Los ministros de Economía de los cuatro países más grandes de la UE, Alemania, Francia, Italia y España, acaban de anunciar en una videoconferencia el envío de sus respectivos planes de recuperación a la Comisión Europea, con la intención de pedir al ejecutivo comunitario que acelere su tramitación de modo que los fondos puedan estar disponibles a finales de este verano. Olaf Scholf, Bruno le Maire, Daniele Franco y Nadia Calviño comparecieron por este orden para presentar sus respectivos proyectos. Calviño, a diferencia de sus tres colegas, no ha hablado de ninguna reforma concreta.
Scholf afirmó que los cuatro países unen «fuerzas en espíritu de solidaridad para afrontar la esta situación sin precedentes» y para aprovechar la «oportunidad histórica para Europa» que no permitrá «crear mas y mejores empleos». «Hemos trabajado duro para preparar los planes. Es una buena noticia que los cuatro grandes que representan a 250 millones de personas, presenten juntos sus planes». Alemania, dijo el ministro, quiere lanzar una señal del cambio energético con inversiones masivas en el campo climático y transformación digital como el desarrollo de la producción de hidrógeno, microelectrónica y proceso de datos, «abierto a toda la UE». También ha hecho un llamamiento a los países que aún no lo han hecho que entreguen lo antes posible sus planes de reconstrucción y que ratifiquen la legislación sobre recursos propios que permitirá a la Comisión salir al mercado de deuda.
El francés Le Maire Francia ha dicho que considera «decisiva» la protección de los ciudadanos. La presentación conjunta «refleja la voluntad de cooperación entre los cuatro países en temas clave como hidrogeno, ‘cloud’ o baterías. Debemos reforzar nuestra cooperación para que Europa sea más independiente y porque la innovación es un instrumento clave para las economías». También ha hecho un llamamiento a la Comisión para que califique los planes pronto y que el dinero llegue a los gobiernos «antes del fin del verano». En estos momentos, ha dicho «hay razones para ser optimistas respecto a nuestro futuro».
El italiano fue el más específico en temas de reformas entre las que citó planes para reducir en un 40% la burocracia de la administración para facilitar el funcionamiento de las empresas y la revisión del sistema de concursos para obras públicas, de manera que se reduzca la corrupción y el despilfarro.
Calviño dijo por su parte que el plan español tiene cuatro elementos esenciales, la transición energética, la digitalización, la protección social y el elemento de género. La vicepresidenta española espera la llegada de los fondos «en la segunda mitad de este año» y en cuanto a su distribución citó un reparto del 40% para políticas verdes, un 30% para digitalización, un 10% para educación y el 7% para investigación y desarrollo. Sin embargo, no mencionó ninguna reforma concreta.
