El Gobierno de Alemania ha aprobado un proyecto de ley para introducir un servicio militar voluntario, un plan que contempla la opción de hacerlo obligatorio en caso de necesidad
Alemania ha dado un paso inédito en su historia militar. El Consejo de Ministros alemán aprobó este miércoles un proyecto que sienta las bases para aumentar el reclutamiento, inicialmente a partir de la voluntariedad, con el propósito de llegar a tener en torno a 260.000 soldados activos. Esta cifra supondría cerca de 80.000 más que el número actual, y además, aumentaría el número de reservistas hasta los 200.000 hombres. El plan contempla la opción de hacer el servicio obligatorio en caso de necesidad y con el respaldo expreso por parte del Parlamento. El texto ha sido aprobado en sus fases iniciales y todavía falta la luz verde por parte del Bundestag.
El cancilller, Friedrich Merz, y el ministro de Defensa, Boris Pistorius, justificaron los planes aludiendo a la amenaza rusa y a la responsabilidad que tiene Alemania de tener el ejército convencional más grande de Europa para hacer su aporte a la defensa del territorio de la OTAN. «Lo he dicho ya otras veces que por su tamaño y su capacidad económica, Alemania tiene que tener el ejército convencional más grande de Europa«, dijo Merz.
Pistorius, por su parte, afirmó que ante la actual situación de seguridad internacional no solo se requiere un ejército mejor equipado sino también un ejército más grande. Dentro de esta estrategia, es necesario llamar la atención de la población. «Queremos atraer más gente joven al ejército, haciendo más atractiva la formación y la remuneración. La experiencia de otros países como Suecia muestra que se puede hacer crecer el ejército mejorando su atractivo», dijo.
«No se trata de una ley cualquiera; es un gran paso adelante. Debe ser sostenible y a largo plazo. La mentalidad de los jóvenes debe cambiar. Los jóvenes deben decidir: ‘¿Me importa esto? ¿Quiero asumir la responsabilidad?», añadió.
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Según los primeros planes, esa remuneración de los reclutas ascendería a los cerca de 2.300 euros netos mensuales y el ejército asumirá el pago total de los servicios sanitarios. «Estamos integrando formación en drones. Estamos involucrando a todos en grupos activos. Estamos mejorando el salario», continuó Pistorius.
El objetivo es empezar con el reclutamiento de 15.000 reclutas e ir aumentando la cifra paulatinamente. Para ello, a partir de 2026, se reintroducirá un registro obligatorio, abolido en 2011, para determinar que personas están en edad y en condiciones de prestar el servicio. Todos los nacidos a partir de 2008 recibirán correo del ejército para responder una serie de preguntas y deberán responder a la pregunta de si están dispuestos a prestar el servicio.
El ministro de Defensa ha adelantado que considera que durante el proceso parlamentario se registrarán cambios en el proyecto de ley y ha resaltado que «por regla general, ninguna ley sale del Bundestag tal y como entró«. «Lo mismo ocurrirá en este caso», ha explicado.
¿Podría ser un servicio obligatorio?
El nuevo artículo 2a de la Ley del Servicio Militar (WPflG) otorga al gobierno federal la facultad de ordenar el reclutamiento para el servicio militar básico mediante decreto. Esto también es posible si se decretara un estado de defensa o de conflicto, y siempre que esa situación requiera una rápida expansión de las fuerzas armadas que no pueda lograrse de forma voluntaria, aclara el periódico alemán Die Welt.
La activación requiere la aprobación del Bundestag. Si bien los socialistas del SPD insisten en ello, los democristianos lo consideran un obstáculo y exigen una activación automática si no se alcanzan los objetivos de reclutamiento.
La aprobación del proyecto de ley ha tenido lugar después de que Merz y sus socios del SPD acordaran en marzo relajar el techo de deuda, llamada Schuldenbremse, para aumentar el gasto militar. También anunciaron un fondo de cerca de 500 mil millones de euros para infraestructura. «En vista de la amenaza a nuestra libertad y a la paz en nuestro continente, el mantra para nuestra defensa tiene que ser: ‘cueste lo que cueste’«, dijo Merz en el discurso de ese momento.
Además, la medida ha tenido lugar después del pacto de la OTAN de julio, por el que sus 32 socios se comprometen a destinar el 5% de su PIB a la defensa para 2035.










