Grecia se «reconcilia» con su Familia Real

«La monarquía en Grecia ha sido vilipendiada durante los últimos 60 años». Lo afirma Costas Stamatópulos, historiador especializado en la Corona griega. Su última publicación -presentada el pasado lunes en Atenas con la asistencia de la Reina Doña Sofía, los Reyes Constantino y Ana María y la Princesa Irene– la conforman los tres volúmenes de los «Diarios de la Reina Federica 1938-1967», que muestran en detalle las actividades de cada día de Federica -Princesa de Hannover, de Gran Bretaña e Irlanda y de Brunswick-Luneburg- como Princesa Heredera, como Reina consorte y como Reina madre: desde su boda, el 9 de enero de 1938, con el entonces Príncipe Pablo, su primo segundo, hasta cuatro días antes del exilio al que se sumó con su hijo, el Rey Constantino, tras el fracasado contragolpe de diciembre de 1967.

La Reina Federica con sus hijas, Sofía e Irene, en 19622
La Reina Federica con sus hijas, Sofía e Irene, en 19622 – KEYSTONE Pictures USA

Como señaló durante la presentación Stéfanos Yerulanos, catedrático de Medicina y compañero de pupitre del Rey Constantino, la Reina Federica es una figura histórica importante debido a su tenaz actividad a favor de sus súbditos, aunque se le ha caricaturizado y acusado de mandona, de intervenir en la vida política del país y de abusar del poder de su marido. Dedicada, decidida, cercana y con sentido del humor, fue una mujer adorada y odiada.

Todo está anotado

Estos diarios, escritos con disciplina militar por distintas damas de compañía de la madre de la Doña Sofía, aportan detalles sobre sus visitas, viajes, audiencias, entrevistas, contactos, actos sociales, compras privadas o incluso su estado de salud. Todo está anotado y constituye una base histórica, hasta ahora desconocida, que había sido guardada de mala manera en los Archivos Generales del Estado, donde todo lo relacionado con la monarquía ha sido inaccesible para los investigadores hasta 2011. Hoy la situación es otra: después de los años de crisis, cuando el país se centraba en sobrevivir, y de la legislatura radical de Alexis Tsipras, cuando se paralizaba cualquier iniciativa relacionada con la palabra «realeza», el actual gobierno conservador está dando pasos para reconocer este pasado histórico.

La Familia Real griega en 19474
La Familia Real griega en 19474 – KEYSTONE Pictures USA

Tanto el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, como la Ministra de Cultura, Lina Medoni, han anunciado las reformas que se llevarán a cabo en la antigua finca real de Tatoi, al norte de Atenas. Para empezar, los policías que la vigilan -además de los edificios, contiene 5.000 hectáreas de parque y bosques- han recuperado su coche patrulla. Además, se están restaurando múltiples objetos y se han aprobado los proyectos de reforma de varios de los edificios, anunciándose también la creación de un museo en lo que anteriormente era la residencia informal de la Familia Real, conocida como «el palacio».

En conflicto

«Con la crisis, una parte de los griegos ha comprendido que la monarquía no era la causante de todos los males y que fueron los partidos políticos los que llevaron al país a esta situación. Y algunos se preguntan: ‘‘¿Y si la monarquía no fue tan culpable como nos la han presentado?’’», cuenta Costas Stamatópulos. Según él, desde 1961 los griegos fueron «envenenados» por una propaganda en la que mostraban a la realeza como culpable de entrometerse en la vida política y constitucional del país.

Las nuevas generaciones conocen poco su historia más reciente y muestran cierta curiosidad sobre la Familia Real griega. Y las publicaciones de Stamatópulos -de exhaustiva documentación y bibliografía- son un paso más hacia la comprensión de una realidad histórica que hasta ahora les era ajena. Es evidente, sin embargo, que tanto para este historiador como para todas las personas consultadas por ABC no habrá restauración de la monarquía en Grecia, pase lo que pase. El referéndum del 8 de diciembre 1974, organizado tras la caída de la junta de los coroneles por Constantinos Karamanlís, que se había enemistado con la Corona y especialmente con la Reina Federica, dejó claro que un 69,18 por ciento de la población estaba a favor de una república parlamentaria y solo el 30,82 estaba a favor de la monarquía. Lo que también está claro es que Costas Mitsotakis, que fue presidente del partido Nueva Democracia y primer ministro entre 1990 y 1993, permitió que el Rey Constantino se llevara a su domicilio londinense parte de sus enseres personales, algo por lo que fue muy criticado. Ahora su hijo Kiriakos se muestra favorable al reconocimiento histórico de este periodo.

