La obtención de solares y la promoción de bloques de manera conjunta entre los ayuntamientos y Suelo y Vivienda de Aragón pretende paliar la falta de inmuebles de alquiler o compra en las localidades
El Gobierno de Aragón quiere abordar por todos los frentes posibles la falta de vivienda disponible para alquiler y compra en el medio rural y urbano de la comunidad autónoma. El problema es común en los 731 municipios aragoneses, aunque con matices, y desde el Departamento de Fomento, Vivienda y Logística del Ejecutivo aragonés se ha trazado un plan para afrontar las diferentes causas. El Programa +3.000 se dirige específicamente a los municipios de más de 3.000 habitantes y menos de 20.000, es decir, las localidades de tamaño mediano en Aragón, que no son las más numerosas, pero que ejercen un poder tractor en el territorio y suelen cumplir, además, una función de cohesión social por su habitual posición de cabeceras comarcales. El Gobierno de Aragón quiere destinar al menos seis millones de euros para este fin. El presupuesto de 2024 ya recogía un millón de euros para los primeros trámites de este plan.
Esta iniciativa se suma al resto de programas ya presentados por el consejero de Vivienda, Octavio López, como el Programa Promueve de fomento a la vivienda protegida y dirigido a los promotores (9 millones de euros); el programa Compra tu vivienda, para fomentar la adquisición de VPA (22,5 millones de euros); el programa 700, con el objetivo de regenerar los cascos urbanos de los municipios de menos de 3.000 habitantes (52,5 millones de euros); o el Más Vivienda, Mejor Turismo, dirigido a municipios con gran actividad turística (65 millones de euros). En total, 155 millones de euros de inversión para una de las políticas prioritarias del Ejecutivo de Jorge Azcón.
Del programa destinado a los municipios de más de 3.000 y menos de 20.000 habitantes podrán beneficiarse en Aragón un total de 39 municipios, según los registros demográficos del INE. Se trata en muchas ocasiones de cabeceras comarcales. Son Calatayud, Utebo, Monzón, Barbastro, Ejea de los Caballeros, Alcañiz, Fraga, Cuarte de Huerva, Jaca, Tarazona, Caspe, Binéfar, Sabiñánigo, Zuera, La Almunia de Doña Godina, Alagón, Andorra, Tauste, La Muela, La Puebla de Alfindén, María de Huerva, Borja, Villanueva de Gállego, Fuentes de Ebro, Cadrete, Pinseque, Épila, Calamocha, Sariñena, Pedrola, Calanda, Cariñena, Tamarite de Litera, San Mateo de Gállego, Graus, Alcorisa, Utrillas, Mallén y Ricla.
Todos ellos podrán beneficiarse de alguno de los planes que prevé el Programa +3.000, que se divide, a su vez, en dos franjas, para los municipios de hasta 8.000 vecinos, y los de mayor tamaño. El objeto de esta iniciativa es actuar en suelos patrimoniales de los ayuntamientos que sirvan para generar viviendas con destino al alquiler, al alquiler con opción a compra, o a la compra directamente. La primera partida de un millón en el presupuesto del pasado año se destinó a la obtención de suelos y la firma de convenios de colaboración con los ayuntamientos.
En función de la población
En el Programa +3.000 se plantean dos opciones para el desarrollo de viviendas en función del número de habitantes. Por un lado, el Gobierno de Aragón plantea las concesiones de derecho de superficie para alquileres con opción a compra. En este caso, el Ejecutivo aragonés plantea que se haga para agrupaciones de municipios, con núcleos de población superior a 50.000 habitantes, para la construcción en un sistema de colaboración público-privada de entre 100 y 150 viviendas.
Por otra parte, el programa define una segunda vía de trabajo, consistente en la firma de convenios individuales entre Suelo y Vivienda de Aragón y los ayuntamientos interesados en la promoción de vivienda. Aquí, además, el departamento establece diferencias en las condiciones de financiación e impulso de las nuevas promociones en función, también, del tamaño de las localidades. Para las más grandes, de 8.000 a 20.000 vecinos, plantea la posibilidad de que el Gobierno de Aragón, a través de Suelo y Vivienda de Aragón, asuma el 50% del coste de la obra, además de la creación del proyecto y de asumir el coste de la dirección técnica. Por su parte, el ayuntamiento aportaría el suelo y asumiría el 50% del coste de la obra.
A esta línea de financiación se podrían sumar ayuntamientos como Calatayud, Utebo, Monzón, Barbastro, Ejea de los Caballeros, Alcañiz, Fraga, Cuarte de Huerva, Jaca, Tarazona, Caspe, Binéfar, Sabiñánigo, Zuera y La Almunia de Doña Godina. En este caso, una vez finalizada la obra, el ayuntamiento recuperaría el 50% de las viviendas para destinarlas a alquiler o la compra, y el Gobierno de Aragón gestionaría el 50% en el régimen que considere.
Para los municipios de entre 3.000 y 8.000 vecinos, el plan prevé que el Gobierno de Aragón a través de Suelo y Vivienda de Aragón asuma hasta el 65% de la obra, además de aportar el proyecto y la dirección técnica, mientras que los consistorios más pequeños asumirían el 35%, más la aportación del suelo. Así, cuando finalicen los trabajos, el ayuntamiento en cuestión recuperaría el 35% de las viviendas y el Gobierno de Aragón, el 65%. Como en el caso de las localidades de mayor tamaño, las viviendas podrán destinarse tanto a régimen de alquiler, como de compra.
Con este programa, el Gobierno de Aragón completaría el mapa del impulso a la vivienda en todos los municipios, con el objetivo de rebajar la tensión en el mercado del alquiler.