El santoral católico recuerda hoy, domingo 22 de octubre, a San Juan Pablo II, un papa que marcó profundamente la historia de la Iglesia y el mundo contemporáneo. Nacido como Karol Józef Wojtyła en 1920 en Polonia, San Juan Pablo II se convirtió en el primer papa no italiano en más de 450 años. Su pontificado, que abarcó desde 1978 hasta su fallecimiento en 2005, fue uno de los más largos y significativos de la historia de la Iglesia. Durante su liderazgo, trabajó incansablemente por la promoción de la paz, la defensa de los derechos humanos y la evangelización global.
San Juan Pablo II fue un defensor de la vida y la dignidad humana, promoviendo la enseñanza católica sobre asuntos como el aborto, la eutanasia y la bioética. Realizó viajes apostólicos a más de 129 países, acercando el mensaje cristiano a personas de todas las culturas y religiones. Su influencia en la caída del comunismo en Europa del Este y su labor en el diálogo interreligioso son ejemplos destacados de su impacto en la historia mundial.
Este 22 de octubre, el santoral también homenajea a San Marcos, un obispo de Jerusalén que vivió en el siglo II. San Marcos es recordado por su compromiso con la predicación y la enseñanza de la fe cristiana en la tierra santa. Su liderazgo en la Iglesia primitiva contribuyó a fortalecer la comunidad cristiana en Jerusalén y a preservar la tradición de la fe en esa región.
Hoy, en la celebración de la fe católica, rendimos homenaje a dos figuras notables: San Juan Pablo II, cuyo pontificado dejó una profunda huella en la Iglesia y en la humanidad, y San Marcos, cuyo servicio a la Iglesia primitiva en la tierra santa sigue siendo un ejemplo de fidelidad y compromiso. Ambos santos nos inspiran a vivir nuestra fe con pasión y dedicación, sirviendo a los demás y promoviendo los valores cristianos en el mundo actual.
¿POR QUÉ SE CELEBRAN LOS SANTOS?
La onomástica es una forma de reconocer y honrar sus logros espirituales y de buscar su guía e inspiración en nuestras propias vidas. Se venera a los santos como líderes espirituales o figuras que han alcanzado un alto nivel de santidad y han vivido su vida al servicio de Dios o de una religión concreta.
Muchos santos tienen un día especial dedicado a ellos, que celebran los fieles de todo el mundo. Para ello, en cada cultura se celebran diferentes ceremonias religiosas, leyendo sus enseñanzas o visitando lugares sagrados asociados a ellos.
