Aunque le costó terminar, el español arrolla al italiano en una hora y 57 minutos (6-0, 6-2 y 7-5) camino a la segunda ronda, donde lo espera Taro Daniel
Los ojos están puestos en él, pero los acepta con una sonrisa en la boca y un tenis propio de su ranking. El número 1 del mundo, y del torneo, se pasea en el estreno en Roland Garros, ese que dicen que es tan complicado, por la presión y esas cosas, pero que Carlos Alcaraz despacha en una hora y 57 minutos. Es verdad que el rival, Flavio Cobolli, 21 años y 159 del mundo, le pone interés, y un empeño final para dejar su huella, pero no gran resistencia.
ROLAND GARROS
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6 | 6 | 7 |
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0 | 2 | 5 |
En apenas 24 minutos es un 6-0 lleno de derechas ganadoras y profundas y dejadas que comparte con el italiano. Y una Suzanne Lenglen con unas ganas enormes de ver a este Carlos Alcaraz líder de todo. De los nueve sets que ha ganado en su carrera por 6-0 (en el lenguaje popular del tenis se llaman ‘roscos’), este es el tercero que consigue en un Grand Slam. El primero llegó en los octavos de final del US Open 2021, a Peter Gojowczyk (5-7, 6-1, 5-7, 6-2 y 6-0); y el segundo llegó también en París, y también en la primera ronda, contra Juan Ignacio Londero en 2022 (6-4, 6-2 y 6-0). De ahí que la alegría del italiano cuando sumó su primer juego ya en el segundo parcial fuera enorme.
Pero no está para despistes este Alcaraz de 2023 que tiene tanto que mostrar como líder de la ATP y tantas ganas de demostrarlo. Con el saque con una alta efectividad (cien por cien de los puntos ganados con el primer servicio en el segundo set), empujó a Cobolli a la línea de fondo, muy fino con la derecha paralela y cruzada, para apuntillarlo después con dejadas. Y si este todavía llegaba, la puntilla llegaba hacia el otro lado. Es decir, sin solución a pesar del empeño del italiano. En 26 minutos, el 6-2 del segundo set.
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Se guardaba lo mejor para el tercero, más competido porque Cobolli se soltó por fin. Hasta dos bolas de break tuvo al inicio. Pero ahí también apretó el murciano, que desquició a su rival con contradejadas imposibles y botes prontos que dejaron al personal con la boca abierta. En ese personal, también Cobolli, incrédulo ante ciertos golpes del español.
Con un recital de restos ganadores, el murciano deshizo el empate para no pasar más tiempo en pista. Sin embargo, Cobolli quiso darse un pequeño homenaje; aprovechó un bajón de efectividad del español (30 errores no forzados y 26 ganadores al final) para romperle el servicio, que celebró a lo grande porque era un 5-5. Pero ajustó la mano Alcaraz, que ya no quiso más sorpresas ni sustos. Ya ha probado cómo es jugar en Roland Garros como número 1. Ya ha probado la Suzanne Lenglen. «He disfrutado muchísimo jugar aquí. Intento disfrutar siempre jugando, estando en la pista. Es lo más importante para mí, divertirse», se expresó el murciano a pie de pista. Y ya aspira a más: más nivel propio, más dificultad ajena (su siguiente rival es Taro Daniel), más rondas que lo acerquen a su primer título en París.
También está en segunda ronda Novak Djokovic, que batió a Aleksandar Kovacevic por 6-3, 6-2 y 7-6 (1); también Roberto Bautista, vencedor ante Wu (6-4, 6-1 y 6-1) y Aliona Bolsova (6-2 y 6-1 a Kucova). Entre las sorpresas de esta segunda jornada en París, la derrota de Felix Auger-Aliassime, apeado a las primeras de cambio por Fabio Fognini (6-4, 6-4 y 6-3).
