Aragón pide un «esfuerzo» al Gobierno central para aumentar el personal de la Unidad de Policía Adscrita

El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, ha pedido este viernes un «esfuerzo» al Gobierno central para aumentar el personal de la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma. Lo ha hecho en la toma de posesión del nuevo comisario jefe de esta unidad, Antonio Rúa, que releva a Antonio Placer, a quien Guillén ha entregado una placa y un diploma por su labor.

Guillén ha deseado así que continúe el «espíritu de colaboración» entre el Ejecutivo autonómico y el Gobierno central que permitió en 2007 la puesta en funcionamiento de esta Unidad de Policía Adscrita. En concreto, el consejero, consciente de las «estrecheces económicas», ha pedido que se avance en la cobertura de las 18 vacantes existentes en el personal activo «para ampliar y mejorar la cobertura de las funciones actuales de la policía adscrita y asumir otras como tienen en otras comunidades autónomas».

El consejero también espera que, como se planteó en la última Comisión Mixta, a partir del próximo año pueda empezar la reconversión en activas del cerca de medio centenar de plazas de segunda actividad que se suprimieron al desaparecer esta figura con la Ley de personal del Cuerpo Nacional de Policía de 2015. «Ojalá la plantilla actual de 135 agentes, incluidos los tres en segunda actividad, alcance e incluso supere los 200 efectivos de las distintas escalas de la Policía con los que fue diseñada en su día, entre los 150 en activo y los 50 en segunda actividad», ha deseado Guillén.

Vicente Guillén ha destacado además que «la estrecha vinculación y prudente adecuación al ámbito competencial y disponibilidad presupuestaria» ha sido el marco desde el que ha tenido que operar esta unidad. Ha recordado que el Presupuesto de Aragón para 2018 contempla, en este sentido, medidas como nuevos equipos informáticos para oficinas, chalecos «que aumentarán la seguridad personal de los agentes» e inversiones en la comisaría de Teruel y actuaciones relativas a la coordinación con policías locales.

Todo ello, ha apuntado, «para proteger derechos básicos, en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, como la libertad, la propia vida o la propiedad en una relación lo más cercana posible con los ciudadanos». Guillén ha concluido su intervención destacando el «ejemplo de civismo» que, a su juicio, constituyen los dos guardias civiles y el ganadero José Luis Iranzo, asesinados en Andorra el pasado mes de diciembre.

Los objetivos del nuevo comisario jefe

También el nuevo comisario jefe de la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad, Antonio Rúa, se ha referido a la falta de personal «para llegar a desempeñar a pleno rendimiento las funciones y llevar a buen término sus objetivos». Entre ellos, están hacer que la unidad sea «cada día más operativa», «complementar» el desarrollo de sus competencias e intentar dar «una mayor visibilidad» a la unidad para que la ciudanía la perciba de forma «más próxima». Rúa también quiere mantener una relación «de colaboración y apoyo» con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, por último, mantener «una buena relación» con las organizaciones sindicales.

Gallego «de nacimiento, de corazón y convicción», Antonio Rúa se siente unido a Aragón, donde llegó con 18 años, y asume el nuevo cargo «con ilusión». Su primer destino en la Jefatura Superior de Navarra entre 1979 y 1985 fue la Brigada de Policía Judicial en Estupefacientes, cometido que mantuvo al incorporarse a la Jefatura Superior de Policía de Aragón en 1986, en la Brigada Provincial de Zaragoza.

Fue secretario general de la Jefatura Superior de Policía de Aragón hasta enero de 2012. Tras ascender a comisario en 2015, ha permanecido hasta la fecha como jefe de la Brigada de Información. En los últimos 10 años, ha sido el responsable operativo de la lucha antiterrorista tanto contra ETA y Grapo como contra las organizaciones de origen yihadista. Posee numerosas distinciones públicas, entre otras la Cruz al Mérito Policial con distintivo rojo, uno de los principales reconocimientos del cuerpo para el personal en activo.

El acto de toma de posesión ha contado con la asistencia del delegado del Gobierno de España en Aragón, Gustavo Alcalde; la secretaria segunda de las Cortes de Aragón, Yolanda Vallés, o el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), Manuel Bellido, entre otras autoridades.