Cospedal apoya de forma pública a Casado: «Ofrece un proyecto ilusionante en el PP»

En la recta final antes del proceso de elección del sucesor de Rajoy en el PP, Pablo Casado ha obtenido hoy lunes un apoyo público que su equipo considera fundamental: el de María Dolores de Cospedal, quien quedó tercera en las primarias de los militantes, y cuyos votos unidos a los suyos superarían a los de Soraya Sáenz de Santamaría, al menos entre los afiliados. La cuestión es que el día 21 serán los 3.082 compromisarios los que decidirán con su voto.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha mostrado su apoyo a Pablo Casado al subrayar que puede ser «una magnífica opción» para presidir el PP y conseguir un partido «fuerte y unido» que esté preparado para luchar por España y los españoles.

En declaraciones a los periodistas antes de asistir a un desayuno informativo de Nueva Economía Forum con Casado, Cospedal ha manifestado que su presencia en este foro se debe a que el PP tiene que ofrecer a sus militantes y votantes un proyecto «ilusionante y de futuro».

«Proyecto común»

Casado se ha referido a todos sus apoyos, y de forma concreta a Cospedal, su «jefa, amiga y referencia indiscutible». Ha recordado que la conoció cuando ella era consejera de Transportes en Madrid. «Conocí a una persona joven, pero con mucha experiencia y entusiasmo».

El candidato del PP ha agradecido a Cospedal su «responsabilidad» al presentarse en este congreso. Casado también ha agradecido a Adolfo Suárez Illana su respaldo. La figura de Rajoy ha estado presente en el discurso de Casado, para ensalzar que haya salvado la soberanía nacional, 200 años después de que se perder por última vez.

Casado ha querido recordar a Suárez, el padre, el que fue presidente del Gobierno. Después de una campaña en la que se había escorado a la derecha, el candidato ha intentado mostrar su identificación con ese proyecto de centro que lideró Adolfo Suárez. «El gran arquitecto del entramado constitucional, admirado en todo el mundo, consiguió transformar el país y darle un marco constituyente», ha señalado. Ha hablado del Suárez «audaz, carismático, seductor, que consiguió en dos páginas, con la la reforma política, todo ese milagro que dio lugar al marco de convivencia».

«Yo creo en la Constitución, no solo como punto de partida, sino como punto de culminación», ha subrayado. Pero ha defendido un reformismo, que partan de los principios a partir de los cuales se ganaron las elecciones. «Esto no es una secta, es un proyecto en común», ha señalado.

Casado ha propuesto una reforma de la ley electoral, para garantizar que gobierne la lista más votada, a través de una segunda vuelta en algunos tramos, para que no se pacte en los despachos. Y también una reforma para evitar que sean los nacionalistas los que decidan el color de los gobiernos y sus políticas- Cree que no es necesario reformar la Constitución, porque la Constitución prevé hasta 400 diputados en el Congreso.

Partido dual

En el turno de preguntas, Casado ha aprovechado para defender al Rey, del que ha destacado su discurso del 3 de octubre, «que pasará a la historia.» Tanto él como su padre, ha dicho, forman parte de la mejor historia de España. Y no apoyará como presidente del PP ninguna comisión de investigación sobre la Monarquía.

Respecto a Soraya Sáenz de Santamaría, Casado ha propuesto un partido dual, nacional en el mensaje, vertebrado en lo que se defienda en la sociedad, y descentralizado y respetuoso con las decisiones regionales y provinciales. «No veo un ejecutivo nacional que se ponga a reestructurar rápidamente el partido». «Me he comprometido a que los candidatos autonómicos y municipales se conozcan cuanto antes».

En el coloquio se ha inquirido a Casado sobre la posibilidad de que Mariano Rajoy, en su discurso del viernes, pida una lista de unidad. No cree en esa posibilidad: «Rajoy es una persona previsible, y él dijo que pedía una integración después de la votación, con unas normas que se dieron, que yo no propuse, y que hay que cumplir». A su juicio, la actitud de Rajoy está siendo impecable, y muy respetuoso con este procedimiento.