El Ejecutivo madrileño presenta una demanda ante el Tribunal Supremo contra el nuevo Plan Hidrológico del Tajo
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha denunciado este lunes los perjuicios que tiene para la región el nuevo Plan Hidrológico del Tajo que el Gobierno de Pedro Sánchez ha diseñado, asegurando que lo que pretende es «boicotear» el suministro, según ha podido saber THE OBJECTIVE de fuentes del Gobierno madrileño. Ayuso ha anunciado durante su intervención en el Círculo de Navarra en Madrid que han presentado una demanda ante el Tribunal Supremo.
Ayuso cumple su promesa de devolverle al Ejecutivo de Sánchez «golpe por golpe», con el convencimiento de que en esta legislatura se va a convertir en la diana de todos los ataques del PSOE y sus socios de investidura. La primera respuesta a una de las medidas que quiere poner en marcha el presidente socialista se producirá este lunes.
Desde el Ejecutivo madrileño se acusa a Sánchez de haber diseñado un nuevo Plan Hidrológico del Tajo que tiene como objetivo «sitiar la Comunidad de Madrid». Estas fuentes del Gobierno de Ayuso señalan que el presidente «está utilizando el agua como arma política, para asediar a la capital de España, que no se doblega ante sus atropellos».
Este nuevo Plan Hidrológico, siempre según las fuentes de la Comunidad de Madrid, «cambia radicalmente las reglas y boicotea el sistema de abastecimiento de agua de Madrid, que es el mayor de España y uno de los mejores del mundo».
Durante su intervención este lunes ante el Círculo de Navarra de Madrid, Ayuso ha anunciado la presentación de una demanda ante el Tribunal Supremo por este «ataque a Madrid». La presidenta madrileña asegura que este nuevo plan les «impide cumplir los requisitos de depuración y nos obstaculiza la depuración. Pretenden que el agua de los madrileños dependa de unos permisos que ellos mismos autorizarían o denegarían, mes a mes, arruinando cualquier capacidad de planificación».
Ayuso ha desvelado que el Gobierno «ha rechazado la mayoría de las alegaciones del Canal de Isabel II» y ha calificado de «mezquino e inhumano el nuevo ataque de Sánchez a Madrid. Nos quiere dejar sin trenes, sin aviones de media distancia, sin museos, sin instituciones, nos quiere discriminar con la financiación, pero no hay nada peor que pretender racionar el agua a casi siete millones de personas.»
La presidenta madrileña ha advertido que «cuando piensas que Sánchez ha dado lo peor de sí mismo siempre nos sorprende con una nueva. No nos vamos a rendir, no se van a salir con la suya por mucho que nos asedien, porque Madrid es una región brava, valiente y luchadora que no se doblega ante los abusos, vengan de donde vengan».
