La presidenta de la Comunidad de Madrid niega discrepancias con el líder del PP sobre Bildu y advierte de que quien debe preocuparse por su futuro a partir de enero es Pedro Sánchez
La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, ha participado este lunes en el foro ABC, donde ha sido entrevistada por Juan Fernández-Miranda, en la recta final de la campaña electoral ante los comicios del 28 de mayo. Ayuso ha defendido su posición sobre Bildu, para que se estudie su ilegalización y tener así una seguridad plena, porque «no es pasado, sino futuro» y así se podría evitar un arrepentimiento posterior. La presidenta madrileña ha negado discrepancias con Feijóo en ese punto y le expresado su pleno apoyo: «Creo en Alberto Núñez Feijóo y creo que no solo va a llegar, sino que va a ser un excelente presidente».
«Están construyendo una supuesta nueva nación, un nuevo proyecto que no deja de crecer de manera preocupante. En el futuro nos podremos arrepentir de no haber buscado vías legales para evitarlo», ha advertido Ayuso sobre lo que está ocurriendo con Bildu, que ha presentado a 44 terroristas en sus listas electorales.
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha sido tajante sobre Bildu. y ha explicado así su posición: «Quiero dejar claras algunas cuestiones. Yo no busco ilegalizar Bldu porque no me guste. Eso no es así y no defendería jamás algo tan absurdo. Mi pregunta es si estamos estudiando todas las vías y si estamos plenamente seguros de que este proyecto es legal y si hemos hecho todo lo que está en nuestras manos para que vaya a mayores. Esto no es pasado, es futuro. Están construyendo una nación, un futuro, que no deja de crecer en Navarra, en Rioja alavesa, para ir viciando el censo, como han hecho en el propio País Vasco. No se puede banalizar el mal».
Sobre la discrepancia con Feijóo, que no ha puesto el acento en la posible ilegalización de Bildu, ha asegurado que no es una cuestión de discrepar sino de analizar distintas vías para solucionar un problema que ven, ha dicho, de la misma manera.
«No voy a consentir un enfrentamiento con el presidente de mi partido, y no lo voy a consentir, porque los dos pensamos lo mismo, con la diferencia que yo me pregunto si esto se puede llevar al Supremo», ha explicado. Y ha pasado al contraataque contra Sánchez: «No somos en el PP los que tenemos esas divisiones, cuando tenemos un presidente con el Gobierno partido, incapaz de sentarse con los presidente autonómicos de su partido».
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La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha referido al acoso y señalamiento desde la izquierda a periodistas, políticos y empresarios, y ha calificado de «intolerable» los insultos que ha recibido Ana Rosa Quintana. Pero también se le ha preguntado por el señalamiento personal a su hermano, al que Podemos ha colocado en una lona gigante en la calle Goya de Madrid, y ha aparecido en la camiseta de Ione Belarra y Alejandra Jacinto.
«Prefiero que este asunto pase. Yo no voy a analizarlo ni voy a hablar mucho del asunto, porque él no está en política, por más que Podemos quiera meterlo en campaña. Lo hacen con su nombre, con señalamiento y acoso. Lo que hagamos o no lo comentaremos en otro momento. Prefiero que este asunto pase y no me quita las ganas de trabajar igual».
«El cambio es evidente»
Ayuso está convencida de que, ante las elecciones del domingo, «el cambio es evidente, el desgaste también». «Estoy convencida cien por cien de que va a haber un vuelco sin precedentes».
¿Por qué está tan cómoda en la confrontación con el presidente del Gobierno y por qué el eje de su campaña tiene que ver con la propuesta de un gobierno alternativo desde la Comunidad de Madrid?, se le ha preguntado en la entrevista.
«Quién dice que estoy cómoda. Ya le digo que no. Sería más cómodo inventarme un regionalismo que no existe, un Madrid que no existe. No somos 17 países. Me ocupo de que los vascos, los catalanes que vienen a Madrid hartos de los nacionalismos tengan su voz y sepan por qué pasan las cosas».
