Inicio Entrevistas «Francina Armengol no es que fuera estafada, es que consintió la estafa»

«Francina Armengol no es que fuera estafada, es que consintió la estafa»

El portavoz del Gobierno andaluz y consejero de Medio Ambiente defiende que «la urgencia no va reñida con la legalidad. Los procedimientos de urgencia también están reglados» | «Invito a la señora Díaz a que se venga a cenar a Sevilla un mes de agosto a las seis de la tarde»

Pertenece a una estirpe familiar del alcaldes de Almería, una especie de dinastía local interrumpida en 2022, cuando Juan Manuel Moreno le fichó para nombrarle consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul. Apenas unos meses después le agregó otro título al cargo, el de portavoz de la Junta de Andalucía. Ramón Fernández-Pacheco (Barcelona, 1983), llegó a sonar como relevo de Moreno cuando éste coqueteaba con la idea de estar solo dos legislaturas al frente de una comunidad que parecía territorio inconquistable, aunque ya ha aclarad0 su aspiración a intentar un tercer mandato.

En el ojo del huracán por los regadíos de Doñana y en lucha compartida contra la sequía en Andalucía -competencia con Consejería propia- se le considera a Fernández-Pacheco uno de los valores emergentes del partido en Andalucía y estrecho colaborador de uno de los barones más poderosos del PP.

Pregunta. -¿Es sostenible la situación de Francina Armengol a raíz del ‘caso Koldo’?

Respuesta. -Durante la pandemia era alcalde de Almería. En aquel momento todos estábamos absolutamente desesperados y nos agarrábamos a un clavo ardiendo. También hubo una serie de sinvergüenzas que intentaron lucrarse a costa de necesidad perentoria que tenía el país. Lo grave del «caso Koldo» no es que una serie de dirigentes políticos hiciera lo imposible por conseguir mascarillas, es que el listón lo ha marcado el PSOE. Cuando piden la dimisión al señor Ábalos, que es un diputado raso, se dice expresamente que no está investigado, pero hay que lanzar un mensaje de ejemplaridad. Pero cuando el círculo comienza a estrecharse en torno a la presidenta del Congreso, tercera autoridad del Estado, la ejemplaridad ya no es aplicable.

Cuando el círculo comienza a estrecharse en torno a Armengol, la ejemplaridad ya no es aplicable»

P. -¿Cree que debería dimitir?

R. -En primer lugar, hay que ser respetuoso con la investigación judicial. Pero más allá de eso, lo de la ejemplaridad política lo usó el PSOE con Ábalos. Siendo consecuentes con esa teoría, la señora Armengol debería dimitir con mucho más motivo, puesto que era la presidenta de una comunidad que, no es que fuera estafada, es que consintió la estafa con informes claros de su intervención diciendo que aquello no era correcto.

P. -¿Han revisado los contratos que hicieron ustedes en esos años?

R. -Absolutamente. En la Junta de Andalucía estamos absolutamente tranquilos con lo que se hizo, igual que en los ayuntamientos. Se ha escrutado contrato a contrato. La urgencia no va reñida con la legalidad. Los procedimientos de urgencia también están reglados por ley, la ley los contempla, y, ciñéndose a la ley, uno nunca se equivoca.

P. -¿En qué medida este asunto puede pasar factura al presidente del Gobierno?

R. -Habrá que ver cómo se va desarrollando la investigación, qué hace la Audiencia, si esto acaba en el Supremo o no, hasta qué punto puede afectar a su ministro de Política Territorial, a la presidenta del Congreso, a las informaciones que apuntan a la propia mujer del presidente… Las penas de telediario no contribuyen a que España goce de salud democrática. Cómo estará la cosa para que la amnistía se convierta en el balón de oxígeno de este gobierno. Estamos normalizando cosas que no son normales.

P. -¿Cómo la ley de Amnistía?

R. -Para más del 70 por ciento de los españoles la amnistía no es una cosa normal, para el Pedro Sánchez de hace unos meses no lo era; para el Salvador Illa de hace unos días tampoco.

P.-¿Qué peso tiene en su territorio este debate?

R. -No nos lo planteamos como una manera de arañar la figura política de Pedro Sánchez. Presentar un recurso de inconstitucionalidad obedece a lo que entendemos como la institucionalización de una injusticia.

Invito a la señora Díaz a que se venga a cenar a Sevilla un mes de agosto a las seis de la tarde»

P. -¿Hay que cerrar los restaurantes a las 11 de la noche como ha dicho Yolanda Díaz?

R.- La mejor manera es invitar a la señora Díaz a que se venga a cenar a Sevilla un mes de agosto a las seis de la tarde y que ella compruebe en su propias carnes si eso es positivo para la economía y los puestos de trabajo. De vez en cuando, Díaz busca el foco que el PSOE le niega. Lo hemos visto en la campaña de Galicia, con esa imagen pseudocómica, buscando pelets por la playa, y con otras ocurrencias que saca. Por la mañana quiere ir a ver al Papa, por la tarde es la más comunista del país…

P. -¿Por qué llevaron a tal extremo el enfrentamiento con Teresa Ribera sobre Doñana?

R. – En el entorno de Doñana existe una problemática social, fruto de una injusticia por una decisión de 2014, para muchas familias del entorno del Parque Nacional. En las elecciones de 2018, Juanma Moreno se comprometió a darles una solución y lo llevó en su programa electoral. Siempre dijimos que la proposición de ley era nuestra solución, pero que no tenía por qué ser ni la mejor ni mucho menos inamovible. Tal es así que el PSOE, en la anterior legislatura se abstuvo. Una vez que encontramos un escenario de diálogo la cosa se recondujo perfectamente.