Doña Sofía con Costas Stamatópulos
Doña Sofía con Costas Stamatópulos – EFE

Al lado de las víctimas

En cualquier caso, estos «Diarios» muestran que la madre de Doña Sofía no cesó de preocuparse por los griegos más necesitados y de conseguir fondos para financiar todo tipo de instituciones, sobre todo a favor de las mujeres y los niños víctimas de las secuelas de las guerras -la ocupación italiana y alemana durante la Segunda Guerra Mundial y la guerra civil- y catástrofes como inundaciones y terremotos. También, su lado más familiar, como la invitación a los Condes de Barcelona, con la Infanta Margarita, a pasar unos días en la residencia veraniega Mon Repos de la isla de Corfú, en agosto de 1956, tras el fallecimiento de su hijo Don Alfonsito.

Figuran, asimismo, detalles de los preparativos del enlace de los entonces Príncipes Doña Sofía y Don Juan Carlos en Atenas, en mayo 1962. Entre otras muchas cosas, están anotadas las llegadas de todos y cada uno de los invitados reales extranjeros. Las invitaciones del día antes del enlace en el Palacio Real, a las once de la mañana, para 3.000 invitados españoles y, después, a las nueve de la noche, para una cena con baile a los 147 miembros de familias reales, sus 22 acompañantes, 51 miembros de la corte, 38 miembros del Gobierno y del Parlamento griego, 53 miembros del cuerpo diplomático, 8 del ministerio de Exteriores, 18 representantes de las Fuerzas Armadas y 104 españoles.

Día de boda

Se describe el día de la boda, el lunes 14 de mayo, con las dos ceremonias, la católica y la ortodoxa, y los distintos almuerzos y bailes posteriores. «Llegaron a la Catedral de San Dionisio en la carroza ceremonia l el Rey Pablo acompañado de la Princesa Sofía, vestida con un traje de encaje de Bruselas. Una tiara sostenía su velo de encaje antiguo y llevaba un collar de diamantes (…)». Tras la doble ceremonia, hubo sesión de fotos y almuerzo en los jardines del Palacio Real «y a las cinco de la tarde Sus Altezas, recién casados, abandonaron el palacio en un coche sin distintivos para no ser reconocidos». Termina el día con detalles del baile, «que se prolongó hasta las 2 de la mañana».

Los nietos «griegos», los ausentes

A la presentación de estos diarios, esta semana en Atenas, además de la asistencia de los tres hijos de la Reina Federica -en orden cronológico, la Reina Sofía, el Rey Constantino con su esposa Ana María y la Princesa Irene- se esperaba la de los nietos «griegos». No se vio a ninguno: el Príncipe Nicolás, el único que reside en Grecia con su esposa, la bella venezolana Tatiana Blatnik, se ausentó a causa de una gripe. La Princesa Alexia, que vive con su marido canario, Carlos Morales, y sus cuatro hijos en Lanzarote, no se desplazó.

El Príncipe Pablo y su esposa Marie Chantal, tampoco. Se han instalado de nuevo en Nueva York junto a sus cinco hijos. La Princesa Teodora también reside en Estados Unidos, en Los Ángeles, donde busca abrirse camino como actriz bajo el nombre de Theodora Greece. Se casará este año con el abogado norteamericano Matthew Kumar, aunque aún no se sabe dónde. Y el nieto más pequeño, el Príncipe Filipos, trabaja en Manhattan como analista en la empresa de su hermano, Ortelius Capital. Filipos mantiene una relación sentimental con la joven suiza Nina Flohr, heredera del multimillonario creador de VistaJet. «Todos tienen sus estudios y su trabajo. Han aceptado la realidad y cada uno se busca la vida», comenta Katerina, una monárquica sentimental que se emocionó al saludar a los tres hijos de la Reina Federica.