La ministra de Educación, Pilar Alegría, se ha pronunciado sobre los contenidos de los libros de texto para el próximo curso cuyo contenido adelantó ABC y que contienen propaganda sanchista, hacen alusiones a la eutanasia, a la leu de memoria democrática y cuestionan la monarquía, entre otras cuestiones.
«Es un mantra. Cuando se habla de adoctrinamiento, ¿a qué se refieren?», espetó la ministra a lo que el periodista le respondió: «carteles del PSOE», en alusión directa al reportaje publicado por este periódico. «Bueno es que el partido socialista igual que el resto de los partidos formamos parte de la historia de nuestro país», trató de defenderse Alegría.
El periodista le preguntó entonces por qué no había fotos del PP pero Alegría volvió a la pregunta inicial.
«¿Que quieren decir con adoctrinamiento? ¿Me quieren decir que tenemos más de 700.000 profesores que todos los días van a sus clases y adoctrinan? ¿Se creen que la ministra llama a los profesores por las mañanas y les decimos que adoctrinen?»
Por si esto fuera poco, agregó que desde el Ministerio «no elegimos ni decidimos el contenido de ningún libro de texto. Es más, los libros son elegidos de forma colegiada los claustros de profesores de los centros a raíz de los decretos que aprobamos el Gobierno de España y las Comunidades Autónomas».
Perspectiva de género
Respecto a la perspectiva de género presente en los currículos, ha dicho que «muchas empresas, entidades e instituciones participamos de manera activa en poner la lupa en las profesiones STEM, mejorarlas. Y en eso estamos todos de acuerdo, necesitamos más mujeres con ese perfil tecnológico. Estamos comprobando que hay un descenso de estudiantes sobre esas carreras, tanto chicos como chicas pero es especialmente sangrante de chicas y mujeres».
Por eso, dijo que cuando esto sucede «no te puedes quedar en la capa, tienes que rascar y plantearte qué está pasando y lo que se ha detectado es que desde los primeros años las niñas muestran una visión negativa, por ejemplo, sobre la materia de Matemáticas y por eso nos planteamos como dar la vuelta a esa mala impresión de las niñas sobre esas materias tecnológicas»
Alegría ha hecho estas declaraciones en el marco de un desayuno informativo organizado por Europa Press.
Respecto al fin del plazo dado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) para que la Generalitat cumpla la sentencia que obliga a impartir al menos un 25 por ciento del castellano en las aulas, dijo que «hay que volver a dejar claro que un país que es un estado de Derecho las sentencias se cumplen, son de obligado cumplimiento».
Agregó que quien tendrá que dar respuesta sobre si esa sentencia se cumple o no es el TSJC y la Generalitat será la que debe trasladarle la respuesta al Tribunal y será este el que lo tenga que determinar. En cuanto al decreto que el Govern aprobará este lunes como respuesta a la sentencia y que explicita el rechazo a que el uso de las lenguas en la enseñanza se defina por porcentajes, la ministra ha dicho: «no lo conozco». Y otra vez dijo que es el TSJC el que se tiene que pronunciar.
Respecto al papel de la Alta Inspección dijo que ya se han «dirigido a la Generalitat para que nos aporte y nos traslade las soluciones y respuestas que va a dar para hacer cumplir la sentencia», pero «no nos han contestado de momento».
El Gobierno de la Generalitat tiene previsto celebrar este mediodía un Consejo Ejecutivo extraordinario para aprobar el decreto leydel catalán en la escuela, justo un día antes de que finalice el plazo fijado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña para aplicar la sentencia.
La Generalitar ya ha adelantado que el decreto ley explicitará el rechazo a que el uso de las lenguas en la enseñanza se defina por porcentajes y dará a la Conselleria de Educación la responsabilidad de validar los proyectos lingüísticos de los centros para proteger a las escuelas.