Nuestra intención es cumplir el pacto sobre Doñana a rajatabla, punto por punto»

P. –No obstante, surgió un problema reciente con el decreto de simplificación que podía afectar a Doñana. ¿Hubo intento de sortear el acuerdo con la vicepresidenta?

R. –En absoluto. Estamos hablando de un decreto de simplificación que tiene 600 páginas y en todo ese extenso decreto el PSOE sólo tiene que reprochar una matización y una corrección técnica en dos artículos. Tardamos dos minutos en arreglarlo. Nuestra intención es cumplir el pacto a rajatabla, punto por punto.

P. –¿Cómo van a paliar el tema de la sequía para un verano que se prevé terrible?

R. –La sequía es, sin duda, el mayor riesgo que Andalucía tiene en el horizonte, no sólo porque afecta a nuestros entornos naturales, sino que afecta a nuestra salud, al aire que respiramos y, de forma directa, a nuestra economía. Andalucía es la principal potencia agrícola de España y turística y ambos pilares dependen directamente del agua. El futuro y provenir de miles de familias dependen del agua. Hemos sacado tres decretos de sequía, movilizando una cantidad ingente de recursos, nunca antes se había hecho tanta obra hidráulica, que es el motor de la obra pública en Andalucía, y ahí es donde hace falta un escenario de cooperación.

P. –¿Creen que habrá nuevo modelo de financiación esta legislatura?

R. –Es difícil cuando ni siquiera se convoca la Conferencia de Presidentes a pesar de que lo han solicitado trece presidentes autonómicos del PP. Nosotros conocemos muy bien a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Ella fue de la primera que comenzó a hablar en el Parlamento de Andalucía de la necesidad de dotar a España de un nuevo modelo de financiación que paliara la injusticia que sufría nuestra comunidad y de la necesidad de tener un fondo de nivelación, que le pedía al señor Rajoy. Ahora, que tiene en su mano hacerlo, no solo no lo hace sino que, ni siquiera, convocan a los presidentes a hablar.

No podemos blanquear que está bien que se negocie solo con Cataluña»

P. –¿Temen que se pacte un modelo con Cataluña y posteriormente ustedes lo tengan que asumir?

R. –Es que tenemos constancia fehaciente de que eso es así. A Cataluña se la ha ofrecido una quita de la deuda que, ante la crítica generalizada del resto, se ha pretendido generalizar.

P.-¿Qué van a hacer ustedes con la quita de la deuda?

R. –No podemos blanquear esa actitud. Si nosotros dijéramos de primeras que sí, que estamos de acuerdo, sería tanto como reconocer que lo que hace el Gobierno negociando sólo con Cataluña está bien y no puede ser, es como quedarse con lo que el primero no ha querido.

P. –Los andaluces no entenderían que ustedes no se quitaran parte de la deuda.

R. –A los andaluces lo que les decimos es que no somos menos que los catalanes y que si el Gobierno se reúne primero con ellos, nosotros, que tenemos más territorio, más población y más presupuesto, merecemos ese trato como mínimo. Pero no queremos que se reúnan con Andalucía solo, sino que convoquen la Conferencia de Presidentes y el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Y, por lo tanto, no vamos a contribuir a blanquear esa actitud.

Ya no hace falta estar afiliado al PSOE-A para que te vaya bien con la Junta»

P. -¿Cómo es posible pasar de cuarenta años de gobierno socialista a una mayoría absoluta tras un ejecutivo de coalición?

R. -Durante muchos años el PSOE ha jugado a la política del miedo, del que viene la derecha y va a acabar con los derechos sociales, con la sanidad y la educación públicas o desmantelar el Estado del bienestar. Juanma Moreno demostró que aquello, no solo era mentira, sino que haciendo las cosas de forma diferente se podían obtener mejores resultados, bajar los impuestos y atraer nuevas empresas y recaudar más para reforzar la educación o la sanidad. El cambio más importante es que ya no hace falta estar afiliado al PSOE-A para que te vaya bien con la Junta. El PSOE institucionalizó una red clientelar que, en algunos casos ha acabado en los juzgados y, en otros, convivíamos con ella.

P. –¿Cómo ve a los socialistas andaluces?

R. –El socialismo en Andalucía corre el riesgo de convertirse en irrelevante. El portavoz socialista en el Parlamento andaluz y en el Senado asume las tesis de Sánchez al cien por cien, a pies juntillas y sin salirse ni un ápice del argumentario de Ferraz. A nadie le interesa lo que dice Juan Espadas porque no lo dice Juan Espadas, sino Pedro Sánchez. Méritos para que Pedro Sánchez no lo castigue, está haciendo. Lealtad y fidelidad a su jefe, eso es incuestionable.