El presidente del PP Pablo Casado ha querido lanzar otro guiño al PNV durante su visita a Vitoria al reafirmar con solemnidad «su compromiso con el Concierto» al ser un instrumento político que «es bueno para el Pais Vasco» y está blindado por la Constitución. Casado se ha comprometido a «achicharrarse si es necesario» en el inicio de un hipotético mandato para aplicar un amplio abanico de reformas económicas.
Pablo Casado ha lanzado desde Vitoria el segundo guiño en apenas diez días hacia el PNV de Andoni Ortuzar. Primero fue la distinción que realizó en Pamplona entre los «independentistas» catalanes y los nacionalistas vascos. Hoy ha querido subrayar en el final de su intervención no solo su compromiso con el Concierto sino también la cercanía con el PNV en su concepción socioeconómica. Casado ha reconocido que el PNV «ha sido y es» uno de los aliados de Pedro Sánchez aunque ha deslizado la advertencia de que también lo es el líder de Sortu Arnaldo Otegi.
Sin ningún reproche, Casado le ha recordado a los nacionalistas que Sánchez planteó un presupuesto con 6.000 millones de euros de desajuste. Un mensaje que incide en las coincidencias en materia económica entre el PP y el PNV.
Casado además se ha comprometido a poner en marcha con rapidez su plan de reformas aunque le suponga «achicharrarse» ante posibles protestas. «Llevamos demasiado tiempo de política de salón», ha afirmado tras explicar un conjunto de reformas que han satisfecho a la amplia representación de empresarios vascos presentes.
