Los aragoneses Carlos Mayo y Cristina Espejo, los más rápidos en la meta de la 10K
El XVII Mann-Filter Maratón de Zaragoza dio un paso más en su consolidación de cita grande con más de 6.000 corredores entre los 1.400 maratonianos y los más de 4.300 corredores de la cada vez más popular 10K en una mañana de sol radiante y ambiente de fiesta en la que los atletas Álex Jiménez y Rita Jeptoo se coronaron como los atletas más fuertes en la prueba grande, mientras los aragoneses Carlos Mayo y Cristina Espejo devoraron la decena de kilómetros de la prueba popular.
LAURA TRIVES
Desde primera hora de la mañana, la Plaza del Pilar fue un hervidero de participantes y familiares y amigos dispuestos para vivir unas horas de sacrificio y superación los unos, de entusiasmo y reconocimiento los otros. Entre ‘selfies’, calentamientos en grupo, estiramientos y carreritas de aquí para allá, los más intrépidos tomaron a las 8.30 desde la misma Plaza del Pilar una salida venerada por los aplausos del público y se embarcaron en la aventura de recorrer la ciudad de arriba abajo por muchas de sus calles y monumentos más emblemáticos. Por el camino, ritmos, estrategias y retos personales fueron matizándose conforme las piernas y los pulmones daban la medida real de su rendimiento en una mañana de calor en la que el perfil afilado de la segunda media asomaba amenazante.
Cuando la mayoría de corredores populares de la 10K aún andaban atareados en calentamientos y despedidas, la cabeza del maratón ya transitaba por Don Jaime (todavía kilómetro 2), con Álex Jiménez en cabeza, un Alberto Puyuelo que salió como una bala y Alejandro Paredero a su vera. Testigo de ello fue el canterano del Real Zaragoza, Iván Azón, que dejó verse entre un público animoso que no paró de insuflar el aliento que a no pocos les faltó, sobre todo en la parte final del trazado, cuando el calor golpeó con su mazo.
La acumulación de kilómetros dejó claro al líder de la carrera que su objetivo de parar el crono en 2 horas y 12 ó 13 minutos quedaría para mejor ocasión, así que el atleta madrileño, subcampeón europeo de 50k, se centró en atar el triunfo y disfrutar del recorrido y del apoyo de la gente. Así entró de eufórico en la meta (2.16.36), chocando las manos de un público cómplice con su alegría. Y sobrado de energía, pues Jimémez volvió luego sobre su trote para seguir recibiendo el cariño de la gente.
Por detrás, Alberto Puyuelo, prudente en su derroche de energías, abrió brecha con su perseguidor y se dedicó a regular para llegar muy entero a la meta, donde marcó un tiempo de 2.20.23. El aragonés anda con el bullebulle en la cabeza de probar los límites de su cuerpo y sumar próximamente varios maratones más antes de dar el salto a distancias todavía superiores, tal y como confesó en la retransmisión de Aragón TV. Completó el podio el salmantino Alejandro Paredero que en su primer maratón en serio tras hacer de liebre en el de Sevilla, paró el crono en 2.28.37.
La keniana Rita Jeptoo, vencedora en maratones de renombre como Chicago y Boston, no tuvo rival en la capital aragonesa con un tiempo de 2.38.12.
En los 10K Carlos Mayo llegó en solitario a la meta con un tiempo de 29.19 y completaron el podio los también aragoneses Jesús Olmos e Iván Maneñido. Cristina Espejo fue la mujer más rápida con 34.20, imponiéndose a Lorena Plano y María Velázquez.
