Madrid adelanta el toque de queda a las 22.00 horas y cierra la hostelería a las 21.00h

La Comunidad de Madrid ha anunciado nuevas medidas para hacer frente a la tercera ola de la pandemia. Así, a partir del lunes 25 de enero y durante dos semanas, hasta el 8 de febrero, se aumentarán las restricciones nocturnas: desde las 22 horas hasta las 6:00 horas y se adelantará el cierre de los establecimientos de hostelería a las 21:00, por lo que solo pueden abrir en horario nocturnos farmacias, establecimientos médicos, veterinarios, gasolineras y otros lugares que presten servicios necesarios e inaplazables.

Ante el aumento generalizado de casos que se registra en España, con cifras récord como la notificada este jueves, la CAM ha decidido ampliar también las restricciones de movilidad a 56 zonas básicas y 25 municipios (hasta ahora se aplicaban a 47 zonas básicas y 19 localidades). En estas áreas viven más de 1,6 millones de madrileños, el 24% de la población en la región, y en ellas se concentra el 28% de los casos de contagios, según ha informado el consejero de Sanidad madrileño.

Estas medidas entrarán en vigor el próximo lunes 25 de enero y estarán vigentes durante al menos dos semanas, es decir, hasta el ocho de febrero incluido. Así lo ha anunciado en una rueda de prensa el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, el viceconsejero de Salud Pública y Plan COVID-19, Antonio Zapatero; y la directora general de Salud Pública, Elena Andradas.

La Comunidad de Madrid también ha prohibido las reuniones de no convivientes dentro del domicilio y ha reducido el número de personas de seis a cuatro en los establecimientos de hostelería. Además se reduce a partir del lunes el aforo de los lugares de interior al 50% y se suspende el servicio de barra en la hostelería. Otras excepciones contempladas a la norma general del 50% son un 75% en teatros, cines y otras instalaciones culturales, un 40% en las salas multiusos polivalentes (como el Wizink Center), las terrazas al aire libre que permanecen al 75%, y los centros de formación no reglada, también al 75%.

Madrid ha instado publicamente al Ministerio de Sanidad a valorar y revisar los recomendaciones sobre los usos de mascarilla ante las nuevas mutaciones del virus y ha pedido al Ejecutivo que refuerce los controles en los trenes y autobuses cuyo origen es fuera de España. Escudero ha solicitado también la colaboración «activa» de la Delegación del Gobierno y de las policías municipales para el control de estas medidas y ha recordado que las multas por incumplir estas normas van desde los 600 hasta los 600.000 euros.

Las nuevas variantes obligan a «cambiar las reglas»

En la última semana, del 11 al 17 de enero, se ha notificado un incremento del 15% respecto a la semana anterior de la incidencia de la variante británica del covid-19. “El grado de transmisibilidad cada vez es mayor. La presencia de esta cepa es de un 9% del total de casos, una cifra que se duplica cada semana. Estamos en un nuevo escenario que obliga a cambiar las reglas del juego ya que a mayor número de transmitabilidad, mayor número de casos, mayor número de hospitalizaciones y, por ende, mayor número de muertes”, ha asegurado el consejero madrileño.

«La variante británica ya es una realidad en Madrid y aplicar las medidas de control (uso de la mascarilla, el cumplimiento del aislamiento y las cuarentenas, el lavado de manos) es necesario para hacer frente a estas variantes. Si siempre recomendamos reducir la movilidad social a lo imprescindible, hoy es más importante que nunca», ha afirmado Andradas.

Las nuevas variantes del coronavirus han abierto un nuevo frente en la gestión de la pandemia. “Madrid puso en marcha un procedimiento de secuenciación en cuanto tuvo conocimiento de la aparición de la variante británica”, ha destacado Zapatero. “En las primeras semanas tuvimos una incidencia de entre 0,5 y 1%. Esta cifra ha ido ascendiendo y ahora puede estar en torno al siete por ciento”, ha resaltado.

En su intervención, el viceconsejero madrileño ha subrayado que “a pesar de la reducción de la movilidad por la borrasca Filomena, la positividad era muy alta”. “Esta variante podría ser la predominante en las próximas semanas y va a tener consecuencias en el sistema sanitario«, ha alertado.

A nivel asistencial hay un total de 3.854 pacientes ingresados en planta y 618 en las UCI. El Hospital Isabel Zendal es el centro con más hospitalizados por esta patología. «El Hospital ya ha atendido a 1.000 personas, está cumpliendo con las funciones para las que fue construido», ha aseverado Zapatero, que ha recomendado el teletrabajo durante las próximas semanas ante el impacto de la nueva variante del coronavirus y ha insistido en la necesidad de ser responsables. Aún así, Zapatero ha aclarado que, por el momento, no hay constancia de la cepa sudafricana en Madrid, aunque sí que está presente en al menos diez países europeos.

