Unos 600 militares, guardias civiles y policías integran el dispositivo por la avenida extraordinaria

Tanto la Unidad Militar de Emergencias (UME), como la Policía Nacional y la Guardia Civil están en alerta ante la crecida del Ebro. Para ello, se ha preparado un dispositivo especial que intentará prevenir y atajar, en su caso, cualquier consecuencia que se produzca debido a la avenida extraordinaria del río Ebro. Unos 600 efectivos lo integran.

El BIEM IV de la UME fue activado el jueves a las 20.00 para intervenir en la comarca de la Ribera Alta. Actúa con el apoyo de 2 helicópteros UME que inspeccionan el río desde Castejón hasta la localidad de Pastriz.

En el día de ayer, en Novillas, una sección del Batallón (sección de Zapadores) realizó trabajos de instalación de elementos de contención con apoyo de dos pequeñas máquinas y en Cabañas de Ebro otra sección de Batallón realizó trabajos de achique, así como trabajos de vigilancia por filtraciones en las motas.

Este viernes se está trabajando con una sección de Intervención y un equipo de máquinas en Novillas continuando con los trabajos de contención y refuerzo de motas y con otra sección en Cabañas realizando labores de achique. La Policía Militar está llevando a cabo desde el jueves labores de reconocimiento y seguridad en la zona.

La UME ha desplegado a cerca de 200 militares, 60 vehículos y dos helicópteros para hacer frente a la avenida del río Ebro. Por su parte, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se mantienen en alerta y en coordinación con el resto de los organismos competentes ante cualquier aviso de intervención que afecte a la seguridad de las personas y de sus bienes.

La Guardia Civil ha desplegado efectivos de Tráfico, del Grupo de Reserva y Seguridad, de Seguridad Ciudadana, Actividades Subacuáticas o Aéreas, entre otros.

Cabe destacar la rapidez con la que efectivos de la Guardia Civil han recuperado en la mañana de este viernes a dos kilómetros del lugar de su desaparición el cuerpo sin vida del pastor M.L.D. fallecido a causa de la crecida del río Grío.

En cuanto a la Policía Nacional, agentes de Seguridad Ciudadana y Unidad de Intervención Policial, además del Servicio de Helicóptero, incrementan el operativo de seguridad ante esta avenida extraordinaria del río. En total, unos 400 efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se encuentran operativos.

Previsiones y trabajos de la CHE

En el eje del Ebro, aguas abajo de Castejón (Navarra), tras la confluencia de los caudales máximos de los principales afluentes (Ega, Arga, Aragón y el propio Ebro) la avenida es extraordinaria y similar a la de febrero-marzo del año 2015, o a la de febrero de 2003. En el río Ebro en Castejón (tras la afluencia del Aragón y Arga) el caudal máximo se ha registrado a las 10.00, con un valor de 2.682 m³/s, coincidente con los datos pronosticados por el modelo de previsión hidrológica.

En la cuenca del río Aragón, la gestión de Itoiz y Yesa continúa laminando la avenida. El caudal máximo de entrada en Yesa ha sido del entorno de 500 m³/s y salida de 5 m³/s y en Itoiz de 500 m³/s soltándose 100 m³/s, evitando la inundación del casco urbano de Sangüesa (caudal de daños 900 m³/s) y otras poblaciones. El caudal de salida actual en Yesa es de 50 m³/s y en Itoiz de 150 m³/s. La laminación de estos embalses ha supuesto una reducción de unos 600 m3/s en el eje del Ebro.

La Confederación ha mantenido comunicación y coordinación con Protección Civil de las Comunidades Autónomas y Delegación de Gobierno, desde el viernes 6 de abril, antes del inicio del anterior episodio de crecida ordinaria que previamente se ha vivido en la cuenca del Ebro.

La CHE ha estado facilitando información de continuo: en tiempo real a través del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) Ebro y de sus perfiles oficiales en redes sociales, y a través de las comunicaciones a Protección Civil.

La Confederación Hidrográfica del Ebro tiene movilizado a su personal, para la vigilancia, como para la realización de actuaciones, como la llevada a cabo el jueves en las dos motas defensivas del casco urbano de Novillas, que fueron niveladas antes de la llegada del episodio.

El Gobierno, a través del MAPAMA y de su Organismo de cuenca, está actuando en el marco de sus competencias, y lo seguirá haciendo (como hizo tras las anteriores crecidas en la cuenca en 2015, cuando invirtió 30 millones de euros en emergencias en la cuenca del Ebro, que permitieron incrementar la seguridad de los cascos urbanos).

Coordinación institucional

La Delegación del Gobierno de España en Aragón, el Gobierno de Aragón, Protección Civil, cuerpos de seguridad y emergencias, la Unidad Militar de Emergencias y entidades locales trabajan coordinadamente para minimizar los riesgos de esta avenida extraordinaria.