Feijóo exige a Sánchez que rompa con Bildu y el presidente contesta con el 11-M

El líder del PP reprocha al presidente del Gobierrno que «si lo de Bildu no es decente, tampoco es decente que pacte» con ellos

Los siete etarras condenados por asesinato renuncian a su candidatura en Bildu

Se respiraba un ambiente tenso en el Senado. La sala de prensa por momentos enmudecía como pocas veces. Un silencio espeso. Y la certeza de que se acababa de producir el choque más descarnado entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo. El choque parlamentario fue brutal. Y también la guerra del relato que ya como un ritual acompaña a cada debate parlamentario, con los principales asesores de los líderes tratando de convencer a los periodistas de que su jefe había ganado. Pero ayer había poco más que añadir. Sánchez y Feijóo pisaron el acelerador.

Choque frontal. Ruptura total. La sesión de control al Gobierno en el Senado ha enfrentado a Pedro Sánchez Alberto Núñez Feijóo en un durísimo enfrentamiento a cuenta de la relación con Bildu y sus candidaturas electorales. El presidente del PP ha criticado al líder del Gobierno por ser «más condescendiente con Bildu que con mi partido, más cruel con el PP que con Bildu, más generoso con los verdugos que con las víctimas».

A partir de la reflexión de Sánchez considerando que las listas de Bildu eran legales pero no decentes, Feijóo le ha planteado al presidente que «si lo de Bildu no es decente tampoco es decente que pacte usted con él» y que «si lo indecente es legal en tus manos está que no lo sea». El líder del PP le ha pedido a Sánchez que «garantice hoy en esta sesión de control que el pacto con Bildu» se ha terminado: «O rompe con Bildu o rompe usted con la decencia».

La respuesta de Sánchez ha sido durísima, incluso acusando al PP haber intentado impedir «el empeño de acabar con ETA». El líder socialista ha reprochado al PP por no «digerir» que ETA se extinguió bajo un gobierno socialista. Sánchez no ha hecho en su respuesta ninguna crítica a Bildu ni ha contestado a la pregunta de Feijóo, pero sí ha traído a colación el 11-M de 2004 acusando al Gobierno del PP de haber difamado a las víctimas.

Feijóo había cuestionado a Sánchez por no ser capaz de pedirle a sus socios que retirasen sus candidaturas. Ha acusado al presidente de un «mutismo vergonzante» y de ser «más condescendiente con Bildu que con mi partido». Feijóo ha pedido una rectificación completa.

Primero que se formalice ante la Junta Electoral la renuncia a estas listas y que renuncien también el resto de condenados por terrorismo: «Se van 7 y se quedan 37. ¿Le parece bien que salgan los que apretaban el gatillo y se queden los que les daban las pistolas?». Sánchez ha querido presumir de que «fue con gobiernos socialistas cuando se derrotó a ETA» y que eso es «algo que no pueden digerir».

A partir de ahí ha recordado que «ustedes se rebajaron a la infamia de llamar a ETA Movimiento Vasco de liberalización nacional» y que «acercó a 120 presos el año del atentado de Miguel Ángel Blanco». Sánchez ha tomado unas palabras de Rubalcaba: «Tomar posesión de un escaño siempre es mejor que tomar las armas».

Feijóo ha reprochado a Sánchez por su «soberbia ante los españoles» y se ha referido a la historia del PSOE: «No entiende nada de lo que está ocurriendo. 144 años del PSOE para acabar a disposición de Bildu, qué pena. Por eso ha vuelto a ser más cruel con el PP que con Bildu».

El presidente del PP ha vuelto a retar a Sánchez a que diga sí aceptará los votos de Bildu tras el 28M en municipios del País Vasco o en el Gobierno de Navarra. Pero no ha tenido respuesta. En su réplica Sánchez tampoco ha contestado a esta pregunta y ha acusado a Feijóo de «abrir las puertas de par en par al partido de la ultraderecha» y ha insistido en responsabilizar al PP de utilizar a ETA: «Cuando para España ETA no es nada para ustedes ETA lo es todo».

El debate de este martes ha destilado una enorme tensión. Fuentes del PSOE trasladan «no queda ni la sombra de aquel hombre que venía de Galicia con ese aura institucional y de seriedad. Casado es un amateur comparado con el extremismo del Sr. Feijóo». El PSOE considera que «en un año, el líder del PP ha dilapidado su capital político»por «la deriva que le impone un partido que cerró una crisis de liderazgo en falso, y que es dirigido desde la Puerta del Sol».

Defienden desde las filas socialistas que «el presidente del Gobierno ha tenido que decirle a Feijóo la verdad histórica de su partido, algo que siempre olvida el líder del PP, sea quien sea». En el PP se han referido a la frase del presidente en la que ha acusado al PP de haber trabajado contra el fin de ETA: «Ha cruzado un Rubicón impensable cuando Sánchez ha dicho que el PP hizo lo imposible para no acabar con ETA. Pensábamos que ni él podía cruzar esa línea», señalan desde el PP.

Desde la cúpula del PP hacen énfasis en que «Sanchez no le ha dicho nada a Bildu. Ni con la boca pequeña. Es sorprendente». «No ha dicho nada a los terroristas y ha criticado al Aznar del 97. ¿Cómo se le puede acusar de connivencia a un señor al que le pusieron una bomba? Ha entrado en un desfase impropio de un presidente», insisten desde Génova. «Es una provocación lo que ha hecho, decir que al PP le interesaba que no se acabara ETA», añaden.

Desde el PP dejan claro que ha sido Bildu quien ha traído a ETA a la campaña con la inclusión en las listas. «Si conseguimos que se retiren los 37, se acaba», trasladan desde el entorno del líder del PP cuando se les acusa de utilizar este tema como eje de la campaña electoral para el 28M.