En ese sentido, ha explicado que el que ha irrumpido en la campaña es el presidente del Gobierno con sus propuestas del Consejo de Ministros y ataca abiertamente a ella y a Madrid, «y niega a los madrileños su esfuerzo al hablar del efecto capitalidad». «Claro que las elecciones van de él también. Por supuesto que va de él. Siempre busca cómo perjudicar Madrid, cómo buscar el colapso de los servicios».
¿Se siente el pimpampum de la izquierda?
«El pim pam pum es todo lo que sea Partido Popular. Nosotros somos uno más. Sí que se ve el interés que despierta en toda España la campaña de Madrid».
Respecto a si Feijóo debería plantear una estrategia general a nivel nacional del partido para los gobiernos que no puedan actuar con una mayoría suficiente, Ayuso entiende que «cada situación es distinta, pero esto lo sabremos a partir del 28». «El PP es un partido de ganadores, nunca ha sido bisagra, tiene que aspirar a ganar con amplia mayoría en todas partes. Ser el mejor PP, que no se compara con otros sino que ofrece una muy buena gestión de servicios públicos sino una forma de ver la vida en torno a valores de libertad y de vida, que nos han dado sentido siempre».
La idea de Feijóo de que gobierne la lista más votada tampoco convence a Ayuso, que, como ha recordado, llegó a la Presidencia de la Comunidad en 2019 sin haber ganado las elecciones autonómicas. «Para eso están los parlamentos, para que haya sumas de diputados. Esto sería bueno si buscáramos definitivamente dar una estabilidad y dejar de estar en manos de minorías rabiosas, pero como no va a suceder, porque hace tiempo que el PSOE emprendió cualquier cosa con quien sea menos con el PP, es una debate que no tiene recorrido».
La presidenta de la Comunidad no ha querido entrar en la defensa que hace Feijóo de los pactos con el PSOE, como mejor opción, y al que ha ofrecido diferentes pactos de Estado en el último año.
«Estoy en posición de apoyar al líder del PP que tiene, que tenemos todos, una única oportunidad de cambiar las cosas, ahora y en diciembre. Porque si no la situación de España, la inercia que están tomando los acontecimientos, van a hacer que estemos en una situación catastrófica en los próximos cuatro años a todos los niveles, institucional, territorial y en el ánimo de los ciudadanos. Tendrá que ser lo que el líder de mi formación diga, y yo a su entera disposición. Yo no pactaría con el PSOE muchísimas cosas».
Respecto a la posibilidad de que Ayuso tenga una intención en el futuro de llegar a La Moncloa en el futuro, ha sido rotunda: «Lo atribuyo a un juego absurdo. Quien se tendría que empezar a preguntar qué va a ser de él es pedro Sánchez y qué va ser de nosotros, el PSOE. Quién lo va a sutituir a él después de tanto año. Y quién va a llevar las riendas de ese partido después de tanto deterioro y tanta amoralidad…».
¿Seguirá en la Comunidad de Madrid los próximos cuatro años?, se le ha insistido en la entrevista.
«Sin ninguna duda. Estoy al servicio de España desde Madrid. los madrileños somos antes de nada españoles. No somos 17 presidentes nacionales de terruños. Estamos al servicio de España cada uno desde su comunidad autónoma. Creo en Alberto Núñez Feijóo, y sé que no solo va llegar sino que va a ser un excelente presidente y va a enderezar el rumbo que ha tomado España».
Ayuso se ha referido al cinturón rojo de Madrid y las dificultades del PP en esa zona clave de la Comunidad. La presidenta ha negado que al PP le cueste mucho entrar allí: «Ayer estuvimos en Leganés y la ilusión que vimos fue impresionante. El mensaje de la izquierda se hunde en Madrid», constató.
La presidenta ha recordado el incidente que se vivió en la Puerta del Sol con el ministro Félix Bolaños , cuando intentó colarse en la tribuna de honor, pese a no estar invitado. Ha señalado que no ha hablado con él en el último mes y ha desvelado qué le dijo la ministra de Defensa, que sí estaba invitada en la tribuna: «Lo estaba pasando mal, porque todo era un sinsentido. Ella nos decía que no sabía qué hacer. No estaba nada cómodo. Le pedí que se quedaba con nosotros, que habíamos trabajado mucho y no nos merecíamos que Bolaños viniera a destrozar el 2 de mayo».
