Exceso de semáforos o falta de visibilidad en giros, claves del Plan de Seguridad Vial de Zaragoza

El proceso participativo ha recibido casi 600 aportaciones de la ciudadanía

Zaragoza contará previsiblemente con su primer Plan Urbano de Seguridad Vial desde este mismo mes de junio. Por ahora, el Ayuntamiento ya ha terminado la primera fase del proceso participativo a través del cual se han recibido casi 600 aportaciones de 42 colectivos diferentes. En ellas se ha puesto de relieve, entre otras cosas, que la ciudad cuenta con una planificación urbanística centrada en el coche, que hay una preocupación latente por el riesgo de los giros a la derecha con falta de visibilidad o que existe un elevado número de semáforos.

“Queremos seguir estando entre las grandes ciudades españolas más seguras”, ha asegurado la concejal delegada de Seguridad Vial, Ruth Bravo. En este sentido, su objetivo pasa por reducir un 50% los fallecidos y heridos graves como consecuencia de un siniestro vial. “Cualquier víctima supone un drama familiar y social al que este equipo de Gobierno no quiere darle la espalda”, ha añadido.

Entre los principales problemas, los colectivos han puesto el foco en la necesidad de adaptar la planificación urbanística a la realidad por la que pasa hoy en día la movilidad, donde aparecen nuevos vehículos más allá del coche. También en los giros con carriles bici o semáforos en ámbar, algunos de los cuales, como en el que perdió la vida el joven Mario Azúa en un desgraciado accidente, ya se han modificado.

De igual forma, se ha pedido que los autobuses urbanos o servicios de limpieza cuenten con sistemas de seguridad, especialmente cuando vayan a realizar trabajos en las inmediaciones de centros escolares. Es por este, entre otros motivos, por los que en las últimas semanas se ha visto como Avanza Zaragoza ha incorporado una serie de cámaras de última tecnología para eliminar cualquier punto muerto que dificulte la visibilidad a los conductores.

OTRAS APORTACIONES

A esto hay que sumar otras temas como la velocidad de bicicletas eléctricas y VMP que para los colectivos plantea situaciones de riesgo. También la falta de normativa clara para los VMP contribuye a la inseguridad vial y genera incertidumbre sobre dónde pueden circular. Por último, que la alta tasa de accidentes en el grupo de motoristas se atribuye a la velocidad en motocicletas de alta cilindrada, así como a la falta de destreza en el manejo, y que el exceso de velocidad de los automóviles se identifica como causa objetiva de siniestralidad y lesividad.

MEDIDAS ADICIONALES

Para paliar este tipo de situaciones, tras esta primera fase el Ayuntamiento de Zaragoza marcará ahora una serie de objetivos generales, específicos y el catálogo de actuaciones, así como el coste que estos cambios podrían suponer. De momento, ya se han puesto en marcha una serie de medidas adicionales previas a modo de prevención de siniestros viales.

Entre ellas, se han despejado 30 pasos de peatones con problemas de visibilidad poniendo estacionamiento para motos. También se han puesto 17 pasos de peatones balizados en el recorrido del tranvía. A estos últimos se sumarán otros nuevos en la avenida San José, avenida Madrid, Conde de Aranda y avenida de Valencia. Del mismo modo, se instalarán pasos de peatones sonoros para personas con déficit visual en 25 puntos de la ciudad.

En esta misma línea, se está trabajando en la implementación de carriles sinuosos para reducir la velocidad en las rectas o se han elevado pasos de peatones en cruces. «El peatón sigue siendo el más débil de la cadena y muestra de ello es que la tendencia que marca en concreto la serie de los años 2022 y 2023 nos dan los datos gruesos: el 60% en cruces de peatones no semaforizados y el 40% atropellos por cruzar en zonas donde no se debía”, ha respondido Bravo en referencia a la necesidad de este tipo de medidas.

CAMPAÑA DE SENSIBILIZACIÓN

Precisamente, la Policía Local va a realizar una campaña de sensibilización entre los próximos días 13 y 19 de mayo, ambos incluidos, con el objetivo de concienciar y sensibilizar a conductores de bicicletas y VMP sobre el uso responsable de este tipo de vehículos y a los peatones sobre el comportamiento adecuado en su tránsito por el viario público, acerca de las consecuencias del incumplimiento de la normativa que les afecta, y todo ello al objeto de conseguir hábitos para los desplazamientos seguros.