Dadas las circunstancias, Escudero ha anunciado que la Consejería de Sanidad tiene «preparada la activación del mando único sanitario en la región con el acuerdo de las clínicas privadas para organizar todos los recursos de todos los hospitales públicos y privados de la región como una sola red». Por su parte, Elena Andradas ha explicado que los criterios para confinar zonas son un umbral superior a los 1.000 casos, observación de transmisión comunitaria y una tendencia creciente significativa».

Desde la Consejería de Sanidad madrileña han preferido ser prudentes y han remitido a la sociedad al último informe del Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) que asegura que la mutación británica se caracteriza por una transmisibilidad significativamente mayor, lo que contribuye a aumentar la incidencia, las hospitalizaciones y la presión sobre el sistema sanitario desde la segunda mitad de diciembre de 2020. “En ningún momento se habla por ahora de exceso de mortalidad. No hay ninguna evidencia científica”, ha subrayado el viceconsejero.

Nueve zonas básicas y seis localidades

Desde el próximo lunes y hasta el 8 de febrero se limitará por tanto la entrada y la salida salvo por causa justificada en las zonas de La Ribota, Ramón y Cajal, Doctor Laín Entralgo y Doctor Trueta, en el municipio de Alcorcón; y en la zona básica de salud de Las Ciudades, en Getafe. Además, se amplían las restricciones a todo el perímetro del término municipal de Collado-Villalba y a todo el perímetro de Rivas-Vaciamadrid. Asimismo, se limitan las entradas y las salidas en las localidades Cercedilla, Navacerrada, Los Molinos, Colmenar de Oreja, Quijorna y Serranillos del Valle.

No obstante, dada la alta incidencia la comunidad ha decidido prorrogar las limitaciones hasta el lunes uno de febrero en todo el Distrito de Barajas en Madrid capital, con las zonas de Barajas y Alameda de Osuna. También en Madrid se mantienen las limitaciones hasta ese mismo día en las zonas de Andrés Mellado (Chamberí), Aravaca (Moncloa-Aravaca), General Moscardó (Tetuán); Sanchinarro, Virgen del Cortijo, Benita de Ávila y Silvano (Hortaleza), Mirasierra y Las Tablas (Fuencarral-El Pardo); Jazmín (Ciudad Lineal); Montesa, General Oráa y Baviera (Salamanca), y Alpes y Rejas (San Blas-Canillejas).

Durante esta semana también estará perimetrado todo el término municipal de Alcobendas, el de San Sebastián de los Reyes y el de Fuenlabrada, mientras que el municipio de Móstoles continúa con restricciones en las zonas de Felipe II, Alcalde Bartolomé González, Presentación Sabio, Dos de Mayo, El Soto y Parque Coímbra. Mientras que en Getafe se mantienen las medidas restrictivas en Getafe Norte; en Aranjuez, las de Las Olivas y Aranjuez; en San Fernando de Henares las zonas de San Fernando y Los Alperchines; en Las Rozas la zona de Las Matas; y asimismo se mantiene la zona de Torrelodones, que comprende los municipios de Torrelodones y Hoyo de Manzanares.

Este tipo de medidas también afectarán a las localidades de Fuente el Saz, San Agustín de Guadalix, El Molar, Pedrezuela, La Cabrera, Arroyomolinos, Talamanca del Jarama, Valdeolmos-Alapardo, Collado Mediano, Becerril de la Sierra, Cadalso de los Vidrios, Campo Real, Titulcia, Velilla de San Antonio, Ciempozuelos, Navalcarnero, Algete, Mejorada del Campo y Villarejo de Salvanés.

La hostelería de Madrid ha reaccionado a estas medidas y ha indicado que supondrán unas pérdidas diarias de 7,2 millones de euros y un 40% menos de actividad. «Esta situación viene a agravarse todavía más con el adelanto de la hora de cierre a las 21 horas, que adelanta una hora más el cierre establecido en las 22 horas el pasado lunes 18 de enero. Las cenas en los establecimientos de hostelería de la región pasan de estar limitadas a ser imposible dar el servicio«, han aseverado. «Esta situación es insostenible y no se entienden estas medidas hacia un sector cuya apertura no tiene una correspondencia directa en el incremento de los contagios», ha dicho Juan José Blardony, director de Hostelería Madrid.

La ocupación en UCI continua aumentando, al pasar de 606 el jueves a 618 este viernes y también han aumentado los hospitalizados, aunque han caido ligeramente los contagios, según el informe que publica a diario la Consejería de Sanidad. Además, la evolución de la incidencia acumulada del coronavirus en la Comunidad de Madrid ha aumentado este viernes al alcanzar los 904,24 casos por cada cien mil habitantes en los últimos catorce días y se posiciona por encima de la media nacional (828,57). «Si la evolución de la pandemia no es la que tiene que ser se pueden tomar medidas más estrictas», ha afirmado Zapatero. En esta misma línea hablaba el consejero de Sanidad madrileño, que considera que el Gobierno regional está preparado para que «este escenario de medidas sea insuficiente» y haya que tomar otras más restrictivas.