría recuperar la barrera de los 10.000 puntos con el primer objetivo en los 10.200 puntos.
La sensación que hay en el mercado es la de oportunidad de compra, pero todavía consideramos muy arriesgado tomar posiciones alcistas hasta ver el comportamiento de los inversores durante los próximos días, por si se reanudaran las caídas. No obstante, no vemos ningún catalizador que pueda inundar de pesimismo al mercado.
Joaquín Robles, analista de XTB