Theresa May dimite como líder del Partido Conservador

Theresa May ha remitido su carta de dimisión como líder del Partido Conservador al Comité Parlamentario 1922 y ha dejado abierta la carrera para su sucesión, que arrancará oficialmente el 10 de junio. May seguirá, sin embargo, en Downing Street como primera ministra «interina» hasta la elección de un nuevo líder, prevista para la semana del 22 de julio.

La premier ha insinuado que podría seguir en su puesto hasta tener las garantías de que su sucesor o sucesora cuenta con la «confianza» del Parlamento. El ex secretario de Exteriores Boris Johnson, el secretario de Medio Ambiente Michael Gove y el actual titular del Foreign Office Jeremy Hunt parten como favoritos en una lista provisional de 11 candidatos que será hecha pública el lunes.

Los diputados ‘tories’ elegirán sus candidatos en una tanda de votos secretos (el 13, 18, 19 y 20) hasta dejar la carrera entre los dos que cuenten con un mayor respaldo parlamentario. Los candidatos finales tendrán por delante un mes para hacer campaña ante la votación definitiva, en la que participarán los 160.000 militantes conservadores.

El nombre del nuevo líder conservador se sabrá en la última semana de julio, y el primer reto será posiblemente superar una moción de confianza que planea presentar el líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, que reclama la celebración de elecciones generales. El Partido Conservador necesita el repaldo de al menos la mitad de los 10 diputados del Partido Democrático Unionista (DUP) para lograr la mayoría, por lo que los unionistas norirlandeses tendrán finalmente la llave del próximo primer ministro.

Al menos uno de los candidatos, el ex secretario del Brexit Dominic Raab, ha insinuado que si llega a primer ministro podría solicitar a la Reina el permiso para cerrar anticipadamente el período de sesiones de la Cámara de los Comunes y evitar así el bloqueo parlamentario de un «no acuerdo» con la UE, con el objetivo de culminar el Brexit en la fecha prevista, el 31 de octubre.

En el momento de anticipar su dimisión como líder conservadora, la propia Theresa May se mostró partidaria de salir de la UE «de una forma ordenada y con un acuerdo» y pidió a su sucesor o sucesora que busque el «consenso». La dimisión de May se produce al cabo de casi tres años de su llegada a Downing Street tras la renuncia de David Cameron por la victoria del Brexit.

La premier, que llegó al cargo con 59 años, tras su paso por el Ministerio de Interior y con la vitolar de la «nueva Dama de Hierrro», sufrió un tremendo desgaste con el paso de los meses, hasta culminar con el triple rechazo a su acuerdo con Bruselas en el Parlamento, torpedeada por el ala dura de su propio partido. En el anunció de su dimisión aseguró que se marcha «con el lamento de no haber sido capaz de culminar el Brexit».